// Por: Staff

vie 20 marzo, 2020

Por: Sheila Navarro

Abel Tesfaye, mejor conocido como The Weeknd lanzó uno de los discos más esperados del 2020, se trata de After Hours (2020), mismo que inició su promoción con una carta de presentación bastante prometedora en ‘Blinding Lights’, sencillo que desde entonces se ha mantenido como la canción más escuchada en el mundo en plataformas digitales. 

Luego del éxito que obtuvo con Starboy (2016), en donde Daft Punk estuvo a cargo de la producción y My Dear Melancholy (2018), Tesfaye nos muestra una faceta que da continuidad a ese estilo ochentero que lo caracteriza. Cabe precisar que desde 2019, el cantante canadiense dio a conocer los sencillos ‘Heartless’, ‘Blinding Lights’ y ‘After Hours’.

Un sello distintivo

Sin un solo featuring, After Hours muestra los estragos que ha dejado el amor y su contraparte en un protagonista hastiado; la producción de este álbum estuvo a cargo de Daniel Lopatin, conocido por su nombre artístico de Oneothrix Point Never y quien ya ha trabajado con artistas como FKA twigs, Iggy Pop y David Byrne, por mencionar algunos. Además de Kevin Parker, vocalista de Tame Impala, que figura en un interludio de tres minutos y en la parte final del álbum por lo que su presencia no resulta del todo evidente. A ellos se suma Metro Boomin, productor y compositor especializado en hip hop y trap con el uso de percusión sintética.

A lo largo de 56 minutos, The Weeknd muestra un sello distintivo que nos encamina a un viaje donde se hacen presentes los males de la fama y el fracaso amoroso; las melodías oscilan en sonidos de pop y R&B sumergidas en sintetizadores y una producción muy retro.

Previo al estreno, Abel mencionó que en este álbum trata de mostrar un capítulo psicótico en su carrera, mismo que se vería acompañado de 57 presentaciones por el territorio estadounidense y que tuvieron que ser suspendidas a causa del coronavirus.