“Es un niño curioso que juega mucho y con lo que sea”, es lo que me responde Georg (Goggi) Hólm al pedirle que me describa a su banda como si se tratara de una persona.
De todas las descripciones que he leído o escuchado respecto a esta banda de Reykjavik, no debería de sorprenderme que la de su miembro fundador sea la mejor. Hay algo dentro de esa frase y dentro de toda la conversación que tuve con el bajista islandés, que siento que por fin he comprendido el por qué Sigur Rós resulta una de las bandas más seductoras de la actualidad.
Georg recalca en cada frase que me lanza desde el otro lado del teléfono que no tiene ni idea de lo que Sigur Rós está haciendo. “No sabemos nada de estructuras, sólo hacemos lo que nos parece mejor a oído“, recalca. Y es que eso es específicamente lo que hace a Sigur Rós, una banda que no se vende por géneros, por estructuras u otros convencionalismos. Los tres islandeses siempre han sido una cosa y eso es ser profundamente emocionales.
La belleza de su música es algo que sólo puede ser creado por alguien que observa, que siente y respira la vida con una intensidad envidiable. La inocencia y fragilidad con la que comúnmente se describe a sus canciones es como la inocencia y fragilidad de un niño, que pese a no saber qué es lo que está afuera, puede maravillarse por ello y dejar que su interior se alimente por aquella sensación de miedo y seducción que lo desconocido genera.
Y entonces me doy cuenta de que Sigur Rós es una banda masiva justo porque nos hace partícipes de revivir esas sensaciones una vez más. Una banda que viene de un país que parece tan extraño como maravilloso cuyas líricas no podemos comprender pero cuyo canto despierta una sensación de empatía que cualquier lírico laudado querría obtener.
Tienen un aire misterioso inconfundible que seduce a cualquier otro niño curioso cuya alma esté en búsqueda de cosas desconocidas a las cuales nunca podrá ni entender, ni explicar, pero que podrá usar para alimentar su interior de la belleza que sus sonidos y figuras esparcen a su alrededor. Entonces recuerdo que el idioma inventado por la banda para el disco del paréntesis, el ‘vonlenska’, es un intento por imitar el lenguaje de lo niños más pequeños y todo encaja a la perfección.
El 3 y 4 de Abril el Auditorio Nacional se convertirá en el nuevo cuarto de juegos de estos tres islandeses que seguirán construyendo cosas indescriptibles para los adultos, pero que a los niños alimentará de las sensaciones más fuertes que la música puede crear. Dos fechas imperdibles.
Han anunciado que su nueva gira va a tener un gran cambio: no van a contar ni con orquesta ni con músicos de apoyo. ¿Siendo Sigur Rós esta banda tan orquestada, cuáles podrán ser las dificultades que atraviesen en su interpretación?
R: No creo que haya dificultades, hemos estado pensando la gira desde un inicio bajo este formato, que creo que es más íntimo y que será más emocionante. Sólo estaremos los tres miembros originales de la banda, las personas que realmente tienen una conexión con las canciones y que saben todo sobre ellas, pues nosotros las compusimos.
Podría parecer que debido a que las canciones son orquestadas, tendríamos problemas con tocarlas, sin embargo los tres tocamos piano, guitarra, percusiones y demás instrumentos que nos rolaremos. Otro punto a favor es que siempre tuvimos problemas con algunas canciones que eran tan básicas que no podían ser tocadas con esos músicos, sería desperdiciarlos. En esta gira tocaremos esas canciones después de años sin hacerlo.
Por últimos, los clásicos no necesitarán de tantos músicos en esta gira. Pues les hemos dado una nueva personalidad, con arreglos nuevos que se adaptan al sonido de las nuevas canciones, de las cuales creo que estrenaremos dos en los conciertos de México.
¿Habrá alguna posibilidad de escuchar estos nuevos arreglos que hicieron para sus canciones clásicas fuera de las presentaciones: algún disco especial con ellas o un álbum en vivo?
No tenemos planes de lanzar estas canciones en el disco nuevo, ese más bien estará repleto de canciones originales en las cuales hemos estado trabajando mucho los últimos meses. El nuevo disco ya está bastante avanzado.
Sí hemos trabajado mucho en estas nuevas versiones de los clásicos, de hecho pedimos un descanso de nuestra gira pasada para hacer los arreglos de una forma que nos complaciera a los tres, pero no estamos interesados en integrar estas versiones en un nuevo disco o de lanzar un disco especial para ellas.
