¿Qué vi de Bob Dylan? Su sombrero, eso fue todo. Los que tuvimos la mala fortuna de “ver” (sí, entre comillas) el concierto de Bob Dylan desde la sección General B vivimos una experiencia bastante peculiar: escuchar más o menos y no ver en absoluto a los músicos en cuestión. Lo nuestro fue más como aquella presentación de Gorillaz en la que solo se podía ver la sombra de los que estaban sobre el escenario.
El recientemente inaugurado Pepsi Center WTC nos abrió sus puertas desde muy temprano prometiendo que éste sería un show íntimo. Justo a las 21:00 horas —tal y como indicaba el boleto— las luces se apagaron y tonos azules iluminaron el escenario para dar paso a un personaje de sombrero de color claro y traje oscuro, quien sin más comenzó los primeros acordes de ‘Leopard-Skin Pill-Box Hat’ en la que el órgano protagonizó.
La guitarra comenzó a escucharse al ritmo de ‘Things Have Changed’ en la que el sonido del lugar no nos permitía distinguir totalmente la interpretación para seguir con un acercamiento al folk, ‘Rollin’ And Tumblin’’, y otro al country de la mano de ‘Tangled Up In Blue’.
‘Desolation Row’ fue el primer destello de fanatismo que evidentemente no se puede comparar con lo que pasó en ‘Like A Rolling Stone’ casi para el final. Las voces del público se convirtieron en una sola mientras muchos parecían desgarrarse la garganta intentando hacerse notar en el coro. ‘Simple Twist Of Fate’ nos mostró una faceta de Dylan más enfocada al rock con un puente en el que guitarra eléctrica y batería decidieron jugar a la par. ‘Highway 61 Revisited’ y ‘Ballad Of A Thin Man’ fueron memorables.
Casi dos horas en las que pudimos ver caras contentas y expresiones de molestia que —como era de esperarse— de inmediato se reflejaron en redes sociales. Un show con nula interacción con el público por parte del músico próximo a cumplir 71 años, en las que ciertamente pudimos notar la fuerte conexión que tiene con sus músicos y esa pasión que no ha perdido al momento de tener un instrumento musical en sus manos.
NOTA: Por órdenes del artista ningún fotógrafo tuvo acceso a su show.