El músico venezolano-estadounidense Devendra Banhart sorprendió a los críticos y a los escuchas con el lanzamiento de ma (2019) a mediados de este año. Un material de 13 piezas verdaderamente íntimas en donde el cantautor experimenta con su reconocida mezcla de folk-pop con elementos tradicionales latinoamericanos. Se trata de un álbum que además cuenta con un enfoque muy particular, puesto que todas las piezas tratan de replicar al amor, compasión y enseñanzas de una madre.
Pero, a palabras del cantautor, no trata sobre cualquier madre, trata sobre las cualidades maternas de la música. “Hay una expresión de gratitud a la cualidad del arte y la música“, declaró, agregando que se ha dado cuenta de que “cuando me siento frustrado o vulnerable en una manera en la cual me da inseguridad, cuando me siento solo, cuando tengo miedo… todavía voy a la música o al arte para calmarme“.
Es por esta razón que por primera ocasión, el venezolano decidió acercarse a colaborar con su mayor influencia, la cantautora inglesa Vashti Bunyan que ganó un seguimiento de culto a mediados de los años noventa gracias al resurgimiento en la Internet de su único álbum hasta ese momento, el intimista Just Another Diamond Day (1970). “Yo sigo regresando a su música para encontrar esa consolación, para encontrar ese amor. Pero tengo mucha suerte en que soy amigo de ella”, nos indicó en esta entrevista que también trata sobre su madre patria Venezuela.
Leí una reseña en Pitchfork en la cual declaran que ma es un intento de hablar al hijo que no tendrás. Declaran que tú dijiste que el álbum es un mensaje a un hijo que no vas a tener, pero yo me pregunto ¿por qué estás tan seguro de que no tendrás un hijo?
No es eso. No es que estoy seguro de que vaya a tener un hijo. Es que no importa si tengo o no tengo. Se sintió natural a esta edad, en este momento, el hacer un álbum en el cual le comunico a un ser que acaba de nacer. Es mi versión de consejo y eso tiene mucho que ver con el punto de que la gente que yo conocí desde pequeñito, es la misma con la que toco música. Mi mundo social está hecho de gente con la que yo hago arte.
Por primera vez estoy en un ambiente en la que esta gente que conocí desde pequeñito tienen bebés. Ya son adultos y tienen hijos. Por mi parte, soy la tía en este mundo de bebés, enseñándoles a montar patineta, dibujar o hablar español. Es por ello que se sintió natural que el álbum, que es mi trabajo, sea sobre ese tema. Sobre el aconsejar a un nuevo ser, introduciéndome, dándole consejos que pueden no ser buenos, pero son mis consejos.
Mientras lo hacía, me di cuenta de que estaba diciendo todo lo que a mí me hubiera gustado haber oído. De repente, no sé, estoy en México, me gusta mucho. Tal vez salga y mañana despierte embarazada, no sé lo que va a pasar.
Supongo que has tenido muchas vivencias con niños, tienes muchos amigos con hijos…
No, a mí no me gusta la gente en verdad. No me gusta la gente generalmente y no tengo ese sentir especial de -ahh mira bebés, qué bello-. Te paro ahí, porque para mí… no. No lo sé, no me gusta mucho la gente. Si es pequeña o no, me da igual.
Pero, entonces se podría decir que el discurso de ma va dirigido a tu parte inocente, en lugar de ser para un niño en especial o tus amigos, es para ti….
Es especial por usar la metáfora de esa relación entre padre, madre, hijo e hija para comunicar diferentes temas. El álbum no solo tiene que ver sobre mi versión de consejo a un ser nuevo, también tiene que ver con mi relación con Venezuela, que ha sido una madre para mí, entonces cambia, no soy yo siendo el padre o la madre hablándole a un ser. El rol cambia, Venezuela ha sido mi madre.
También hay una expresión de gratitud a la calidad paterna del arte y la música. A esta edad me he dado cuenta de que cuando me siento frustrado o vulnerable en una manera en la cual me da inseguridad, cuando me siento solo, cuando tengo miedo… todavía voy a la música o al arte para calmarme, para sentirme amado, para sentir todas las cosas que la madre da. Entonces mucho del álbum es esa expresión de gratitud a la calidad que el arte y la música tiene. Así que, en fin, no me gusta la gente.
¿Has regresado a Venezuela ultimamente?
Es muy difícil ir ahora, pero fui hace dos años. Hay una canción en el álbum que se llama ‘Abre las Manos’ y es sobre las cosas que observé. Esa fila de gente esperando por un trocito de pan, esa opresión, una tensión, una paranoia, una ansiedad, que viene de estar en una dictadura que está fallando rotundamente.
