“Me imagino hacerlo real, que se vea lo que yo crecí y cómo se va transformando todo”, me declaró Ángel Quezada sobre su show soñado, a través de una conversación en ZOOM. Distante, pero cercano, en una plática sobre la realidad de los barrios mexicanos. “A mí no me da miedo contarle a la gente mis vivencias, mi vida o historias de mi raza”, afirmó el creador de Santa Fe Klan, “lo que sucede en mi barrio es la realidad”.
Él es un chico de 21 años de edad nacido en la colonia de Santa Fe, Guanajuato, que a lo largo de los últimos tres años se ha posicionado como uno de los rapero mexicanos más aclamados y seguidos del mundo, con docenas de millones de escuchas, pese a la crudeza de sus versos. No es para menos, su intención es narrar las cosas que pasan en el barrio… aquellas que la gente prefiere ignorar. Lo hace de forma directa, encontrando la poesía en el sufrimiento, la muerta y la violencia. “Yo hago mi música para llevarla lejos y enseñarles cómo vivimos la vida aquí, en el barrio, voy a llevar lejos al hip-hop y rap de mi barrio”, señaló.
Desamores inaguantables, problemas con las drogas, figuras que sufren ante una tragedia y el miedo al castigo divino de la religión. Las letras de Santa Fe Klan han conectado con millones de escuchas en México, Latinoamérica y el mundo debido a que su expresión lírica, dolorosa, le ha dado voz a aquellos que no la tenían. Es un impulso a las historias de vida de millones que normalmente son ignorados, es el dolor transformado en arte. Es por ello que su nuevo material Santa Cumbia (2021) se presenta como todo un logro para la cultura musical mexicana.
Lo dice el mismo Ángel, sobre la canción ‘Carmen’, basada en el trauma que sufrió su abuela ante el accidente que le arrebató la vida a su abuelo. “Estaba grabando y me dijo -gracias Angelito, por la canción-. Como que se acordó y no lloró, ni nada; de hecho, se puso feliz”, afirmó con una sonrisa en el rostro, orgulloso de haberle regalado algo inolvidable a su abuela. “Decidí escribirle una canción, para que se aliviane”, declaró.
Se trata de la cúspide del proceso evolutivo entre los géneros más importantes que ha dado el país. Una hibridación única de la música popular de distintos estados de la república con bases de cumbia, versos de rap y detalles de norteña y corrido. Es un álbum producido por Camilo Lara de Instituto Mexicano del Sonido y Toy Selectah, rico en sonidos, repleto de detalles únicos que convierten a los agresivos versos de Ángel en algo sobre lo que cualquiera se puede echar un baile.
El éxito de este material es una nueva señal, clarísima, de que las expresiones musicales más vibrantes siempre nacen de las necesidades expresivas de las clases trabajadoras. Santa Fe Klan demuestra que la música mexicana sigue evolucionando y que solo hay que confiar en ella para que nos siga entregando materiales históricos, aquellos que tienen un impacto real en la cultura. Su proyecto quedará escrito con letras doradas.
Oye, ¿cómo te fue al final con ese remix de Run The Jewels?
Bien chido, la neta me abrió muchas puertas. Yo solté mi disco de Santas Cumbias y luego eso también fue un vergazo más y me abrió muchas puertas más. Qué chido.
Ayer estaba escuchando Santa Cumbia y es un álbum bastante crudo. La primera canción con la cual tuve un impacto emocional bastante potente fue con ‘Carmen’, en la cual describes a una señora cuyo marido fallece. Me gustaría saber si estas historias son reales.
La de ‘Carmen’ se la escribí a mí abuelita porque haz de cuenta que mi abuelito tuvo un accidente cuando mi mamá era muy chiquita. Él trabajaba en una tolva y se volteó por un baldío en Puerto Vallarta. No sé bien qué pasó, pero explotó y mi abuelito se quemó, no murió, pero quedó achicharrado y así se lo llevaron al hospital.
Mi abuelita quedó bien traumada de ver todo eso y aparte ahorita no tiene una vida que digas que está muy chica, como para olvidarse de lo que pasó. Por eso se la escribí, ahorita que todavía la tengo, para que se sienta feliz y mínimo se eche un baile aunque la canción traiga toda la historia detrás.
Sí es real carnal, mi abuelita está traumada, es una señora triste y siempre está agachada. Como si tuviera algo, pero no tiene nada.
