#WARPPresenta: Entrevista con Tomasa del Real, contra las fantasías de la música pop

// Por: Oscar Adame

lun 2 diciembre, 2019

La cantautora chilena Tomasa del Real arribó a la industria de la música internacional con un estilo de reggaetón muy singular. Realizadas en su departamento con una laptop y un par de micrófonos, sus primeras canciones muestran a una chica con lengua suelta, divirtiéndose al recitar sus pensamientos libres sobre instrumentales electrónicos chillones, cargados de una estética futurista vibrante.

A ella se le considera la pionera del neoperreo, movimiento que usa como base al dembow y al imaginario hiper-sexualizado del reggaetón tradicional para agregarle elementos de la música pop del hoy en día, un movimiento generado en la Internet e influenciado en la cultura cibernética. Al igual que el trap moderno o cualquier otro género que haya encontrado su popularidad en plataformas como SoundCloud, el neoperreo se distingue por ser un género que no está manejado por las grandes discográficas. Además, es un movimiento liderado por mujeres en donde las mujeres dicen “lo que me sale de las tetas” como una expresión empoderadora para todas sus escuchas, razón por la cual muchos lo consideran feminista. 

Para Tomasa del Real es un movimiento importante, pues ha permitido que haya música realizada por “la gente pobre, la gente que no tiene una vida tan bonita. Gente que vive otras cosas y que ya está harta de las ficciones” de la música popular. Es por ello que el movimiento se ha propagado a las masas internacionales, dándole giras internacionales con presentaciones en eventos que llegan hasta el Festival de Coachella a esta intérprete cuyo nombre real es Valeria Cisternas. 

Es un movimiento interesante desde muchos puntos de vista, al igual que el reggaetón del cual nació. Un género que se fundó en la Internet para luchar contra la frialdad que la propia cultura web nos ha impregnado, un escape en donde los escuchas e intérpretes encuentran la libertad para “salir a vivir un momento artístico de encontrarnos y que la situación se convierta en algo físico, sexual, liberal, se consigue con el perreo“. 

La reina del neoperreo

Seguramente ya vas a estar cansada de esta pregunta, pero es algo que me interesa platicar porque creo que aun no termino por comprenderlo. He leído diversos artículos que describen al neoperreo como un fin estético con la combinación de elementos electrónicos y música pop en el reggaetón, pero eso ya existía. Me gustaría saber cuáles son los elementos más importantes de este sub-género a tus palabras….

La verdad es que la palabra -neoperreo- no se refería a un estilo de música. Se refiere a una nueva forma de perrear, lo que es lo nuevo que estamos perreando. El término nació en una entrevista que di para justificar la música que yo estaba haciendo. A mí me daba vergüenza decir que estaba haciendo reggaetón porque sentía que era un tipo de apropiación cultural. Si le dijeran a un reggaetonero -mira, esto es reggaetón-, él diría que no porque no soy caribeña. 

Yo sé que quizá la música está inspirada en el reggaetón, pero no es cien por ciento reggaetón. Es algo nuevo, es nueva música para perrear, por eso se llama neoperreo. Es para que las nuevas generaciones bailen, aquellas que no son de Puerto Rico, vienen de otros países. No solo son hombres, son chicas, homosexuales, queers.

El término empezó a abrazar a toda esta gente que sí hacía música inspirada en lo urbano, pero que tenía otro lugar de nacimiento que es el Internet como espacio virtual o físico. Es para toda la gente que no se siente identificada con un país en específico. Tenemos una comunidad en la Internet en donde hacemos música, videos, colaboraciones, aunque no estemos en el mismo país. Es un reflejo de influencias en donde se nota que el reggaetón ha creado un mundo. 

Abrazó a tanta gente que tenía una influencia tan grande en la Internet que empezó a formarse una sub-cultura. No solo es música, también es dibujos, moda, colores, que empezaron a cerrar al término. Fue algo natural y hasta el día de hoy tiene una interpretación difícil porque no fue creado, no hay una persona que haya definido lo que es. Es un reflejo de lo que está pasando en el mundo, de que ahora la gente es más moderna y las cosas van evolucionando. 

