¿Y sirvió de algo?

// Por: Staff

vie 6 julio, 2012

 

Esos esfuerzos por informar a los casi 23 millones de jóvenes electores para que decidieran las elecciones 2012, ¿realmente funcionaron? Arena Electoral, El Menos Peor, Cosmo Ciudadano, WARP elecciones… ¿influyeron en la votación?
Yo pienso que cumplieron su función, pero ante el fenómeno tan particular de estas elecciones, no lograron ser determinantes. De hecho no creo que algún efecto haya sido tan determinante como el miedo en sus diferentes versiones. Las irregularidades, anomalías, delitos, fraudes y hasta las insuficientes casillas especiales para los que estaban fuera de casa, seguro que tienen peso en los resultados finales, pero no parece que hayan decidido esta elección.

Insisto en el miedo. El miedo a regresar al pasado, el miedo a seguir en este presente y el miedo al futuro incierto con una propuesta nueva en la presidencia, dividieron al electorado, incluidos los jóvenes mexicanos que sí votaron. Para entenderlo, hay que primero reconocer que no todos los jóvenes de este país son “132” y que las tendencias de Twitter no reflejan a todo México.

La maquinaria funcionó como de reloj el pasado domingo. Las televisoras en general lo hicieron tan mal como bien, dependiendo el cristal con que se mire, para presentar como en programa de concursos, la victoria del PRI. Los candidatos menos uno, salieron a entregar las armas muy temprano. El Presidente salió a corroborarlo un poco más tarde y unas horas después así también, varios mandatarios mundiales, incluido Barack Obama. No hay marcha atrás… Pero nadie ganó todo y nadie perdió todo.

Los señalamientos e impugnaciones legales deben ocurrir. La resignación y reflexión también. La democracia no queda en entredicho mucho más que los seres humanos que la ejercemos. Pensemos, reflexionemos, insistamos, cuestionemos, aceptemos pero no concedamos. A partir de hoy vigilemos y usemos lo que hemos aprendido en esta experiencia electoral. Construyamos y dejemos claro, que todos los esfuerzos que hicimos (los que los hicimos) por un México mejor, sí valieron y valdrán la pena.