¿Ya le pusiste la canción?
Sí, grabé algunas tomas del video con ella. Estaba grabando y me dijo -gracias Angelito, por la canción-. Como que se acordó y no lloró, ni nada; de hecho, se puso feliz. Andaba haciendo quesadillas, haciéndonos de comer, mientras yo estaba grabando para que se viera real.
Está chida, todas las canciones son por alguien. Pero, esa es la que es más personal.
Es la única que deviene de una historia de tu familia.
Ajá. Las demás son por mujeres, amores que he tenido o he tratado de tener. Amigas que pues lamentablemente ya no están o amigas que me han contado historias medio extrañas. Todo es por mis vivencias porque en la calle me he encontrado de todo y he conocido muchas historias de amigas. Por eso, todo el disco tiene que ver con las mujeres.
Justo te iba a preguntar eso, cada canción del álbum de Santa Fe Klan está enfocado en una mujer. ¿Por qué crees que estás tan enfocado en relatar historias de mujeres en este momento?
Por todo lo que ha pasado. Haz de cuenta que yo crecí con mis dos hermanas, no tengo hermanos, de sangre no, calle un chingo, pero de sangre solo tengo dos hermanas. Mi papá me enseñó a cuidarlas, tratar bien a las mujeres. Entonces desde la escuela, cuando veía que alguien le hacía algo a alguna mujer, se me calentaba la sangre y me le dejaba ir. Muchas veces tuve peleas por tirarles el paro a dos o tres amigas.
Siempre he sido así con las mujeres, las quiero mucho, pero por lo mismo he sentido dolor debido a que muchas veces he tratado bien a personas que no se lo merecían. Todo por el amor que le tengo a las mujeres, he salido dañado y he dañado a muchas personas por decir lo que siento.
Esto ha sido real, todo lo convierto mejor en canciones porque se siente gacho conocer tantas historias y yo estar solo, no tengo a nadie. Todo tiene que ver ahí. Por eso todo tiene que ver con las mujeres. Aparte me gustan un chingo las mujeres jajaja.
Bueno, tienes a tu abuela, ¿no? Que ha estado bien contenta, bailando tu canción…
Sí, mi abuelita es la que anda bien contenta con su rola. Mis tíos también, se sacaron de onda, seguramente se preguntaron -¿y este güey cómo es que se enteró de todo?-.
Yo no sabía, neta; pero, una vez estuve en una platica y estuve escuchando todo eso. Ahí entendí por qué estaba así mi abue. Siempre la veía bien trancas, bien relax. Hasta hace poco que me contaron toda la historia, decidí escribirle una canción, para que se aliviane.
Por lo que me dices, supongo que las historias que más te impactan son las que escuchas de mujeres por tu casa…
Sí, es eso. Como crecí entre mujeres, pues tienen mucho que ver y las tomo mucho en cuenta en mi vida. Aparte, está revuelto con cosas de la calle, cosas que he vivido y que mis carnales han vivido. Pero, sí tiene que ver mucho con las mujeres este disco.
Camilo nos dijo que tu éxito devenía en que tú eres real. A mí me gustaría saber si tú crees que has logrado todo esto debido a que eres crudo y muy sincero con respecto al contexto en donde te ha tocado escuchas tantas historias.
Pues sí, carnal. A mí no me da miedo contarle a la gente mis vivencias, mi vida o historias de mi raza. La neta, nosotros no debemos nada, nunca hemos hecho nada malo. Pero, lamentablemente, así es la vida. A veces uno, entre más buena onda, más cosas nos pasan. Es por eso que no me da pena decir de donde soy o de donde crecí.
De una u otra manera, íbamos a sacar adelante a nuestra familia, aunque no fuera con la música. Yo no tengo la culpa que hayamos crecido en la calle. Todo es trabajo y se le respeta a toda la gente. Yo respeto a la gente que vaya por el camino bueno y por el camino malo. Igual, todos son mis amigos.
¿Qué es lo que amas más de Santa Fe, Guanajuato?
La cultura ahí, de la música. No sé, los vecinos, la gente, todos se conocen. Todos se han peleado con alguien de ahí. Somos como hermanos, somos como una familia. Ahorita porque no se puede, pero a la Virgen le hacen su fiesta y sale toda la colonia. El Día de los Niños les llevo algo. Es una familia y está bien chido volver para allá porque vuelvo al lugar de donde soy y veo todos los problemas, toda la gente, como se portan conmigo.
