Luego de meses de un juicio lleno de dimes y diretes, el pasado viernes un jurado de Los Ángeles, California declaró al rapero Tory Lanez como culpable por disparar a la cantante Megan Thee Stallion en una fiesta de la que ambos salían en 2020.
De manera oficial, el jurado imputó al rapero canadiense -cuyo nombre real es Daystar Peterson- por asalto con arma de fuego semiautomática, posesión injustificada de un arma cargada en espacio público, por la posesión de un arma de fuego no registrada y por disparar un arma de fuego con negligencia grave.
Aunque todavía no se ha dictaminado la sentencia, se estima que la condena podría suponer hasta 22 años de cárcel por los delitos acumulados.
Por si al caso le faltaba drama, una vez anunciado el veredicto, el padre de Lanez se puso de pie para gritar: “¡Este sistema perverso actúa con maldad ante los ojos de Dios todopoderoso!” en el afán de recriminar a los fiscales del caso. La situación estuvo cerca de convertirse en un zafarrancho, de nos ser por los agentes que desalojaron a tiempo a toda la familia de Lanez.
Una vez terminada la sesión, el fiscal del condado de Los Ángeles –George Gascón- agradeció a Megan por su testimonio y condenó la violencia de género, el acoso y las burlas que experimentó después de presentar su versión tras haber recibido el disparo.
“Mostraste una valentía y una vulnerabilidad increíblescon tu testimonio a pesar de los ataques tan grotescos y humillantes que no merecías pero que de todos modos recibiste. Lo mínimo que mereces es que se hiciera justicia.”, aseveró Gascón
El destino definitivo de Lanez se dará a conocer en las próximas semanas.