Barajar y dar de nuevo. La banda argentina Salvapantallas apareció de un día para el otro y logró rápidamente asentarse en los principales escenarios de la Argentina. El dúo conformado por Santi Celli y Zoe Gotusso tuvo una separación tan abrupta como su aparición, sin embargo esto permitió que ambos decidieron mostrar sus talentos por separados.
El oriundo de Córdoba rápidamente sorprendió a todos con su canción ‘Sincero’ dónde empezó a mostrar una faceta muy diferente a lo visto en sus anteriores trabajos pero también más aggiornada al sonido actual. Este sólo fue el primer adelanto de ‘Reset’ su primer álbum como solista y una demostración de esta nueva faceta de Celli como frontman.
Sin embargo el disco llegó junto a la cuarentena obligatoria por el COVID-19, impidiendo poder aún prestar el disco en los escenarios, aunque sí pudo hacerlo mediante streaming dónde tocó en la primer edición virtual del festival Quilmes Rock. Enfocado en seguir produciendo nuevo material, y en la espera del retorno a los grandes escenario, Santi Celli habló con WARP y contó todo sobre este nuevo capítulo en su historia musical.
¿Cómo fue la producción del disco?
Hice las canciones en un aparato más preparado para producir música electrónica, pero lo usé sin mirar el manual o ningún tutorial porque le terminé dando un uso poco convencional. Venía de una escuela de una escuela de mucho más cantautor con guitarra.
Justo me estaba recuperando de una quebradura de brazo que me impedía tocar pero estaba en un momento dónde si o si necesitaba componer porque es algo terapéutico para mi. Así que tuve que idear la manera de poder crear prescindiendo de la guitarra. Ahí armé las primeras bases de las canciones, después ya viajé a Buenos Aires, pues estaba en la provincia de Córdoba, y mis amigos me ayudaron a producir el disco.
Fuimos al estudio con esas bases y empezamos a tirar ideas hasta que terminó en esto. Al principio éramos Diego Mema (toca con Indios y Juan Ingaramo), Fran Saglietti (Francisca y los Exploradores), Feli Colina, Manu Figueredo (Salvapantalla) y Nicolas Btesh. Hasta el final, igual llegamos junto con Diego Mema.
¿Cómo fue cambiar el chip de tu trabajo en Salvapantallas a este, sentiste que esta nueva música está más ligada a tí?
Yo me siento mucho más conectado con la música que hago ahora que con la que hacía en Salvapantallas. Acá tomé las decisiones yo y no tuve que ponerme de acuerdo con nadie y me hace sentirlo más mío.
¿Descubriste una nueva faceta tuya mientras grababas este primer álbum como solista?
Más que descubrir la faceta, porque son roles que en Salvapantallas ya tenía, fue redescubrir y reinventar un proyecto nuevo y diferente; desde la forma de hablar a través de las canciones, las temáticas, la manera de escribir, la manera de cantar o los ritmos que empecé a elegir.
Acomodé todas las decisiones musicales y estéticas a algo que acompañara a mi figura. En vez de pensar más para el dúo o para cosas que cante Zoe (Gotusso) como me pasaba en Salvapantallas empecé a hacerlo para mi.
¿Esperabas que tu público recibiera de tan buena manera este nuevo disco?
Tuve bastante ansiedad porque no sabia como se lo iban a tomar, yo no había estado nunca en un rol como el que tengo ahora. Intenté no ser tibio y por eso me quise asegurar que la primera canción que sacara sea una carta de presentación para decir -soy esto y estoy arrancando otra vez, fíjense que onda-.
Desde el arranque con ‘Sincero’ mostraste que se venía otro estilo de música en vos, un poco más alejada de la escuela de la canción más latinoamericana y más cercana a un sonido moderno. ¿Por qué elegiste ese rumbo musical?
A mi me gusta esa música, siempre me gustó. Así como consumo João Gilberto también escucho esos géneros. Me divierte mezclar un poquito todo, saber que tengo una escuela a lo largo de mi vida de los cancionistas populares argentinos pero a la vez disfrutar mucho de los sonidos nuevos.
Tratar de hacer mi propio interpretación de esa ensalada y sacar algo. No están separados por cajones en mi cabeza, es todo música. Todo pasa por un lugar del oído y de lo que el inconsciente va guardando a nivel estético. No es que un día me despierto y decido hacer un reggaetón o un bossa nova… no me sale de esa forma. Me sale la mezcla ya hecha.
¿Y cómo compones entonces?
En general sale de algo que encuentro que puede ser una frase hablaba que me divierta. Por ejemplo -Gracias por nada, por favor por todo- era una oración que me divertía pero no tenía una música. Construí un ritmo pensando que era lo que podía llegar a quedarle mejor a mi criterio.
Muchas veces sale de un loop musical que se está repitiendo y ahí empiezo a cantar sobre eso. También en ocasiones ya tengo una base completa y tengo ganas de improvisar una letra. Hay muchos lugares desde los cuales se puede entrar.
Es como si fuese un castillo de muchas puertas y tenés que descubrir cuál es la que está abierta. Escucho bastante música, es parte de mi rutina. No hay otra manera de estar en movimiento de lo que uno puede sacar. Sino comés no hay nada para dar.