Conor Oberst en D.F. #WARPGIGS

// Por: Staff

sáb 31 enero, 2015

Oscar "El Roots" Hernández para WARP

Artista: Conor Oberst

Lugar: El Plaza Condesa

Fecha: 30 January 2015

Un buen concierto no siempre es el que está sold out, no es regla que el hype acompañe a la calidad, muestra de esto fue el concierto del pasado viernes 30 de enero, de Conor Oberst en el Plaza Condesa. A veces olvidamos que el rock -en este caso el folk- no se trata de vender boletos, y que el éxito de un artista no se mide por el número de “entaconadas-Roma-Condesa” logra meter a sus conciertos.

Sin embargo, no deja de ser una pena que bandas y artistas tan grandes como Dawes y Conor Oberst se presenten para audiencias tan pequeñas en un foro como El Plaza Condesa que es capaz de recibir a un buen número de personas. Dejando de lado el asunto de la asistencia, el concierto fue una gran oportunidad de ver dos actos de folk moderno sumamente interesantes.

A las 8:00 de la noche, la banda angelina Dawes subió al escenario, y nos dejó muy claro que son una de las propuestas a seguir dentro del folk y la americana. La banda mostró en todo momento una actitud y sencillez digna de reconocerse, y salieron a tocar su concierto sin importar que hubiera muy poca gente. A lo largo de su set, recorrieron sus tres álbumes de estudio, dejando un gran sabor de boca en los pocas personas que tuvimos la suerte de presenciar su concierto.

La salida de Conor Oberst estaba programada a las 9:30 de la noche. Para el momento que el originario de Omaha, Nebraska, salió al escenario, ya había un poco más de gente, sin embargo, el espacio parecía inmenso para la ocasión. Resulta importante aclarar que Conor Oberst se presenta bajo su propio nombre por respeto a los otros dos músicos que lo acompañaron cuando se presentaba bajo el pseudónimo de Bright Eyes, sin embargo, pudimos escuchar canciones de discos como “I’m Wide Awake, It’s Morning” y “Cassadaga”.

Oberst demostró en todo momento, por qué es uno de los nombres más grandes dentro del folk en la actualidad. Sin pretensiones, pero sí con mucha emotividad, Oberst ofreció, en opinión de su reseñista, una de las mejores presentaciones en lo que va del año, así como de finales de 2014. Mención especial a la ejecución de ‘First Day Of My Life’, que por poco derrite a los asistentes.