// Por: Oscar Adame

mar 11 diciembre, 2018

Hoy el Club Output anunció que cerrará sus puertas el próximo primero de enero del 2019, víctima de una “serie de factores que contribuyeron al infortunio del club, como el cambio de modas sociales, condiciones desfavorables del mercado y una debilitación gradual de las finanzas“, de acuerdo a lo expresado por el venue en sus redes sociales. 

Esta es una verdadera lástima puesto que Output había trabajado a lo largo de los últimos 10 años en fortalecer a la industria de las fiestas y la música electrónica en los Estados Unidos. Con un concepto fundado en la equidad, el club entregó una experiencia única, en la cual la música siempre se encontró en el primer plano. “Tomamos la decisión de rechazar los cambios que pudieron mantener al club abierto y en su lugar cerrarlo con su reputación intacta“, declararon. 

Un club por la equidad

Según se menciona, para que el club siguiera con vida tuvieron que haber creado una estrategia que cambiaría su modelo drásticamente y ellos no estaban posicionados para hacerlo. El club que abrió en el 2013, llegó con la intención de cambiar las cosas dentro de los círculos interesados en la música electrónica, acabando con un esnobismo innecesario dentro de la pista de baile. 

Para esto último, el club contó con varias políticas, entre las cuales se encuentran una prohibición total del uso de celular en una presentación. Además, nunca contaron con secciones VIP, tan comunes dentro del mundo de clubes de hoy en día. No había diferencia entre la gente que entraba al club, en su lugar se presentaba un espacio diseñado para que todos se divirtieran con sus intereses en común, en la fiesta y la selección musical que incluía cada noche a los nombres más reconocidos del house, techno, acid, psyche y down-tempo, entre otros. 

Por ahí pasaron desde Seth Troxler hasta DeadMau5 y su última noche contará con un cartel que incluye al legendario DJ John Digweed y a Tara Brooks. Se dice que se tenía una cultura completamente distinta dentro, con gente verdaderamente interesada en la música. 

Además, hace unas semanas se anunció que el club había tomado la iniciativa de crear una experiencia completamente eco-friendly, rechazando cualquier tipo de plástico desechable dentro de su comercio. Uno de los primeros y de los únicos centros nocturnos de entretenimiento en lograrlo. 

Los cambios a sus alrededores

Aunque el club ha sido reconocido como uno de los edificios más recomendados para visitar dentro del estado de Williamsburg, Manhattan, gracias a sus dos salas de concierto y su tejado con una excelente vista de Manhattan. Se dice que tenían uno de los mejores sistemas de audio del mundo y se encontraba ubicado en un punto de gran interés social gracias a su estación de metro, misma que cerrará por 18 meses por renovaciones y construcciones dentro del estado. 

El lugar ha sufrido una serie cambios interesantes, con una gran cantidad de comercios transnacionales llegando a la zona. Cientos de pequeños comercios locales han tenido que cerrar ante la gentrificación que ha traído una mayor competencia y un mayor costo a la zona. Una de las razones por las cuales probablemente el club no ha podido sobrevivir. Mismo que será recordado como uno de los lugares que apostó al techno y al house en una ciudad que estaba siendo dominada por el EDM. 

Quedan tres semanas para año nuevo y el cierre de Output, mismas que serán inundadas por noches inolvidables con la fiesta anual de navidad y shows de Lil Louis, Danny Tenaglia y BLOND:ISH. 

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