¿Cuál crees que sea la verdadera importancia de esto que se está generando?

Personalmente esto es una gran escala de lo que yo hacía en el norte de Chile. Me juntaba en un grupo diverso de personas con hombres, mujeres, gays, raros, metaleros, qué sé yo. A todos nos gustaba mucho el reggaetón, pero no había un lugar en donde pudiéramos bailarlo juntos. Lo que hacíamos era juntarnos a beber en una previa y después todos iban a sus propias discotecas. Con esto creamos espacios para todos, espacios inclusivos en donde todos pueden escuchar. No hay rechazo a las personas por su apariencia física o gustos musicales. Son espacios seguro para perrear en el cual todos podemos sentirnos cómodos.

Cuando yo empecé a hacer música, todo mundo empezó a reproducir lo que estaba haciendo en fiestas, así que cuando dije el término neoperreo, empezaron a ponerle ese nombre a todos los eventos. 

Sí, aquí se les dice a algunos eventos como perreos feministas…

Humm no. Me he dado cuenta de que la gente le pone el término de perreo feminista porque la gente aun no se acostumbra a que las chicas tengan un lugar importante en cualquier cosa. Entonces, creo que es un error ponerle ese término porque que yo sea mujer no refleja el hecho de que quiera demostrar algo; de hecho, es lo contrario, no quiero demostrar nada a nadie. 

Me estabas relatando que la mayor importancia es que tenías una colección de amigos outsiders que gustaban del reggaetón. Me he dado cuenta de que mucha gente diferente a lo común tiene un gran interés en el género…

Creo que el género urbano, el trap y el reggaetón, ha crecido tanto que ya se convirtió en nuestro pop. Eso es un reflejo de las nuevas maneras de hacer música, pues hace poco tiempo todo era diseñado por disqueras. Estábamos obligados a tener ídolos que hablaban de historias de amor, fantasías que nunca han pasado en la vida de nadie. Por otro lado, el urbano que nació gracias a las herramientas digitales de hoy en día, nos dieron la libertad de poder crear cosas desde nuestras casas. Eso influye en la gente pobre, la gente que no tiene una vida tan bonita. Gente que vive otras cosas y que ya está harta de las ficciones. 

Así que empezamos a hablar de lo que sabemos. Eso empezó a reflejar lo que mucha gente vive diariamente, el cómo nos tratamos, cómo vivimos la sexualidad, cómo bailamos en las fiestas, qué queremos gritar los fines de semana. Hicimos canciones para las ocasiones en las cuales queremos gritar -te amo mucho- o -hijo de puta, te odio-. Siento que por eso el urbano avanzó tanto, las disqueras ya no crean personajes, solo los atrapan cuando ya están volando. Dentro de esta rama que abarcó tantas personalidades, también se abarcaron a los punks. 

Tengo una teoría de que el urbano es tan popular y tan odiado al mismo tiempo porque parece ser la expresión musical más libre, en donde la gente dice lo que piensa sin ningún tipo de barrera o adorno…

Estoy 100 por ciento de acuerdo. 

¿Tú cómo te sientes cuando escribes una de tus canciones?

Bien jajajaja. En realidad no pienso mucho cuando escribo, sólo me encierro en el estudio y lo que hago depende mucho de con quién estoy grabando o en qué momento del día estoy grabando. Siento que la dinámica siempre cambia, pero al final del día lo que trato de hacer es hablar y siempre represento lo que me está pasando a mí o a un amigo. 

Hace poco una amiga me dijo que le parecía muy ridículo que los hombres criticaran al reggaetón por ser misógino. En primera porque el público más amplio del género son las mujeres y en segunda porque el hombre nunca debería tener la palabra para describir qué es misógino para una mujer…

Creo que vivimos en una sociedad misógina y machista, pero que el urbano refleja eso. La música habla de la realidad en la cual vivimos sin la intención de insistir en esa realidad, si no de desensurarlo y creo que eso a las chicas en específico nos ha dado información que antes no teníamos. 

