W Mexico City Hotel presenta W Street Food, un nuevo menú protagonizado por la cocina popular

// Por: Oscar Adame

lun 2 agosto, 2021

Como uno de los hoteles más vanguardistas de este país, el Hotel W Mexico City siempre está al pendiente de las nuevas corrientes culinarias, empujando por entregar experiencias que rompan con la cocina hotelera tradicional. Es por esto que hoy presenta un nuevo menú en el Living Room Bar protagonizado por los sabores, colores y aromas que habitan en las calles y ferias de nuestro país.

El Hotel W está situado en Polanco, una de las zonas más elegantes y sociales de la capital mexicana, a solo unos pasos del Auditorio Nacional y del Bosque de Chapultepec. Rodeado por restaurantes famosos, tiendas de alta gama y museos de arte contemporáneo y moderno, el edificio ideado por el arquitecto Louis Bosoms es, sin duda, uno de los mejores espacios para relajarse dentro de la ciudad y disfrutar de lo mejor que tiene por ofrecer.

El menú

Entre los platillos que forman parte de esta experiencia, se incluyen los siguientes:

  • Esquites tradicionales: sazonados con queso fresco, supremas de limón y chile piquín, con un W twist donde el tuétano estelariza de forma sutil, invitándonos a redescubrir este imperdible de las calles de la Ciudad de México o las tradicionales.
  • Gorditas de chicharrón prensado: rellenas de carnitas y presentadas con lechuga, queso fresco y cebolla aderezadas con salsa ranchera artesanal recién hecha.
  • Brochetas de pollo tandoor: cubos de pechuga marinadas en una salsa oriental que a través de sus sabor agridulce con notas picantes, hacen un contraste único con los sabores ácidos y textura cremosa de la salsa pepino-limón, volviendo a este platillo definitivamente uno de los protagónicos de la carta.
  • Marquesitas de queso y cajeta: evocarán bocado a bocado, aquellas noches de kermesse. 

Otros platillos que componen la nueva carta son los deliciosos burritos de pastor, gyros de arrachera, mini pizzas de queso, bocatas de calamar frito servido con alioli, así como unos plátanos fritos presentados con una triada de dulces sabores como leche condensada, crema fresca y mermelada del día, los cuales de forma sutil nos recordarán el sonido del silbato a vapor del carrito callejero.