Tras una serie de discusiones legales con la productora Warner Bros, el director de cine George Miller ha llegado a un acuerdo para empezar con la producción de Mad Max 5 en otoño de este año dentro de algunas locaciones australianas. El título tentativo de esta película es Mad Max: The Wasteland y se espera que a su elenco vuelva Tom Hardy como protagonista; sin embargo, aun no se conocen detalles si Imperator Furiosa, la cual fue encarnada por Charlize Theron en la pasada entrega, volverá a la saga.
Hay que recordar que la pasada entrega de la licencia Mad Max: Fury Road (2015) fue recibida con aclamación universal, llegando a ser considerada por varios medios como La Mejor Película de la Década, incluyendo IndieWire, Mojo, Wired y Rolling Stone. Así, también fue nominada a diez Premios de la Academia, incluyendo menciones a Mejor Película y Mejor Director.
Además de la serie de Mad Max en su totalidad, Miller es reconocido por haber dirigido películas ganadoras de varios Premios de la Academia como Happy Feet (2006), Babe: Pig In The City (1994) y The Witches Of Eastwick (1985).
En abril de este año, The Sydney Herald publicó un reporte en el cual detallan que George Miller lanzó a Warner Bros una demanda tras desacuerdos respecto a la distribución del dinero que recaudó Mad Max: Fury Road (2015). Esta demanda se ha convertido en un impedimento para el inicio de la producción de la secuela del filme ganador de seis Premios de la Academia y con ganancias que superaron los $400 millones de dólares.
La demanda lanzada hace un par de años por la compañía fundada por el director de cine George Miller, Kennedy Miller Mitchell, proclama que Warner Bros le debe dinero debido a que el estudio prometió un bolis si el filme se terminaba de filmar con una inversión de menos de $157 millones para su producción. Miller dice que así se hizo, pero Warner declara que las escenas que tuvieron que ser filmadas en una segunda ocasión hicieron que el costo sobrepasara aquella barrera.
Además, Warner señala que el trabajo de edición y todo lo relacionado con la post-producción estaba integrado dentro del acuerdo; sin embargo, Miller afirma lo contrario. Se trató de un caso complejo que integra todos sus detalles en el siguiente documento.