The Mandalorian ha llegado al final de su tercera temporada de manera emocionante y satisfactoria. Dave Filoni y Jon Favreau de la mano de Rick Famuyiwa, quien dirigió los últimos dos episodio, lograron atar los cabos de la temporada para iniciar la cuenta regresiva a la cuarta temporada de Mando y Grogu.
La tercera temporada de esta serie ha experimentado altas y bajas desde el inició de sus transmisión. Contrario a lo que se esperaba el primer capítulo se encontró con una baja en audiencia del 20 por ciento. Comparado con el estreno de la temporada anterior.
Además de las calificaciones más bajas para un episodio en toda la serie con el capitulo 3. Y es que podemos decir que a nivel historia la serie se ha encontrado con varios problemas.
El primero es que Lucasfilm le apostó a regresar a Grogu con Mando en otra serie, El libro de Bobba Fett. Dejando un poco en blanco a la audiencia que no sigue otras series de Star Wars. Y el segundo es que el argumento se tardó no solo en mostrarnos quien era el antagonista, sino el camino de la historia.
Sin embargo, la relación entre Mando y Grogu, siguen siendo el atractivo principal de la historia. El pequeño Baby Yoda continua adorable, para seguir imprimiendo dinero con cada aparición.
Además de incorporar de lleno a Bo-Katan Kryze (Katee Sackhoff) en la trama de esta temporada para recuperar Mandalore fue un acierto. Reconciliando los dos caminos de los mandalorianos, en la búsqueda de la sobrevivencia.
Cameos como el de Jack Black, Christopher Lloyd y el personaje de Zeb Orrelios (con todo y la voz de Steve Blum) fueron una buena sorpresa para los fans.
Mientras que Giancarlo Esposito trajo de vuelta a Moff Gideon. Consolidando la amenaza del Imperio en la Nueva República. Que esta sumida en la burocracia, mientras los remanentes de la flota esperan el regreso del próximo gran villano.
A pesar de todo el final fue satisfactorio y emocionante. Bo-Katan se consolida como la líder del pueblo mandaloriano. Mientras que Din Djarin regresa a sus raíces, con Grogu a su lado, esperando nuevas aventuras.
Aunque el inicio de la serie traía tarea para el espectador, el desarrollo final mantiene aislada la historia de Din. Lo que puede explicar la ausencia de una escena postcréditos que conecte con Ahsoka, la próxima serie de Star Wars. Sin embargo, no deja de sentirse la conectividad en el universo.
Con el anuncio de que el universo de Filoni y Favreau culminará en un largometraje. Lucasfilms se encuentra ante el reto de seguir manteniendo el entusiasmo por Mandalorian en un momento de transición para Star Wars, que no ha terminado de satisfacer a todo el público.