El urbano representa eso, es un hombre diciendo lo que le da la gana. En mí caso particular, lo que yo hago es lo mismo que hace un hombre. Me paro con un micrófono y digo lo que me sale de las tetas. Ya pasó la época en la cual me fijaba en quién estaba diciendo las cosas. Ahora no me imagino a un hombre cantando, ahora me imagino a un artista. Creo que las personas que escuchan reggaetón vemos eso, no vemos un daño, es una puesta en escena, me encanta. 

Por otro lado, creo que el reggaetón es un lubricante social porque dice cosas que uno no dirían las personas normalmente. En una pista de baile nadie le diría a alguien -quiero romperte el culo-, pero el reggaetón lo hace. Lubrica esta situación fría porque el mundo es frío al ser un lugar digital. Ya no salimos con amigos ni tenemos citas con gente que nos gusta, chateamos y nos likeamos en Instagram. La única forma de salir a vivir un momento artístico de encontrarnos y que la situación se convierta en algo físico, sexual, liberal, se consigue con el perreo. Por algo tanta gente necesita del perreo porque si no la posibilidad de encontrarse con otros humanos es muy limitada. 

Las letras ayudan a que las personas digan -¿sabes qué? quiero algo contigo- explícitamente. Igual para mí todas estas canciones, los perreos, ayudan a las situaciones. Creo que es un reflejo de a dónde hemos llegado como sociedad y cómo hemos resuelto las cosas que decimos y cómo lo decimos. 

A tu visión el perreo y el reggaetón es una reacción a la represión de decir las cosas y vivir. Me pega porque lo siento, cuando escribo algo en redes sociales tengo que pensar en cómo hacerlo para no ser visto de cierta forma…

Siento que la vida en sí si fuera 100 por ciento preciosa no sería la Tierra, sería el Cielo. Hay un 50 por ciento bueno y un 50 por ciento malo. Tenemos que lidiar con lo malo, aceptarlo como parte de la vida y hasta celebrarlo para decir -ok, esto es parte de la vida, vamos a vivirlo en paz-. Eso es sano. 

Ahora mismo se dice que una de las razones por las cuales se ha expandido el reggaetón es debido a una reacción en contra del discurso de odio que se ha manejado contra los latinos en Estados Unidos. Es una búsqueda de intensificar su indentidad y buscar representación…

Lo primero es decir que la palabra -latino- está mal porque nosotros no lo somos. De Centroamérica para abajo somos sudacas porque no somos latinos, ellos son gente que tienen la cultura latina española. Después a nosotros nos conquistaron, pero el término es anglocentrista de los Estados Unidos para referirse a cualquiera que hable español. 

Por otro lado, la música sudamericana. Lo que yo creo del por qué llegó tan lejos no tiene nada que ver conque nos acepten más. Yo veo que con la llegada de la Internet, logramos la posibilidad de compartir cosas que no estábamos compartiendo antes, entonces la gente logró conocer cosas del mundo completo, entre ellos el ritmo conocido como dembow.

Todo deriva de ahí, pues el dembow tiene el mismo ritmo que el latir de tu corazón. Este rimo musical es muy fácil de interpretar desde la niñez, por eso hay muchos niños que les gusta el reggaetón, porque es muy familiar. Si nosotros estuviésemos bailando desnudos alrededor de una fogata, seguramente lo estaríamos haciendo a este ritmo, no estaríamos bailando heavy-metal, eso es una rama más compleja. Esta rama es tan básica que cualquiera lo puede entender. Se comió el mundo por eso con la suma de las letras que dicen realmente lo que pasa en el mundo, es una verdadera representación de la sociedad. 

Es por eso último que no importa que la gente no entienda lo que digan las canciones, haz un evento de reggaetón en cualquier parte del mundo y todos van a estar bailando. El ritmo ya es conocido y la gente no lo puede soltar, es difícil que lo suelten o lo cambien por otro. Con el Internet empezaron a resurgir cosas que estaban dormidas, tales como los ritmos primitivos, volvieron, ya no somos ignorantes.