Con motivo de una fiesta privada patrocinada por una marca de whiskey, la agrupación neoyorkina Holy Ghost se presentó en la Ciudad de México, teniendo como marco el Centro Cultural Indianilla, un antiguo taller de reparación de tranvías que fue rehabilitado como museo y foro alternativo.
Después de un largo warm up, el duo conformado por Nick Millhiser y Alex Frankel, acompañados por 4 músicos, saltaron al escenario para deleitar a los asistentes con su sonido synthpop y dance, con el toque característico de la disquera que los cobija, DFA.
Durante un set que no se extendió por más de una hora, Holy Ghost interpretó tracks de su álbum homónimo, así como algunos temas nuevos de su próxima producción.
Resulta muy clara la influencia del Hip-Hop en el sonido de la banda, que mezcla elementos del house y del electroclash para ofrecer beats sumamente pegajosos y bailables.
Al tratarse de un evento privado, la audiencia no estaba del todo entregada al conjunto neoyorkino, que parecía pasarla bien sólo por el hecho de estar tocando. Sin embargo, temas como ‘Slow Motion’, ‘It´s Not Over’ y ‘Say My Name’ pusieron a bailar a los asistentes.
Poco antes de la 1:00 am, la banda se despedía del público, saliendo en el encoré sólo para tocar ‘Hold On’, quizá una de sus canciones más conocidas.
Sin duda una presentación sólida por parte de Holy Ghost, pero que, como suele pasar en estos eventos, la falta de entusiasmo por los asistentes y la ausencia de fans, terminaron por opacar un poco el evento.