// Por: Staff

mar 28 diciembre, 2021

Por: Carlos Miguel Rosales

Decir que Don’t Look Up (2021) ha recibido críticas mixtas desde su estreno sería un sobreentendido. La crítica hasta el momento le ha dado un 55 por ciento de aprobación en Rotten Tomatoes y puede ser que conforme pasen los días disminuya ese número. Pero, ¿realmente es tan mala como dicen?

Adam Mckay se ha vuelto en un mordaz crítico de la política y la sociedad americana con películas como The Big Short, un filme que mostraba el corruputo mundo del mercado hipotecario y Vice, una especie de biografía sobre el polémico vicepresidente de George W. Bush.  Así que esta no podía ser una excepción.

Don’t Look Up en principio se presenta como una sátira. En ella dos astrónomos, el Doctor Randall Mindy (Leonardo DiCaprio) y la estudiante de posgrado Kate Dibiasky (Jennifer Lawrence) descubren que un comenta se estrellará contra la tierra dentro de seis meses, en lo que será un evento de extinción global.

Los astrónomos buscan difundir este descubrimiento al mundo, para evitar la extinción de la raza humana, solo para encontrar una sociedad superficial, un sistema político descaradamente inepto y corrupto, y a un sector empresarial que solo busca sacar la mejor tajada.

Este filme de Adam McKay se describa como una sátira, nos enfrenta a una realidad que no es solamente gringa. Ante el manejo de una crisis mundial como la que ha vivido el mundo en los último dos años, hemos presenciado lo mejor y lo peor de la humanidad. Lo que hace un par de años hubiera parecido una parodia, sátira o una simple exageración, ahora en muchos aspectos (sino es que en todos) no está lejana de la realidad, y una que como siempre podría superar a la ficción.

Una crítica mordaz con algo de luz

El defecto que encuentro en Don’t Look Up es su gringo-centrismo, que tampoco es algo nuevo, lo vemos todos el tiempo en las películas palomeras de Hollywood. Pero que también podría estar justificado ante la crítica a la sociedad norteamericana y su destino manifiesto, el delirio de creerse los líderes y salvadores del mundo.

Don’t Look cuenta con un elenco multiestelar encabezado por Leonardo DiCaprio y Jennifer Lawrence, quienes a primera vista podrían rayar en la sobreactuación; sin embargo, sus personajes se enfrentan ante la pasividad de una sociedad que no digiere que se encuentra ante un peligro apocalíptico.

Una serie de personajes mediáticos y triviales serán el obstáculo de los astrónomos; como  los presentadores de televisión Jack Bremmer (Tyler Perry), Brie Evantee (una excelente Cate Blanchett); o los corruptos Jason Orlean (un insoportable Jonah Hill) y la presidenta de los EU (la siempre confiable Meryl Streep); o el empresario estilo Elon Musk (Mark Rylance) que solo buscan sacar tajada para promover su tecnología. Junto a otra serie de personajes que desacreditaran el descubrimiento y su importancia a lo largo de la película.

A pesar de esta crítica mordaz, McKay encuentra la humanidad y la redención de la humanidad en algunos personajes.  El Dr. Teddy Oglethorpe (Rob Morgan), incondicional aliado de Mindy y Dibiasky; Yule, un skater evangélico que está interesado en Kate; y la familia del doctor Mindy, encabezada por la actriz Melanie Lynskey (quien ha tenido un gran año al aparecer en esta película y en la serie de Paramount Plus YellowJackets).

Estos personajes y el viaje de los protagonistas nos muestran el lado humano y esperanzador de la humanidad, una sociedad mediatizada que muchas veces se niega a ver la verdad aunque se la pongan enfrente.

Don’t Look Up se estrenó en Netflix este 24 de diciembre. Un producto bastante recomendable y destacado que nos muestra que la diferencia está solo entre mirar y no mirar arriba.