Fluir, construir, cambiar y aprender, son habilidades que sólo pueden conseguirse a través de la experiencia. Ximena Sariñana cuenta con una extensa carrera en la música que le ha permitido entender y vivir situaciones que la han hecho crecer como artista y persona.
Ella ha dedicado su vida al arte manteniendo presente su humanidad para saber reconocer habilidades en otros y compartir lo que puede con los que lo necesitan. Como actriz, cantante compositora, productora y activista, siempre ha buscado ser fiel a sus ideas y crear un ambiente de inclusión en cada proyecto.
Platicamos con Ximena sobre su más reciente sencillo ‘Una Vez Más’, cómo ha vivido los cambios en su vida, la maternidad, la inspiración en su carrera y su papel como nueva embajadora de ONU mujeres. Mientras trabaja en un disco nuevo, busca plantar una idea en la mente de la gente para visibilizar la inclusión en la música.
Qué gusto poder platicar contigo, ¿cómo has pasado esta cuarentena? Sobre todo con la noticia del nuevo bebé en camino, ¿ha repercutido en tus planes o en tu proceso creativo?
¡La verdad me ha ido muy bien! Afortunadamente me he podido adaptar bastante bien a las nuevas circunstancias, a las nuevas maneras de promocionar, también me ha ayudado que ya tenía lanzamientos listos, así que me he mantenido muy ocupada. Estoy en proceso de preparar un disco nuevo y eso ayuda a no tener que estar viajando de arriba para abajo.
Tienes una carrera bastante sólida que has construido con trabajo arduo y mucho estudio, lo cual es digno de admirarse. Desde que empezaste hasta ahora, han habido muchos cambios en la industria musical, ¿a qué retos personales te has enfrentado desde tu primer disco hasta este nuevo sencillo?
Son muchos los años que llevo trabajando en la industria, así que me ha tocado pasar por muchos de sus cambios. Cuando me firmaron no había nada de dinero y no sabían qué iba a pasar con el internet; hice un disco crossover cuando no era algo tan frecuente, viví el reto de trabajar en otro país y en otro idioma.
Ahora parece que el mercado no tiene límites, que tu música se escucha independientemente del idioma y en varias partes del mundo. Me tocó ser parteaguas en el tema de las colaboraciones y ahora es de las cosas más comunes, todos lo hacen y nadie te pone un pero, antes no era así. Me ha tocado aprender mucho, desde ser mi propia productora, ser mi propia directora musical, tener todo el control, hasta soltar un poco el control; en este momento estoy en otro aprendizaje: cómo sobrellevar la industria en estos nuevos tiempos junto con el reto de ser música y madre a la vez buscando equilibrar estas dos facetas de la vida.
Ya he pasado por muchas cosas pero al final he tenido la posibilidad de adaptarme y poder seguir manteniéndome vigente en mi carrera.
Me da curiosidad, ya que has dicho que eras fan de Radiohead, Björk y artistas de ese estilo, ¿cómo ha cambiado lo que escuchabas antes a lo que escuchas ahora?
La verdad es que no tanto. Desde muy joven tomé la decisión que como estudiante de música tenía que adentrarme realmente a escuchar de todo. Mi playlist desde entonces ha sido muy variada.
Obviamente Radiohead, Björk y Fiona Apple son de lo que más me marcó en cierta época de mi vida que fue muy importante, en esos años de formación cuando te estás definiendo como adulto, como músico, creo que esa influencia nunca me va a dejar, al igual que el jazz. Puedo escuchar el disco de Laura Marling pegado con el de Four Tet, pasando por Danny Ocean y me gusta todo, disfruto toda la música.
Tuviste una participación en “La Casa de las Flores” y estás presente en muchas actividades artísticas, ¿qué artistas te inspiran en estos momentos?
Cuando eres joven admiras mucho a las personas que no conoces. Admiras la carrera de Björk, Fiona Apple, Radiohead, por ejemplo. Creo que conforme vas creciendo, vas admirando más a las personas que tienes cerca, que eres capaz de ver sus historias y lo que han logrado. En ese aspecto me siento muy afortunada de pertenecer a una generación de artistas mujeres que admiro profundamente por cómo son personalmente, cómo han manejado su vida, sus carreras y su música, además de que todas son ridículamente talentosas; eso va desde Natalia Lafourcade, Francisca Valenzuela, Mon Laferte, Daniela Spalla, Elsa y Elmar, Paty Cantú, muchas cantautoras.
Cuando realmente conoces su trayectoria, conoces lo que hacen, las conoces personalmente, dices “¡Wow! Estas mujeres lo que trabajan, lo que hacen, las conclusiones a las que llegan, las familias que tienen, sus relaciones interpersonales, la vibra tan linda que tienen, lo fregonas que son”. De verdad se vuelven las personas que más admiras.
Justamente este último sencillo, “Una Vez Mas”, lo trabajaste con Marian Ruzzi como productora, quien también tiene una gran carrera. ¿Ya habías trabajado antes con productoras mujeres, cómo fue esta experiencia?
Sí había trabajado con una productora mujer hace muchos años, de hecho Natalia Lafourcade produjo ‘Tu y Yo’, una canción mía en mi segundo álbum, desde ese entonces me acuerdo haber pensado en lo increíble que fue trabajar con una productora. Natalia y yo somos muy amigas, nos conocemos desde hace mucho, es casi como una hermana, entonces fue muy natural para mí trabajar con ella, pero no había vuelto a hacerlo desde ese entonces.
