// Por: Oscar Adame

vie 22 octubre, 2021

Por: Carlos Miguel Rosales

Duna (2021) es la tercera reintrepretación del clásico de la ciencia ficción de Frank Herbert, ahora para la pantalla grande, dirigida por Denis Villeneuve. Villeneuve realiza un compleja adaptación que cubre la intriga política, el mesianismo, lo sobrenatural y la acción de un universo complejo, hermosamente realizado con la fotografía del nominado al Premio de la Academia, Greig Fraser, y la siempre efectiva partitura de Hans Zimmer.

Pero probablemente no es para todo el público, ya que es un platillo que se cocina a fuego lento y deja la sensación estar viendo el primer episodio de una serie (lo cual no está lejos de la realidad). La cual no sabemos aun si continuará o nos dejará en suspenso. Lo que podría aumentar o disminuir la experiencia dependiendo del futuro de la franquicia.

Duna (2021) corre con la suerte de que recientemente el público ha disfrutado de experiencias como Game of Thrones o House of Cards, que se nutren de la intriga política, más que de la acción tipo Marvel, de constantes batallas o efectos explosivos. Es una película que reta al espectador a una experiencia de dos horas y media, en el que dos terceras partes establecen son de planteamiento. Seguramente dejará satisfechos a los fans de Duna, pero que deja la interrogante de como será recibido por el público en general.

La película cuenta con un elenco de primera línea con Timothée Chalament, Rebecca Fegusson, Oscar Isaac, Jason Momoa, Josh Brolin, Stellan Skarsgård, Javier Bardem, Cheng Chang, Stephen Mckinley Henderson, Dave Bautista, Charlotte Rampling, Babs Olusanmokun y Zendeya.

¿De que trata?

La casa Atreides acepta la encomienda de administrar el planeta Arrakis (Duna) por parte del Emperador. Arrakis es la fuente de “la especia” una droga que extiende la vida, proporciona niveles de pensamiento sobre-humao y sirve como la mayor fuente de energía para el viaje interstelar, que es motor de la economía espacial. La encomienda no hace feliz a la casa Harkonnen, rival de Atreides, que hasta el momento había administrado el planeta. Además el planeta esta habitado por los Fremen un pueblo que vive en lo profundo del desierto en duras condiciones de vida y que ha sido marginado por los explotadores de Arrakis por décadas, lo que los ha llevado a ser un pueblo feroz.

El duque Leto Atreides (Oscar Isaac) viaja a Arrakis con su concubina, Lady Jessica (Rebecca Ferguson) que es parte de la hermandad Bene Gesserit (una organización conformada por mujeres que se mueven en las sombras de la política y son conocidas por sus poderes como brujas), su hijo Paul (Timothée Chalament) y sus leales Duncan Idaho (Jason Momoa), Gurney Halleck (Josh Brolin), Thuflir Hawat (Stephen Mckinley Henderson) y Dr. Wellington Yueh (Chang Chen). Mientras la casa Harkonnen, lidereada por el barón Vladimir Harkonnen no piensan dejar el poder tan fácilmente.

Mientras Paul se debate entre su futuro como heredero de la casa Atraides, la herencia Bene Gesserit de su madre y sueños proféticos que involucran a una mujer y la profecía de un mesías que cambiará el futuro de la galaxia.

La controversia

Duna ha sufrido como otras producciones varios retrasos en su estreno debido a la pandemia. El cineasta franco-canadiense Denis Villeneuve ha expresado en múltiples ocasiones su descontento con el estreno simultáneo de Duna en cines y la plataforma de HBOmax por considerar que esto disminuirá la recaudación de la película  y sus posibilidades de un secuela.  Además su estreno simultaneo ha facilitado su distribución en la piratería en las redes, lo que también afectará a su rendimiento en taquilla.

¿Obra maestra?

Etiquetar Duna como una obra maestra es una cuestión condicional.  Duna a pesar de todas sus cualidades es una obra episódica, lo que se ve reflejado en la poca participación de algunos de sus personajes que tendrá un papel más protagónico conforme evoluciones la historia.

Si se continua con su desarrollo la saga podría llegar a tener la importancia de la trilogía de El Señor de Los Anillos de Peter Jackson, pero a diferencia de esta, Warner no autorizó la filmación simultanea de sus secuelas, ya que proyectos anteriores de Villeneuve como Blade Runner 2049 no han disfrutado del éxito taquillero que se esperaba.