“Hola, permítanme introducirme, yo soy Robbie ‘Fucking’ Williams, esta es mi banda, este es mi gran trasero y hoy ustedes serán míos“, se presentó el artista que más premios Brit Awards ha ganado en la historia, vistiendo una bata de boxeador y luciendo un copete alucinante. Inmediatamente inició ‘Let Me Entertain You’, clásico sencillo del disco Life thru a Lens (1997) que sirvió como la carta de presentación perfecta para esta fiesta adornada por proyecciones repletas de la cara de Robbie Williams en distintas etapas de su carrera, bailarinas coquetas y una cantidad risible de instrumentistas.
Esta fue la última fecha del The Heavy Entertainment Show Tour, una serie de conciertos protagonizada por un personaje irónico que juega en cada momento que puede con el sarcasmo, haciendo insinuaciones sexosas a la menor provocación. El de Staffordshire se presentó con un sentido del humor ácido, haciendo gala de su propia megalomanía gritó “México, aquí está tu Papi“, mientras se levantaba la bata y seguía con la mirada al trasero de sus bailarinas. Pasó por una serie de exitos como ‘Monsoon’ y ‘Bodies’, la cual se vio interumpida por la introducción de ‘YMCA’ de Village People por un momento y ante la emoción del público, tarareando las brillantes trompetas de la pieza, Williams decidió cortar con la interpretación. “¿Qué carajos está pasando aquí? No es Village ‘fucking’ People, es un concierto de Robbie ‘handsome’ Williams. Debería de darles vergüenza“, declaró entre risas.
Entonces decidió interpretar el inicio de varias canciones típicas, de conocimiento popular, de distintas eras. “A ver si se saben tantas canciones que no son mías”, declaró mientras jugaba a la Freddie Mercury con el público, señalando lo que tenían que cantar a continuación. Sonó A-Ha, Amy Winehouse, Bon Jovi y Prince, a lo que Robbie dijo “no se saben del malviviente de Prince, ¿qué carajos está mal con ustedes?“. Inmediatamente declaró, “bueno, fue un día de 1995“, a lo que todos empezaron a ovacionar al cantautor, “¿qué rayos, en serio les emociona tanto un año?, sólo dije una fecha por el amor de Dios, a ver inténtemoslo otra vez… 1996, 2018, 1760“, creando una locura en el público. “Rayos, en serio que están locos“, declaro Williams notablemente emocionado.
Prosiguió con su historia, relatando el día que conoció a su heroe George Michael, “quiero aclarar que no soy gay“, dijo ante la risotada de un señor, “carajo, ¿eso es algo tan gracioso? en serio no puedo creerlo, sólo estoy diciendo que no soy gay y este hombre se caga de la risa“, dijo previo a la interpretación de ‘Freedom90’ del vocalista británico fallecido a finales del 2016. “Esta es para ti George, a ti sí te dejaría chupar mi pito“, dijo Williams.
El concierto siguió con la invitación de una de sus seguidoras al escenario, “espero te sepas esta canción, si puedes completar la frase te daré una playera gratis y podrás bailar con Robbie ‘fucking’ Williams, pero si no la sabes tendrás que irte en un taxi a casa querida”, declaró. “Suban a esa chica al maldito escenario“, gritó, caminando a un sillón que se encontraba en el centro del público. Ahí el cantante se acostó, apoyando su cabeza sobre las piernas de la invitada y declarando que le gustaría hacer tantas cosas con ella si no fuera porque está casado, “literalmente solía coger con cualquier cosa, los buenos años”, añadió mientras le hacía piojito a la chica, quien estaba al borde de las lágrimas de la emoción. Él se dejó toquetear y le robó un beso mientras sonaba ‘Something Stupid’ de Carson and Gaile en el fondo.
La presentación prosiguió por una hora más entre gags irreverentes y hitazos de la época dorada de la música del Big Band. Los clásicos propios de Williams ‘Feel’, ‘Rock DJ’, ‘Better Man’ y ‘Angels’ fueron interpretadas a su fin de forma consecutiva, todas coreadas por las decenas de miles de personas que se encontraban agrupadas alrededor del escenario principal del Festival Corona Capital.
Al finalizar el set principal, Robbie dijo que esperaría más ruido si quieren que se quede un rato más. Ante la buena respuesta declaró que “es uno de los mejores públicos que ha tenido”, agregando, “no le digo eso a cualquiera, si uno no es un buen público no les digo ni mierdas y de regreso pienso en ellos como unos pedazos de mierda, pero ustedes no son pedazos de mierda. Deberían de poner eso en su perfil de Facebook ‘Robbie dice que no es un pedazo de mierda'”, y prosiguió con su propia interpretación de ‘My Way’, clásica canción que popularizó en 1968 Frank Sinatra, que pasó por Elvis Presley y que ahora ha encontrado a un nuevo intérprete en el desastrozo, pero encantador personaje de Robbie Williams.