Por: Jesica Vergara
Contar con una infancia labrada en la comunidad latina de una ciudad como Los Ángeles la convirtió en una intérprete multicultural con los ojos bien abiertos al mundo. Mientras, por otra parte, sus raíces chilenas e influencia en las artes y literatura han llevado a Francisca Valenzuela a ser una artista completa.
Ella ha logrado construir su voz y camino propio, componiendo canciones repletas de sinceridad. Es por ello que hablamos con ella desde una perspectiva sensible y traviesa, en donde se atrevió a jugar con palabras íntimas que invitan a cantar y sacar a la luz el lado oculto que no muchos se atreven a explotar.
¿Cómo fue juntar todas esas líneas y darle una voz tan fresca y divertida, cómo fue crear este sencillo, qué pasaba en tu vida cuando surgió?
Es una canción que elegí entre todas las canciones nuevas. Es fresca, entretenida y bailable, pero a su vez con sentido del humor, algo popero. Cuando me imaginaba la historia y el video de la canción pensé que podría ser un buen sencillo y es una canción entretenida, muy buena onda con un mensaje positivo sobre el cuerpo.
¿Cómo fue grabar el video para ‘Tómame’?
Fue bakán. Lo dirigí y edité, es algo genial porque nunca había dirigido un video con coreógrafa ni en set, quería que fuera muy colorido, muy expresivo, con mucha vitalidad y que a la misma manera fuera súper bailable, chistoso, no tan serio, bien libre.
Después de tantos años de trayectoria musical, ¿por cuántos retos ha pasado Francisca Valenzuela?
Muchos, yo creo. Como todo, hemos pasado por cosas independientemente a nuestro trabajo e historia y en cuanto a la música trabajo haciendo mi carrera. En sí, no me he encontrado con ningún obstáculo, afortunadamente nada me ha imposibilitado seguir haciendo mi música que está construyendo su propio camino a su manera.
¿Cómo fue trabajar con más personas, dirigir y decidirte por incorporar coreografías a este video?
Hubieron muchas cosas nuevas, dirigir un video fue genial porque conté con un equipo que me ayudó a materializar la edición. Fue un equipo muy entretenido de chilenos con argentinos, uruguayos y gringos, éramos poquitos, pero me motivaron a lograrlo, me apoyaron y creyeron en mi, en lo que yo quería hacer, lo cual fue súper rico como primera experiencia. Estoy muy agradecida de haberlos encontrado.
En cuanto a la coreografía, me encanta bailar, tengo varios videos donde bailo sola como ‘Estremecer’ o ‘Quiero Verte Más’, pero no con un ballet. Mi idea era hacer algo un poquito más de grupo con mujeres, algo colectivo sumados con posiciones, actitud y fue muy entretenido porque ensayamos dos veces y la tercera ya fue en el set con todas las chiquillas que eran demasiado buena onda y súper profesionales, tremendas bailarinas.
Cuatro años son pocos y muchos para preparar un nuevo álbum, ¿cómo fue el proceso para que el material vea la luz próximamente?
El proceso ha sido componer, componer y componer. He compuesto un montón de material, estoy colaborando con productores y todavía me quedan unas cosas por grabar para que estoy súper entusiasmada de compartir.
Fue preparar el sencillo, hacer el video, lanzarlo, hacer toda la difusión; ahora lo que viene es una gira por Chile, Colombia, ojalá volver a México. Tengo unas cosas programadas por Estados Unidos y la idea también es colaborar y seguir adelante con Ruidosa en el festival y plataformas digitales, entonces tengo varias cosas en carpeta siempre activa y se alimenta de la música que estoy haciendo.
Normalmente tus canciones hablan de cosas que no diría una chica, son la voz de una persona que siempre va más allá, ¿Qué te empujó a ir por otro tono, darle un giro a tu nuevo sencillo?
Yo creo que en el fondo más que pensar como el contraste a lo que están haciendo otras personas o la forma en cómo me diferencio, está es la postura que yo tengo, es decir, la vida que yo vivo, la pareja que yo tengo, la música y cine que me gustan, los valores que me interesan, todo tiene que ver con esto.
Soy una persona que es clara y lucha por lo que piensa y tiene esencia, trata de batallar sus propios demonios, pero a la vez es alguien que tiene sentido del humor, se ríe, disfruta, que pide a alguien que se entrega y recibe, pero también es vulnerable. De alguna manera esto es algo que aunque yo quisiera removerme, aparece solo porque es parte de la identidad que va atravesando las canciones que sigo.
Nadie se esperaba una canción que eleva la temperatura, ¿cómo es ver la reacción al video?
Ha sido buena, yo creo que también hay que pensar que uno está en un mundo con canciones llenas de este tipo por todos los lugares, es decir, en el fondo lo que quiero decir es que no encuentro que sea algo totalmente diferente, para nada, habla un lenguaje que todos los seres humanos hablamos, es algo que ha existido en la música desde hace mucho tiempo. De alguna forma este es otro sabor más dentro del repertorio de las emociones, de las canciones que yo quiero o puedo crear.
Veo que la reacción ha sido positiva, más que nada porque ha sido recibida por que es una canción entretenida, buena onda que te hace bailar. No hay mayor pretensión y es lo que me ha gustado, que se ha transmitido con esa frescura y ese personaje de la canción; en pocos días ha tenido súper buena recepción, ya sea de fans, artistas, colegas y medios.