En una dictadura bien hecha, por lo menos, la gente tiene comida, electricidad y medicina. La cosa en general es que se trabajan bajo la ideología de -nosotros contra todo el mundo-. Por ejemplo, Corea del Norte es – nosotros contra todo el mundo -. No es bueno, pero funciona como funciona una dictadura en la cual, a la fuerza, una persona hace que todos vean al resto del mundo como el enemigo.
En esta situación, en Venezuela, el gobierno, la dictadura, no solo está peleando contra el resto del mundo, también está peleando contra su propia gente. No es una dictadura que esté funcionando. Yo pensaba que la cosa no se podía poner peor hace dos años, pero la verdad es que ha estado empeorando desde hace más de 40 años. Cuando fui, fue tan deprimente que no creí que podría ponerse peor, pero sí, se ha empeorado… se ha empeorado.
Ahorita está en el punto en donde nada se está moviendo, todo mundo está aguantando la respiración. La esperanza es que la diplomacia pueda triunfar, pero no sé si eso va a ser posible.
Va a ser en algún momento, siempre pasa…
Ok, me gusta tu actitud. Tú actitud, como tus uñas, me gusta.
Yo soy un gran fan de Vashti Bunyan, me encantan los primeros álbumes. Has descrito que ella fue como tú madre en el lado artístico, me gustaría saber cómo fue trabajar con ella y qué es lo que te generan esos discos…
En el mismo tema de la maternidad, expresando gratitud a esa calidad materna de la música, no creo que haya una persona más perfecta que encarne el arquetipo de esa sabiduría del artista que puede poveer esa consolación materna. No hay artista que lo haga de una manera tan explícita como Vashti.
Cada quién tiene su versión, aunque yo creo que en Vashti todo el mundo que haya escuchado su música, lo puede sentir, lo experimenta. Es muy fácil porque muchas veces cuando escuchamos música, nos preguntamos de forma subconsciente si esta persona nos está siendo honesta y si yo le importo a esta persona. Subconscientemente estamos preguntándonos eso y Vashti está siendo honesta y tú le importas.
Woahh fuerte. Yo sigo regresando a su música para encontrar esa consolación, para encontrar ese amor. Pero tengo mucha suerte en que soy también amigo de ella. Ella es mi amiga y no sólo oigo su música para sentirme mejor, también le pido consejos. Ella es como la persona más punk para mí, porque es tan vulnerable. Si escuchas su música, inmediatamente se convierte en la cosa más íntima del mundo.
Eso no es fácil, es un esfuerzo porque uno se abre de una manera en la cual te mantienes desnudo. Esa honestidad es una forma de coraje muy efectivo porque es la esencia de la compasión. Derrumba la pared entre tú y yo. Vashti es así, ese primer álbum me salvó la vida, lo sigo oyendo, pero sigue escribiendo y ahora mismo está componiendo un nuevo álbum.
Gracias por preguntarme de Vashti y si no conocen su música, por favor escúchenla.
Me queda tiempo para otra pregunta. Hoy me puse muy triste porque uno de mis artistas favoritos, Jamie Stewart de Xiu Xiu, decidió anunciar un pequeño descanso por problemas de salud mental. Sé que tú colaboraste con él en un EP y me gustaría saber tú opinión respecto a Xiu Xiu y sobre cómo un artista debe enfrentarse a estos temas.
Bueno, Xiu Xiu, Jamie es un genio. Es una de esas personas que tienen una energía tan comandante en una forma tan obvia que no tiene que ver con su personalidad, tiene que ver con su carácter. La calidad de su carácter. Lo que él dice, sus historias, lo que está pensando cuando hace música es tan interesante, es tan elevado, que inmediatamente te callas porque quieres escuchar lo que tiene que decir.
También es un artista que es muy puro. Yo hice una gira con él de guitarra y canta, cada noche lo que él sacaba me inspiraba tanto. Para mí es muy difícil el acordarme de mis letras, casi a mitad de la canción me estoy olvidando de todo, esa es mi preocupación. Pero para él es tan presente, está dando tanto de su espíritu y corazón todas las noches, que en verdad me llenó de tanta humildad y de tanta pena de ser tan flojo porque yo canto unas cositas, peor él da todo y más.
Me pone muy triste que vaya a tomar un tiempo para seguir compartiendo su arte, pero me parece muy sabio saber hacer eso. También es un tema de que es una persona que da tanto de una forma tan fuerte que es importante que se tome su tiempo. Lo respeto muchísimo.