La defensa de Kevin Spacey pide revelar la identidad anónima de una presunta víctima

// Por: Diego Galán

vie 8 febrero, 2019

A los 14 años Anthony Rapp, se encontró con Kevin Spacey en una fiesta, donde el actor lo acosó sexualmente. Ante las acusaciones Spacey publicó una declaración diciendo no recordar el incidente, se disculpó y se declaró homosexual.

Así llegó a este celebrado actor el encuentro con sus acciones, uno que vive en el contexto global de las industrias del entretenimiento siendo expuestas por medio de una mejor apertura a víctimas de acoso y ataques sexuales para ser escuchados.

Desde ese momento la carrera del actor a cabo de manera repentina, con más víctimas corroborando y añadiendo a un patrón de conducta sexual inapropiada.

En todo esto, aún fue peor la reacción de un Kevin Spacey que parece no afrontar estas consecuencias con seriedad y más ha vuelto una parodia de sus víctimas y de sí mismo. Mejor ejemplificado con un extraño video donde se presenta bajo su personaje Frank Underwood de House of Cards, en una especie de “carta abierta” al público y medios de comunicación confrontando su errónea “percepción” pública.

En uno de los juicios que actualmente enfrenta el actor, continúa esta reacción deplorable ante las alegaciones. Se reportó el día de ayer, que la defensa de Spacey ha pedido que se revele la identidad de uno de los acusadores que ha optado por permanecer anónimo. Adicionalmente han exigido que el caso sea descartado.

Esta acusación viene de parte de un masajista que describe cómo Spacey lo acosó sexualmente durante una sesión de masaje en una residencia privada en Malibú.

La problemática se contextualiza mejor en el contexto de una serie de otros juicios y acusaciones que se complican a raíz de no tener a todas las víctimas en posición de poder levantar una denuncia legal sostenible ante la ley y otros casos que aún se encuentran activos.

Según lo que sostiene la defensa de Spacey, el anonimato de la víctima pone en una “desventaja” al actor y complica más la situación de competir el caso por la cualidad de ser figura pública.

Mientras se desarrollan estos diferentes casos es complicado pensar en una resolución a corto plazo, pero sí muestra aparte de un problemático esquema legal, una continua reacción de Spacey como desentendida de sus alegadas víctimas.