Los discos en vivo son un proceso arduo y muy cansado. Así que no jaja, la única oportunidad por el momento es la gira.
¿Por qué decidieron hacer estas nuevas versiones, ya se aburrieron de tocar las mismas canciones por años de la misma manera?
Sí, entiendo lo que me dices. No creo que sea eso en específico, amamos a nuestras canciones y a mí en lo personal me gusta mucho interpretarlas. Además comprendo que la gente va a un concierto a escuchar y a cantar las canciones que ya conoce como las conoce, incluyéndome.
Sólo pensamos que podría ser interesante y que podría dar una nueva cara a nuestras piezas. Una de la cual estamos bastante orgullosos.
El año pasado lanzaron Óveður, una canción que tiene este estilo industrial al cual incursionaron en ‘Kveikur’. ¿El próximo disco podría considerarse una secuela a aquel?
Humm no lo sé, entiendo que suene similar debido al uso de las computadoras que tanto usamos en Kveikur, pero es que nosotros siempre hemos amado el trabajar con computadoras, desde el inicio. Este disco está trabajado de igual forma, pero yo diría que es muy diferente a todo lo demás que hemos lanzado, es un disco inclasificable hasta ahora para nosotros.
Pero bueno, algo que siempre me dice la gente es que en cuanto escucha una de nuestras canciones sabe al instante de que es Sigur Rós. Creo que eso es algo bueno, es como si tuviéramos nuestra propia personalidad. Puede que suene a una secuela a Kveikur por eso solamente.
Una de las características representativas de Sigur Rós es que sus letras son inentendibles, sea en islandés o en su propio idioma ‘vonlenska’. ¿Por qué teniendo un idioma que tan poca gente habla en el mundo, decidieron experimentar con otro tipo de vocablo que nadie entiende?
Eso está un poco malentendido por la prensa, nosotros sólo utilizamos el ‘vonlenska’ en un disco y en un par de temas externos, pero el 97% de nuestras canciones están en islandés, nuestra lengua natal.
Lo empezamos a desarrollar debido a que quisimos usar onomatopeyas para esas canciones, balbucear, utilizar nuestra voz sólo como un instrumento más y creímos que eso le daría un aire de misterio que nos sienta muy bien a nosotros como banda.
Siempre trabajamos mucho en nuestras líricas. Una vez terminado el trabajo instrumental nos sentamos todos alrededor de ellas a escucharlas y escribimos lo que creemos que la canción nos está diciendo, claro que es algo secundario a la música, pero siempre nos centramos en hacer lo mejor que podemos con ellas.
¿No te molesta trabajar tanto en las líricas y que la gente no pueda ser capaz de apreciarlas?
No, para nada. En Sigur Rós no hay nada que me haga sentir frustrado. Nosotros escribimos nuestras letras en nuestro idioma natal, que es el islandés, así como las bandas de china las escriben en chino. Nos sentamos a escribirlas así porque nosotros somos de aquí y estamos muy orgullosos de serlo.
Nuestra gente sí puede entenderlas, lo que es importante para nosotros, y además para nosotros no sería lo mismo sin ellas, pues tienen un significado personal. Por otro lado sé que la gente que está muy interesada en ver lo que dice la letra y no sabe islandés simplemente va a Google Traductor.
Nunca hemos tenido una intención comercial, de ser ‘enormes’, en lo que hacemos. No nos importa a quién llegue la música, o las líricas, conque conecte emocionalmente con alguien somos felices.
Hace poco leí que a Jónsi se le olvidó la letra de una canción en un concierto en Francia y empezó a jugar con ella. Su propuesta da para hacer bromas o meter mensajes ocultos en las líricas, ¿lo han hecho?
Jajaja no, nunca se me había ocurrido, pero es una excelente idea, de hecho la estoy apuntando. Esa noche en Francia fue increíblemente divertido, Jónsi había tomado un par de cervezas de más antes del concierto y en medio de él se empezó a olvidar de las letras.
Improvisó frases como: ‘Ohh mierda, me olvidé de las letras, pero eso está bien porque estoy en Francia, donde nadie puede entenderme’, y a nosotros en el escenario nos sacó de onda, pero después nos dio un ataque de risa. Fue bastante divertido, aunque fue una ocasión única, sólo ha pasado esa vez y además fue en una de nuestras canciones más alegres, una de las amigables, por lo que todo combinó a la perfección.
