#SelecciónWARP: 5 influencias musicales en ‘Fossora’ de Björk

// Por: Rob Anaya

jue 20 octubre, 2022

El nuevo disco ‘Fossora‘ de Björk es un mundo dentro de distintos mundos sonoros, son diversos paisajes armónicos que convergen para dar vida a uno de los discos más desafiantes en su carrera y eso ya es mucho que decir, ya que la estrella islandesa nunca se ha cansado de experimentar en todos los terrenos musicales que siempre han despertado su poder creativo. Así que a continuación, analizamos algunas influencias musicales que dan vida a ‘Fossora‘.

Gabber

Desde el inicio con “Atopos”, el track abridor de ‘Fossora‘, se siente la fuerte influencia del género gabber, que es un particular estilo de música electrónica perteneciente a la rama del hardcore techno, un sonido que nació en Rotterdam en la década de los 90, y que se creó como reacción a la escena house de Ámsterdam, a la cual la gente más underground la consideraba como un tanto snob y pretenciosa. La esencia del gabber pasa por el sonido distorsionado de su beat, hasta tal grado que se convierte en tono potente y melódico a la vez que a estas alturas ya es bastante reconocible, quizás uno de los primeros guiños anteriores que hizo Björk, que con la entrega de “Declare Independence” y que ahora ha heredado en “Fossora”.

Avant-Folk

El avant folk o folk vanguardista es una mezcla de distintos elementos de folk en origen, combinados con arreglos modernos e instrumentos sonoros tradicionales que se van combinando entre sí, esto se percibe mucho en todo ‘Fossora‘, es un disco bastante folclórico en ese sentido si se presta atención, claro que todos los elementos están muy bien cuidados y perfectamente involucrados en el desarrollo del álbum como en la destacada “Allow” y “Fungal City”.

IDM

La IDM o la Intelligent Dance Music como la bautizaron los críticos, es un género de música electrónica que surgió en los años 90 principalmente en Reino Unido, apadrinada por la disquera Warp Records a gran escala y que saltó a la fama gracias a artistas como Aphex Twin, Autechre, Boards of Canada y Squarepusher. Y principalmente es una mutación influenciada por el techno de Detroit y el breakbeat con capas ambient. Éste género ha estado presente en toda la carrera de Björk, la clave es que ella lo ha incorporado a su mundo y no en su totalidad, toma elementos de esa corriente y suele entregar siempre grandes canciones a partir de ello como en este caso podemos escuchar en “Ovule”.

Modern Classical o Música Clásica Moderna

Esta corriente enfatiza en los instrumentos orquestales tradicionales o la gran música de orquesta, pero que a diferencia de los clásicos compositores de siglos anteriores, aquí se incorporan bastantes componentes electrónicos, y se juega mucho con cajas de ritmo, loops, sampleos y bucles de cintas,  todos experimentados y conjugados a su manera para que el resultado sean efectos notables y capas sonoras propiamente excelsas como en “Sorrowful Soil”, “Ancestress” y “Fagurt Er Í Fjörðum”. 

Post-Industrial

Un subgénero de la música industrial que como su nombre lo indica, surge después de la música industrial en donde tomando como base ese sonido, se incluyen incorporaciones sónicas que provienen de la estética oscura y mecánica de su principal núcleo, que terminará interceptándose con elementos de rock y de electrónica. Otro mundo con el cual Björk ha experimentado desde su propia visión, lo cual podemos escuchar en “Victimhood”, que es muy apocalíptica y también en “Trölla-Gabba”.

Ambient

El ambient es un género musical el cual se distingue por sus finas capas de sonido que destacan inclusive por encima de la estructura musical de ritmos ya establecidos, y según uno de sus pioneros, Brian Eno, la música ambient debe ser capaz de llevarte por distintos niveles de atención de escucha sin imponer uno en particular, lo mismo puede y debe pasar desapercibida pero a su vez debe ser lo suficientemente interesante y profunda. Lo cual Björk nos entrega en tracks como “Mycelia”, jugando con sus tonos vocales, lo mismo que en “Freefall” y en “Her Mother’s House”, la última canción del disco.