// Por: Oscar Adame

mié 13 noviembre, 2019

Este año se marcaron 10 años del estreno del álbum más aclamado de la carrera de Animal Collective, el excéntrico material de pop psicodélico Merriweather Post Pavilion (2009). Sin embargo, hasta ahora sus integrantes se habían mantenido alejados de cualquier forma de celebrar o siquiera recordar a aquel álbum que se ha convertido en un lanzamiento imprescindible para comprender al desarrollo de la música pop de la actual década. 

Hoy la banda rompió con ese silencio con el anuncio de Ballet Slippers (2019), un álbum en vivo que incluye grabaciones de varios de los conciertos que la banda dio como parte de la promoción del álbum previamente nombrado. Entre las nuevas interpretaciones que hallaremos dentro del material, se encuentran nuevas versiones de ‘In The Flowers’, ‘Summertime Clothes’, ‘Guys Eyes’ y por supuesto ‘My Girls’.

El mismo saldrá a la venta el próximo 22 de noviembre y cuenta con la edición de Panda Bear, el líder del proyecto. Puedes leer nuestra entrevista en exclusiva con él a través del siguiente enlace.

La influencia masiva de Animal Collective

Colectivo de pop experimental que se formó en la ciudad de Baltimore, Maryland, en el año 2003. El proyecto fue creado por Avey Tare (David Portner), Rand Bear (Noah Lennox), Deakin (Josh Dibb) y Geologist (Brian Weitz), con participaciones de los cuatro miembros siendo reiterativas en cada uno de sus lanzamientos. 

A lo largo de sus quince años de carrera, la banda se ha establecido como una que siempre logra sorprender con los cambios discursivos y sonoros de sus materiales de estudio. Su disco debut Spirit They’re Gone, Spirit The’ve Vanished (2000), es un disco con melodías de neo-psicodelia ocultas debajo de efectos de sonido reverberantes, con una gran influencia del Yerself Is Steam (1991) de Mercury Rev. Dance Manatee (2001) es un disco ambiental con experimentos drone influido en Lou Reed. Campfire Songs (2003) y Here Comes The Indian (2004) son re-interpretaciones de las canciones y ritmos típicos de las comunidades indias de los Estados Unidos. 

Fue hasta Feels (2005) y Strawberry Jam (2007) que la banda logró el reconocimiento internacional con un sonido noise mucho más duro y directo. Sin embargo no fueron estrellas hasta su cambio sonoro de pop psicodélico con influencias dreampop en Merriweather Post Pavillion (2009), disco que fue considerado por decenas de medios como el mejor del año.

La importancia de Panda Bear

Noah Lennox es un hombre que es mejor conocido por su nombre artístico de Panda Bear, bajo el cual se ha posicionado como uno de los compositores y productores más influyentes del nuevo milenio por su trabajo como fundador de Animal Collective y por su revolucionaria carrera solista.

En una retrospectiva a Person Pitch (2007), Pitchfork afirmó que Panda Bear es la cabeza detrás de la apertura que han mostrado en la última década los exponentes de cualquier tipo de rock-alternativo por experimentar con otro tipo de géneros. El álbum fue nombrado como uno de los 10 mejores de la década por la respetada publicación gracias a su revolucionaria forma de integrar beats minimal-techno sobre elementos synth-pop en estructuras progresivas que se basan por completo en la creación de loops creados con grabaciones que él mismo encontró en la Internet. Fue un material remarcable, una influencia mayor en la creación del vaporwave y una maravilla generada por las limitaciones del mismo artista. 

Por otro lado, su material con Animal Collective es más que conocido. Posicionarlo como uno de los proyectos más exitosos a nivel crítico y comercial en la historia de la psicodelia es decir muy poco respecto al nivel de influencia que ha tenido. Abanderados de una generación de músicos cansados de las estructuras de pop convencionales y las aburridas limitaciones de las guitarras eléctricas, Noah Lennox se unió a Avey Tare para crear locuras repletas de disonancias, fondos electrónicos y cantos pegajosos que sirven como gritos deseosos de experimentar a la vida en su totalidad. 

Su discografía carga con la libertad que uno siente en su infancia, sin sesgos políticos o culturales. Sin el esnobismo que envuelve a millones de escuchas alrededor del mundo, quienes desprecian a las expresiones musicales que no se amoldan a su visión limitada del mundo, de la misma forma en la cual millones de personas desprecian a aquel que carga con una ideología política distinta.