Durante los últimos días nos ha tocado lidiar con perdidas irreparables de la historia de nuestro mundo, y parece que será así hasta el final del 2022: Barbara Walters, la periodista que irrumpió en una industria dominada por hombres al convertirse en la primera mujer en encabezar un noticiero vespertino en Estados Unidos, falleció a los 93 años.
Así lo anunció Bob Iger, delegado de The Walt Disney Company, la empresa propietaria de ABC:
“Tengo una triste noticia para compartir hoy: Barbara Walters ha muerto esta noche en su casa de Nueva York”.
Bárbara era fue una leyenda absoluta, un ejemplo no solo para mujeres en el periodismo sino para el periodismo en general. Se le recuerda por ser una de las mejores entrevistadoras de todos los tiempos al entablar conversaciones clave con los personajes más trascendentales de la segunda mitad del s. XX:
Mandatarios estadounidenses, presidentes extranjeros como el egipcio Anwar Sadat o Fidel Castro y celebridades de todas las disciplinas en cinco décadas de carrera que la convirtieron en un icono de la cultura popular estadounidense.
Ganadora de 12 Emmys, Barbara Walters se retiró de la televisión en 2014, tras dejar el programa “The View”, mismo que ella puso en marcha en 1997.
No solo se le recordará por ser la primera mujer en presentar un noticiero vespertino en Estados Unidos cuando se incorporó a “ABC Evening News” en 1976, también lo será por establecer un precedente para combatir la brecha salarial entre hombres y mujeres, luego de que se hiciera merecedora de un salario entonces sin precedentes que alcanzó el millón de dólares al año.
En su despedida de la televisión, declaró:
“Qué orgullosa me siento cuando veo a todas las mujeres jóvenes que hoy están en medios como titulares y reporteras en los medios. Si hice algo para ayudar a que eso ocurriera, ese será mi legado”.
Nació en Boston el 25 de septiembre de 1929, ciudad donde estudio para después continuar su formación en Nueva York y en Miami, lugar en el que se graduó en en el Sarah Lawrence College. Posteriormente, comenzó a trabajar en la filial de NBC en Nueva York.
Aunque estaba orgullosa de la popularidad que alcanzó, a Walters le preocupaba que el público olvidase las entrevistas que hizo a docenas de líderes mundiales, como Sadam Husein y Moammar Kadafi. Cuando le preguntaron por qué esperaba ser recordada, Walters respondió: “Como buena periodista, no como alguien que hizo llorar a la gente”.
Mira la conversación entre Barbara Walters y Fidel Castro: