A través de su cuenta oficial de youtube, el cantautor estadounidense Sufjan Stevens ofreció un nuevo adelanto de su próximo álbum de estudio Aphoria (2020), el cual saldrá a la venta el 27 de marzo a través de su sello discográfico Asthmatic Kitty. Se trata de ‘The Runaround’ una canción instrumental de tres minutos y medio en los cuales combina su interés por la música electrónica experimental con elementos orgánicos, creando un paisaje dramático que sobresale por su belleza.
Lo más interesante del lanzamiento de este álbum es que se trata de un material que fue compuesto y grabado en colaboración con su padrastro Lowell Brams, quien es co-fundador de su sello y de quien se habla bastante en su pasado álbum del músico Carrie and Lowell (2015). Su involucramiento en el álbum está ligado directamente con su temática, pues a palabras de Stevens «relata una historia sobre la admiración y la mentoría. Él ha estado ahí desde que tengo cinco años, ha sido un largo trayecto y este álbum es la síntesis de lo que hemos vivido».
Aunado a todo esto, el autor de ‘Chicago’ y ‘Futile Devices’ compartió una playlist de canciones que lo ayudaron a construir a este material que estará conformado por 21 canciones, la cual incluye piezas de Boards Of Canada, Enya, Colin Stetson, Helado Negro y el mismo Sufjan Stevens.
Multinstrumentista, productor y compositor nacido en Detroit, Michigan, el primero de julio de 1975, Sufjan Stevens es uno de los artistas con mayor aclamación crítica que nos ha dado este milenio. Tras debutar con A Sun Came (1999), el compositor se postró como una joven promesa del folk, rompiendo por completo las expectativas que se tenían sobre él con su siguiente material Enjoy Your Rabbit (2001), un álbum instrumental de música electrónica con influencias chiptune y glitch.
Desde entonces, el músico no ha dejado de sorprender, alcanzando una fama nacional con Michigan (2003) y Seven Swans (2004), las cuales presentan un viaje de narrativa a través de los mayores temores que ha vivido el músico a lo largo de su vida. Sus piezas cargan con una sensibilidad intensa que llega bien acompañada por su instrumentación orquestal y ecléctica.
Sin embargo, el punto más importante de su carrera llegó con el álbum Come On, Feel The Illinois (2005), álbum que fue considerado por medios como Pitchfork y la revista Time como el mejor producto discográfico de su año de publicación. Material que además lo convirtió en una figura idealizada por parte de los escuchas interesados en la música independiente.
La nostálgica combinación de sonidos, en su mayoría elementos retomados de las icónicas bandas escolares, le agregaron una capa de inocencia única a sus bellos relatos, tristes por naturaleza, en donde profundiza en sentimientos derivados de la muerte, el abandono, la desesperanza y el odio propio. Historias que tocan temas emocionales, pero que no son para nada ingenuos. La madurez de Stevens se da a notar en cada una de las líneas de aquel material, viendo con curiosidad todo lo dañino del exterior, sin culpabilizarlo de ello. Es una colección de historias de las cuales Sufjan aprendió, cantos que terminan en hermosas moralejas sobre la espiritualidad y el amor.