Kasabian estrena su séptimo álbum de estudio ‘The Alchemist’s Euphoria’, quizá el reto más complicado para la banda de Leicester en 25 años de trayectoria. Una nueva era para la banda querida banda británica tras la marcha del líder vocalista Tom Meighan. La premisa ahora es que después de algunas reflexiones y, de hecho, algunas transmutaciones, Kasabian está de regreso, el deseo de Serge Pizzorno y el resto de la banda de continuar construyendo un legado sigue intacto.
En este nuevo álbum hay un nuevo papel para Serge Pizzorno, que ha asumido el papel principal . Evolucionar de compositor principal a líder de una de las bandas de rock más grandes del Reino Unido no ha sido una tarea fácil. Después de haber escrito las 12 pistas (coproducidas junto con Fraser T. Smith), Pizzorno quería que este álbum superara lo convencional y girara historias pasadas sobre la polémica historia de la banda.
Este nuevo capítulo de Kasabian propone una celebración pura de la creación y alienta al oyente a reflexionar sobre cómo todos nosotros somos nuestros propios alquimistas en la vida, cómo debemos apreciar y disfrutar el viaje que nos lleva allí. Siempre hay una calma antes de una tormenta y la tormenta tiene la forma de ‘SCRIPTVRE’, una pista sobre la reinvención y la importancia de reescribir tu historia, aumentada con tonos cinemáticos oscuros.
En este nuevo disco no se encuentran himnos como ‘L.S.F.’, ‘Fire’, ‘Club Foot’, ‘Days Are Forgotten’, ‘Shoot The Runner’o ‘Underdog’, mismos que se encargaron de darle la fuerte personalidad e identidad a Kasabian. En este disco vemos a una banda tratando de encontrarse nuevamente y de redescubrirse después de tantas adversidades, el camino fácil hubiera sido desintegrarse e iniciar algo como solistas, sin embargo, su última palabra es que Kasabian no debe morir.
El disco atraviesa por 12 pistas el viaje del alquimista y en cómo solo se necesita un indicio de inspiración divina para crear algo especial. A través de los sencillos ‘ALYGATOR’, ‘SCRIPTVRE’, ‘THE WALL’ y ‘CHEMICALS’, Kasabian fusiona ingeniosamente texturas, tonos y tempos. Encontramos mezclas de diversos matices sonoros como el rock, rave, rap, sintetizador, psicodelia y más.
Se destacan el trío de pistas cósmicas como, ‘THE WALL’, ‘TUE’ (The Ultra View) y ‘STARGAZR’, mismas que son producto de inspiración en la visión del mundo de un astronauta desde el espacio y el cambio tan contrastante en la percepción, transmiten sentimientos de esperanza, posibilidad y reflexión. Kasabian ahora suena menos “matón” y más matizados que antes. Pero todavía conservan esa “alquimia” que los hace destacarse de los mismo de su clase.
Lo que Kasabian ha perdido en agresividad lo ha ganado en profundidad y sensibilidad, y el resultado es un álbum vívido y aventurero. La banda realmente parece estar lista para comenzar un nuevo capítulo de su gran historia.