¿Nos podemos esperar más colores, formas y canciones agridulces en el próximo material?
De todo, hay en el fondo un hilo conductor que tiene que ver porque no solo soy yo quien crea todo este contenido, pero obviamente también hay una búsqueda de sonido y tipo de calidad musical y sónico de ‘Tómame’ que empieza a marcar el camino y la ruta de cómo sonará el álbum en su totalidad.
En las canciones habrá variedad, desde las bailables o poperas, otras más lentas que son reflexivas e íntimas y todas se construyen con base a la melodía, los pianos, las percusiones. Todavía estoy jugando con las diferentes canciones, pero estoy entusiasmada con compartirlo, será una cosa muy expresiva con bastantes colores, vida y demás.
¿Este próximo material ya tiene nombre?
Todavía no hay nombre para el álbum, estoy abierta a sugerencias. En tanto, este sencillo por ahora es ‘Tómame’. Estoy terminando de grabar las demás canciones.
¿Qué le falta por hacer a Francisca?
Muchas cosas. En el aspecto musical yo creo que quiero poder seguir tocando y creando música y creciendo como artista, como cantante y en todos los aspectos. Aunque he logrado hacer muchas cosas, todavía faltan más por realizar. Estoy en un lugar donde me considero gozosa, esto me da ánimos para lo que viene, sigo buscando y desarrollándome para componer, tocar, colaborar, tocar en más escenarios, viajar por temas lugares, seguir haciendo canciones con las cuales conecto.
Por otra parte en el sentido más humano queda mucho desarrollo personal, crecer y ser un adulto funcional, avanzar en la vida, ir por todas las cosas que pueden venir. Es un día a la vez. Siempre he sido una buena chica que disfruta de todo, de estar en la casa, leer, ir al cine… el estar operativo en un mundo lleno de caos, cosas y emociones siempre es algo difícil hasta abrumador y uno tiene que estar centrado.
¿Cómo es ser la voz de Ruidosa Fest?
Ruidosa es una emoción tremenda, me inspira y motiva mucho el hecho de que sembré esta semilla ya y está tomando forma, es un árbol que ha crecido con muchísimas colaboraciones y personas o proyectos, es algo que ha resonado en Chile, Latinoamérica y el mundo. Es trabajar en una sociedad realmente diversa, igualitaria y justa, ir en pro de la posibilidad de tener industrias creativas y musicales muchísimo más participación femenina con mayor igualdad de condiciones laborales y derribar estereotipos que pueden ir en contra de las mujeres en cuanto a su naturaleza creativa.
¿Qué está pasando en la vida de Francisca Valenzuela, la intérprete y la persona?
En la parte musical estoy en pleno comienzo de una nueva etapa, estoy preparando nuevos shows, disco, gira, mi equipo, algo más en la faceta independiente y de estrategia. Trabajo muy duro en lo artístico, en lo ejecutivo y creativo.
En la parte personal yo creo que aprendiendo a disfrutar y estar presente en esto. Hay una frase muy linda que me comentó Vicente, mi productor y pareja, pero no recuerdo de quién es originalmente y dice que -“Hay que tomarse el trabajo en serio, pero uno no tanto”-, de alguna manera estoy tratando de navegar para poder disfrutar y estar agradecido, estár consciente y trabajar, aportar como músico y ser humano, pasarla bien para conectar.
¿Ser mujer sigue siendo difícil, es lo mismo en el ambiente musical?
Yo creo que la respuesta de eso es sí. Una mujer en India fue violada consecutivamente por un grupo de hombres y no hay justicia o la brecha salarial, te puedo dar data dura que indica que ser mujer es más difícil y puedo decir testimonialmente que hay muchísimas mujeres en muchísimos rubros del mundo que todavía se encuentran con comportamiento sexista, desigualdad y violencia. No significa que no estemos avanzando, aunque hay un montón de trabajo realizado, no podemos generalizar de la sociedad porque hay mujeres y hombres apoyando a las causas de los derechos para la mujer de minorías y derechos humanos. Todavía estamos en un planeta que le debe mucho a la mujer y tenemos que pelear por una sociedad más justa, igualitaria, donde no se opriman los derechos ni la seguridad de las mujeres.
En diferentes instancias existen, los estereotipos en el mundo musical dicen que sí pueden haber mujeres, pero de un tipo y necesitamos representación un poco más amplia. Existe también una exigencia mayor por otras cosas que quizá a los hombres no se les valora. También hay una falta de participación real, es decir, nosotras en Ruidosa hacemos estudio de participación de mujeres en festivales y premios con números muy bajos, menos del 15%.
Hay un problema real, necesitamos preguntarnos por qué pasan estas cosas y qué podemos hacer de manera integral en los carteles y no solamente como artistas. Hay una desventaja histórica que en el fondo demuestra que las mujeres hemos estado rezagadas cuando salimos al mundo siendo pioneras. Estamos experimentando un paradigma donde la sociedad está recibiendo y consumiendo creatividad e historia de una diversidad de personas, no solamente mujeres y hombres, vienen de lugares o geografía donde han sido silenciados.