//Por: Oscar Adame
El día de ayer, primero de abril del 2017, viví una de las situaciones más extrañas que se pueden vivir dentro de un festival: la cancelación, a unas cuantas horas de la que se suponía era su hora de inicio, del mismo.
CEREMONIA siempre se ha distinguido por ser una enorme fiesta en donde la música, los servicios y las distintas actividades recreativas siempre son de primer nivel y este año, que suponía ser una alza en el alcance internacional del festival, no seria distinta. Todos en Toluca estaban emocionados por la llegada de la musa Björk, cuya aparición que ha sido descrita por los mismos organizadores como un objetivo desde los inicios del proyecto hecho realidad.
Yo personalmente me estaba preparando en el camino con ‘Homogenic’ de fondo, mientras los miles de árboles y los cuerpos de agua que teníamos que atravesar para llegar al Foro Dinámico Pegaso me hacían desear querer revivir todo ese viaje en alguna próxima ocasión.
En WARP llegamos bastante más temprano de lo que se nos tenía estipulado. A las 9 de la mañana ya habíamos recorrido todo el lugar tras ayudar a armar el stand de nuestra revista y darnos cuenta de que estaríamos encerrados dentro hasta que las acreditaciones empezaran a funcionar.
Les puedo decir una cosa sobre el CEREMONIA que no se llevo a cabo el día de ayer y eso es que todo el lugar fue preparado de una forma hermosa. Los largos caminos están inundados de actividades que van desde una pequeña estética gratuita (cortesía de Corona), hasta una torre mecánica y unas sillas voladoras (cortesía de Vans). Los escenarios se veían bien, los foodtrucks estaban por montones y ofrecían un servicio a un muy buen precio, había zonas impresionantes para pequeños performances que se harían dentro y en general todo el decorado mandaba a patadas a cualquier otro festival al cual yo he asistido en México. El esfuerzo se nota desde el primer paso que das dentro.
Sin embargo aun y con los hermosos paisajes, nos detuvimos a acostarnos un rato frente a nuestro stand, un lugar hecho para que ustedes se acerquen, tomen una bebida gratis y hojeen un poco el nuevo número con la entrevista exclusiva que hicimos a Björk. A las 12 horas, aproximadamente, un viente fuerte asustó a mis compañeros al punto de hacerlos correr durante unos cuantos segundos. Las revistas volaron por todos lados, nuestro póster enmarcado también… y a lo lejos se veían como palmeras, macetas, estructuras decorativas y hasta unas bocinas habían sido también tumbadas por lo que parecía ser un torbellino. ‘Qué bueno que sólo fue un pequeño aire’ me dijo la chica de Chilango a un lado, todavía no sabíamos que una pila de bocinas había sido arrancada del escenario principal.
Ya a la 1 de la tarde pudimos acreditarnos y entrar a la zona de prensa, en donde las cosas ya empezaban a verse un poco raras. La cantidad de medios encerrados dentro, junto con la excelente atención… en verdad excelente de los organizadores nos distrajo un rato de todo hasta que uno de los representantes de Sicario salió a la carpa a decir que el festival iba a ser retrasado por lo menos dos horas debido a los fuertes vientes y a la seguridad de la gente. -‘Me parece un poco exagerado’-, decía un periodista a lo lejos, mientras se nos aconsejaba que no saliéramos del espacio por cuestiones de seguridad propia. Obviamente una buena cantidad salimos a reportar.
A los pocos minutos de que esto se diera la gente de servicios; sobretodo recuerdo que no pude pedir unos miserables 200$ de vuelta del centro de canjeo para recargar las pulseras del festival, pues la gente de ese servicio ya no estaba. El lugar se encontraba desierto, sólo un montón de carritos de golf usaban el camino principal entre escenarios, llevando en su interior a una buena cantidad de técnicos y gente de SICARIO a ver cómo carajos resolvían el problema.
Ya en la carta empezaron a llegar los rumores, -’Me dicen que protección civil no va a permitir que esto se haga si no resuelven lo de las estructuras en una hora’-, me decía un compañero de fotografía. En ese momento ya se empezaban a escuchar los gritos de ‘portazo’ del exterior, y eso que estábamos a unos cuantos cientos de metros de la entrada. Los fuertes vientos no paraban, aunque ya no se había formado ningún torbellino.
A las hora de que todo esto sucediera salió otra vez a hablar con nosotros el encargado de medios del festival. – ‘Con mucha pena tenemos que tomar esta decisión porque lo primero siempre será la seguridad de ustedes y cualquier otro asistente al festival’-, nos afirmo con una voz calmada y recta. No faltó quien reaccionó llevándose las manos a la cabeza o suspirando profundamente. No tengo ni idea de cuánto dinero hubieran perdido el día de ayer si esta fuera la resolución final, pero no es una cantidad menor… para nada y la gente de SICARIO es gente trabajadora y apasionada que nos han entregado varios de los mejores conciertos que se hayan podido ver en México en los últimos años. No se lo merecen, haya sido error propio o no la caída del escenario.
Nos dejaron salir de la zona de medios, por seguridad, casi a la hora cuando, irrónica y surrealistamente, unas gaitas empezaron a marchar por todo el pasillo principal del festival tocando una marcha fúnebre. Un detalle hermosísimo, la sensación era de la tristeza surgida en un evento como un entierro.
Tras recorrer todos esos árboles y cuerpos de agua una vez más, ahora en compañía de otros islandeses que no cancelarían: Sigur Rós, llegamos a las oficinas de WARP con la sorpresa de que el festival sí se realizaría, pero al día siguiente.
Entiendo que al público enoje esto, pero a mí me parece una decisión tomada con inteligencia. Quien no pueda asistir el día de hoy a este, que promete desde hace meses ser el mejor festival del año en el país, no debe de preocuparse, pues sí le harán su devolución el miércoles por la mañana dentro del medio que lo haya conseguido, pero si sí puedes asistir, yo te recomiendo que lo hagas y que mantengas esas ganas que tenías ayer en un nivel similar. Nunca más vas a tener la posibilidad de ver a Björk, y en conjunto con Arca; James Blake, Nicolas Jaar y Underworld (quienes hasta el momento sí van a estar presentes) son todos una fiestototota en un festival; las actividades de Vans y Corona son de primer nivel; el lugar es precioso y todo parece estar ya puesto para que te pases un rato de poca madre.
Yo estoy muy feliz de haber vivido todo esto. Me dice que los productores de estos eventos con una inversión millonaria siempre van a estar protegiendo de nosotros, sin importar lo que les pase a ellos como organizadores. Bien por SICARIO, bien por proteger a su audiencia y bien por siempre sí poder sacar adelante a este festival.
Ahora, a recorrer todos esos árboles y cuerpos de agua una vez más.