NRMAL 2020, el regreso del festival con mayor representación femenina #WARPGigs

// Por: Staff

lun 9 marzo, 2020

Por: Daniela Navarrete / Fotos: David Barajas

Lugar: NRMAL

Fecha: 07 March 2020

El festival NRMAL se ha destacado por ser de los que más apuestan por propuestas sonoras diferentes, debido a lo cual es uno de los más esperados a lo largo del año. Los fans habían estado pendiendo de un hilo esperando a que saliera el cartel. Luego, un día antes del evento, el headliner programado canceló su presentación. Muchos temían por lo que pasaría, ¿es este el fin de una era o el inicio de otra? Podíamos esperar grandes sorpresas.

Desde el inicio se notó que la gente iba con intensiones de divertirse, pasarla bien con sus amigos y descubrir cosas nuevas. Jackie Mendoza fue de las primeras en subir al escenario, nos compartió su música espacial y melancólica que te hace bailar mientras la ves tocar su ukelele galáctico. Belafonte Sensacional había creado mucha expectativa desde que se anunció el cambio de horarios para el festival, esperábamos un show fuera de serie y estuvo bien, muy enérgico como siempre; creo que han dado mejores shows en el Alicia.

Mateo Kingman nos deleitó su música, mezcla de electrónica y tropical, que nos transportó hasta su natal Ecuador en medio de la selva, recordando un poco a los tiempos de Pop Negro de El Guincho. La gente fue llegando poco a poco uniéndose al baile que parecía un ritual para evitar el frío. 

Siguió el turno de Wand, la banda estadounidense de pop psicodélico que enamoró a muchos, pues ejecutaron bastante bien sus canciones y dejaron un ambiente totalmente relajado entre los asistentes.

Bea1991 era uno de los proyectos más esperados; tuvo un intro un poco largo que oscilaba entre juegos electrónicos y visuales interesantes, lo cual le restó algo de tiempo a su set, pero aún así fue de lo más atrayente; verla cantar e interpretar sus canciones te transporta a un planeta nuevo, además fue muy tierno verla agradecer a su compañera, quien era la encargada de poner sus visuales. Expresó su apoyo a las mujeres para el Paro Nacional del 9M lamentando no poder terminar su set por falta de tiempo, esperemos pronto volverla a ver.

The Sea And Cake fue una gran opción para comenzar el atardecer, ya que inundaron de musicalidad y tranquilidad con sus melodías minimalistas y sonidos sofisticados. Ya entrada la tarde, Byetone llegó con un set techno minimalista que a cada beat hacía que hasta los niños crearan sus propias coreografías saltando entre la gente. 

Poco a poco nos acercábamos al final del festival, llegó el turno de Bush Tetras, una banda de Nueva York con 40 años de trayectoria, quienes vinieron por primera vez a México para cargar de más poder femenino a las mujeres del país y dejarle claro a los hombres que las mujeres son capaces de rockear hasta el último aliento. Dieron un show increíble, que pocas veces podemos presenciar, tal vez por el hecho de haber sido parte de las bandas que se presentaban en el CBGB en los 80 o tal vez porque realmente se han dedicado a lo que aman hasta ahora. 

Por fin, después de mucho tiempo de espera, llegó Juana Molina desde Argentina, una de las cantautoras más interesantes de latinoamérica actualmente. Desde el inicio llenó de misticismo el escenario con su voz hipnotizante, secuencias interesantes, ritmos bailables y su guitarra electrizante. Nos llevó por un viaje entre sueños, fantasías, ilusiones y probabilidades que nos hicieron movernos al ritmo de sus loops. La gente se unificó en una fiesta grandiosa en la que Juana era la líder y todos dejábamos que nos guiara, acompañada de Odin Schwartz y Pablo González, llenó el escenario de energía pura y juguetona. Nunca hubo necesidad de buscar un headliner que supliera al que canceló, Juana ya estaba ahí, solo tenían que dejarla ser, escuchar y disfrutar para darse cuenta.

El show terminó con su canción más famosa ‘Un Día’, una odisea entre la belleza de su lírica, la camaradería entre sus músicos y la fuerza que nos regaló para poder continuar. Entre grandes ovaciones, gritos y aplausos, Juana agradeció a todo el equipo del festival por su profesionalismo y calidez, al público por estar ahí acompañándola y a David Barajas, por el apoyo que le brindó al sentirse insegura por el frío de la ciudad. La gente quedó feliz de haber sido partícipes de un show tan refrescante. 

El festival terminó de compañía de Ruiseñor, quien musicalizó la salida de los espectadores, los cuales quedaron con el mejor sabor de boca después de un día lleno de descubrimientos musicales, encuentros con amigos y experiencias que, esperemos, se puedan repetir y mejorar para el año que viene.