Creo que es super importante cambiar esa narrativa en la industria de la música, porque a veces no es una decisión consciente sino que cuando ves los créditos de las canciones, la mayoría, la verdad, son producidas por hombres, exceptuando cuando es una artista que produjo su propia música. Pareciera que no hay ese oficio en las mujeres.
No hay productoras con ese oficio y no es por falta de talento o porque no tengamos las capacidades, es porque no hay muchos referentes y tampoco hay tantas oportunidades, eso es lo que estamos trabajando arduamente para cambiar. Desde esta idea, fue algo muy consciente. Marian es una persona super talentosa, sabía que lo iba a poder hacer y confié en ella con los ojos cerrados, le di control absoluto, así como lo haría con cualquier productor en el que confío en esta etapa de mi carrera. Fue una decisión premeditada el decir: “que sea una mujer, que tenga el crédito”. Vamos a buscar y trabajar con más mujeres productoras y cambiar esa narrativa.
Hablando de colaboraciones, hace poco se estrenó la que hiciste con LP (‘Girls Go Wild’) y hace un tiempo salió una con McFly (‘Those Were The Day’”), ¿cómo se dieron estas colaboraciones?
La verdad es que, en el caso de McFly, fue una cosa muy loca. Estábamos en Sonic Ranch, trabajando en dos canciones para mi tercer disco, que yo produje. En estos estudios, es muy común que cuando estes grabando haya algún otro artista de distinto género o país trabajando al mismo tiempo, así que se hace una convivencia muy linda porque compartes casa y estas todo el tiempo recibiendo la información de lo que está sucediendo en los otros estudios; escuchas, convives y es muy divertido.
Los chicos de McFly son muy lindos; me escucharon cantar, escucharon mis canciones y yo las suyas y me dijeron, así muy imporvisado: “oye, tenemos esta canción que sentimos que podría ir super bonita con una voz de mujer, ¿te interesa grabarla?” Estábamos todos ahí y dije “¡claro, por supuesto!, ¿por qué no?” Hasta tenían a alguien de redes y contenido haciendo un documental, entonces hicimos el videoclip de una vez. La colaboración se hizo pero nunca salió jajaja, no supe qué paso jajajaja. Hace muy poco me escribieron y me dijeron que querían sacar la colaboración y dije “¡claro, por supuesto, qué padre!”.
En el caso de LP es similar. Tenemos muchos amigos en común, hemos estado muy pendientes yo de su carrera y ella de la mía, cuando saqué mi disco en inglés ella también estaba sacando disco, entonces a las dos nos trataban como “artista nueva”; nos topábamos en muchas promociones, nos andábamos pisando los talones jajaja, desde ahí estábamos familiarizadas la una con la otra.
Después empezó a venir mucho a México, se hizo un equipo de trabajo acá y salió esta posibilidad de hacer la versión en español de ‘Girls Go Wild’. Le gustó mucho lo que hice y me invitó a cantarla a sus shows en México. Toda la relación fue muy natural, de profunda admiración y respeto de artista a artista, admiro mucho su trabajo y espero que podamos seguir haciendo cosas juntas.
Alguna vez escuché que tu vida había cambiado mucho desde que nació Franca, sobre todo porque los bebés necesitan rutinas, ¿cómo cambió tu proceso creativo?
Te cambia la vida. Está la frase cliché de “la maternidad te cambia la vida”, y sí, literal te cambia la vida. No hay manera de que puedas seguir siendo la misma persona ni funcionando de la misma manera cuando tienes a una persona ahí, que además es lo mas importante de tu mundo y te necesita tanto; yo muy afortunadamente logré acomodarme de una manera en la que pude seguir trabajando.
Probablemente el primer año de Franca fue lo que más he trabajado en mi vida, en promoción, viajes, giras. Estuvimos como locas, pero ayudó mucho que tuve el suficiente apoyo de la gente que me rodea para acomodar la forma en que yo quería vivir ese momento, llevándomela a todos lados jajaja. Eso se hace con mucho apoyo, de todo mundo, de la gente con la que trabajo, de mi familia, de ella misma por volverse una persona adaptable, además de mucho esfuerzo porque es mil veces más complicado y cansado, tienes que hacer mucha más logística y nada de tiempo libre jajaja.
Aún así, valió muchísimo la pena para mí. Es adaptarte. Si tú decides convertirte en madre tienes que estar muy abierta a la posibilidad de que tu vida cambie y a que te tienes que adaptar. Sí se puede.
Pienso que ser mujer le añade bastante emoción a ser artista, ser madre todavía le suma un poco más, ¿crees que esto influyó en tu nombramiento como embajadora de ONU mujeres?
Sin lugar a dudas, la igualdad de género ha sido algo que me ha llamado mucho la atención a lo largo de mi carrera. Con ONU mujeres ya llevaba tiempo trabajando, sobre todo en sus días naranjas, ayudándoles mucho con la comunicación y demás.
Ser nombrada Embajadora de Buena Voluntad es dar ese paso más contundente y comprometerse de una manera diferente a todo esto y tomar más activamente pasos desde donde yo puedo, cambiar y mejorar la inclusión de las mujeres sobre todo en lo que yo hago, en la música.
Es por eso que hemos estado organizando songcamps, desde esta canción ‘Una Vez Más’ que es la primera que se hace realmente con este espíritu de inclusión absoluta; ya organicé otro exclusivo de puras mujeres para escribir canciones para mí.
Es una práctica que se hace muchísimo en el mundo del reggaetón y música pop, pero nunca con puras mujeres. Quiero buscar colaboradoras, ingenieras, productoras, músicas y con este nuevo disco, averiguar realmente cómo suena, cómo se ve un álbum genuinamente inclusivo al cien por ciento.