Si pudieras describir a Sigur Rós como si fuera una persona, ¿cómo sería la personalidad de esa persona?
Sería como un niño curioso que juega mucho y con lo que sea. Sincero, la sinceridad es básica para nosotros, nunca nos dejamos guiar por estructuras o por acordes cuando componemos, sólo seguimos como la canción nos dice que lo hagamos y sabemos perfecto cuando está terminada. Así empezamos todos a hacer música y así hemos continuado.
¿Cómo empezaste a hacer música?
Los tres empezamos a hacer música desde muy jóvenes, yo tuve mi guitarra a los 13 o 14 años y empecé a rasgar sin tener conocimientos de nada, ni estructuras, ni acordes, ni nada. De hecho hace un par de días estaba en el estudio de Jónsi y llegó este tipo con un montón de partituras escitas, quería saber nuestra opinión sobre la música ahí escrita y nos encontramos en una gran dificultad jajaja. Ni Jónsi ni yo sabemos leer partituras, en realidad no sabemos casi nada sobre música. El tipo entonces nos dijo que no entendía cómo es que podíamos tocar en vivo sin saber leer música, nos confesó que para él era imposible tocar sin papel y le dijimos que nosotros tocamos todo a oído.
Estuve pensando mucho sobre ello y justo le decía a Jónsi ayer que no creo que nos podamos definir como músicos, un músico es aquella persona que sabe perfectamente cual acorde debe de ir después del otro y que sabe leer partituras, en Sigur Rós sólo nos juntamos y empezamos a escribir lo que mejor nos parezca, sin pensar en qué acorde debería de seguir o planteándonos una estructura antes.
Es extraño que lo digas, porque he leído que varios críticos, incluyendo Simon Reynolds, relacionan a la alza de Sigur Rós con la muerte del post-rock. Esto debido a que las nuevas bandas de rock instrumental se empezaron a influir por las estructuras y ganchos pop de sus canciones, a diferencia de la estructura progresiva de las bandas originales del género. ¿Qué opinas al respecto?
No tengo una opinión sobre ello, no creo poder opinar. Yo nunca me he sentido partícipe de utilizar géneros para describir la música de alguien, no creo que signifique algo realmente, son sólo palabras para vender. Que una banda sea descrita como perteneciente a cierto género o no, no hace que la música de esa banda valga más o menos la pena.
Además nunca sentí que Sigur Rós fuera post-rock. Siempre que alguien me pregunta qué es lo que tocamos, les contesto que hacemos música rock.
He tenido esta sensación de que Sigur Rós ha ayudado muchísimo a que Islandia esté en el ojo público. ¿Te has dado cuenta del impacto que tu banda a tenido para tu país, cómo te sientes al respecto?
Nos sentimos extremadamente orgullosos y agradecidos de ello. Si nos hemos dado cuenta, y nos lo comentan mucho cuando estamos en Islandia y sinceramente no podríamos estár más felices por ello, no hay mayor orgullo que el apoyar a nuestra pequeña isla, a la que amamos y de la cual estamos muy orgullosos.
Cuando estoy de gira no puedo dejar de pensar en lo mucho que extraño a las 100,000 personas que viven en mi ciudad de Reykjavik. Es muy bonito porque también recibo muchos mensajes de ellos todo el tiempo.
¿Tienes algún lugar favorito dentro de Islandia, dónde recomendarías a los turistas que se fijaran?
Yo recomendaría a todo turista que recorra a Islandia punto por punto, no es un país muy grande, pero hay muchas cosas por hacer y ver. Cada pueblito tiene lo suyo, su propia luz y vale la pena detenerse a observar lo que hay dentro de cada uno y bueno, Reykjavik, nuestra capital, es una ciudad medianamente grande, con edificios altos y muchas actividades.
Sí tengo un lugar favorito, pero no invitaría a nadie a ir ahí jajaja. Es una pequeña cabaña de verano que tengo junto a uno de los lagos de Reykjavik, es muy hermoso.
Por último, ¿qué podemos esperar de sus conciertos en la CDMX, por qué serán distintos?
Pues será la primera vez que toquemos en México con nuestro show, nuestro set, completo. Anteriormente habíamos tocado ahí pero como parte de festivales y es muy difícil, más bien imposible, traer tu espectáculo en forma. Así que podrán esperar ver a Sigur Rós como debe de verse, con nuestro show y set tal y como lo desarrollamos.