Cuando algo me pasa, ande donde ande, voy a Santa Fe y desde ahí pienso todo. A veces voy a llorar nomás, a pensar, a decirle a mí familia cómo ha estado todo el pedo. Está chido tener un lugar a donde volver. Ahí es la realidad, llego al barrio y pasa de todo.
He visto fotografías tuyas, llevando despensas a las familias de Santa Fe, en las redes sociales.
Sí, pues, son mis carnales y vecinos. Ellos también tuvieron mucho que ver en todo esto, me apoyaron mucho, mucha gente de ahí. A algunos no les gustaba porque siempre estaba en la calle, de vago, haciendo desmadre, pero ahora saben que no soy mala persona. A lo mejor un día estuve morrillo y éramos manchados, pero pues estábamos en la calle y era el instinto del barrio.
Yo estoy firme con toda mi gente, aunque algunos ahí de mi colonia no me hablen. Yo los quiero mucho a toda la raza, son mi familia y gracias a toda esa gente es que yo estoy donde estoy. Fueron los primeros que me apoyaron.
Con respecto a las imágenes del disco de Santa Fe Klan, son muy potentes las fotografías del acordeón. Sé que fue muy importante en tu vida…
Mi jefe me regaló un acordeón desde que estaba morrito, tenía como cinco años. Era un acordeón así, chiquito, de una pura hilera. Con ese, empecé a tocar y se dieron cuenta que sabía hacerlo. Después, me compraron un piano.
Mis juguetes eran cosas de música y sí sabía, no sé por qué. Yo no sé de tonos, no sé de letras de los tonos, neta, yo nomás por escuchar toco la canción. A lo mejor tardo en encontrar los botones, pero sí sé donde están. Si me dan chance, pues los encuentro y por eso me he enseñado a tocar el acordeón.
Yo no he ido a clases ni nada, he aprendido porque mi padre me compró instrumentos para jugar desde morrito. Después, ya tocaba cumbias porque es lo que siempre me ha gustado. Es mi música favorita. Si yo me echo un baño o estoy recogiendo algo en la casa, ponemos cumbias. Nos gusta a mí y a mis carnales, nos gusta escuchar cumbias.
Por eso empecé a tocarlas, porque empecé a escuchar sonidos en los bailes. Yo no sabía cómo se llamaban, pero se me quedaban los sonidos guardados y los tocaba en el piano o acordeón.
Hasta hace poquito fue que compré un acordeón chido, compré uno colombiano que fue con el que grabé el disco. Tiene como un año que lo agarré bien, ahora sí, bien, bien. Todo esto de la pandemia me hizo sentir que tengo un chingo de canciones de rap y quería aprender y dar a la gente algo nuevo. Yo sabía que sabía tocar el acordeón, solo tenía que agarrarlo y ahora que lo he hecho, pues ya pude hacer el disco, todos los tonos de los acordeones se me ocurrieron. En corto, le empecé a agarrar porque ya tenía la vivencia de morrillo.
¿En tu familia escuchaban mucha cumbia?
La familia de mi mamá es la que es bien cumbiera. Todos, les laten las cumbias desde que yo estaba morrillo. Todas las fiestas a donde me llevaban tenían puras cumbias. Me sentí muy seguro al hacerlas porque yo crecí con eso y hay gente que no me deja mentir. Ahí está el respeto de mi gente que escucha cumbias y que chido que me dijeran que estuvo chido, es la primera vez que lo hago.
Logras combinar dos mundos que no estaban unidos para nada, son bases de cumbias y piensas en la construcción de los versos como si fueran un rap, no una melodía. Es interesante porque entiendo que el salto lo hiciste naturalmente…
Yo nada más hice algo natural, algo real, para que los fans me conozcan en realidad quien soy. Gracias al Roco, al Camilo, el Toy, al Deca, la Marce, el Panque, varia gente que estuvo detrás de esto. Gracias a ellos pude cumplir mi sueño porque hacer rap, siempre lo voy a seguir haciendo, pero hacer un álbum de cumbias sí fue algo muy chido para mí.
Imagínate, yo siempre escucho cumbias y tener un disco de cumbias mío, bien producido, con videos, está bien chido. La neta no me da pena enseñarle a la gente qué me gusta, mis gustos de cantar, mis letras, decir de donde soy. Me siento bien orgulloso de ser de Santa Fe, de ser de México. Respeto a toda la raza, pero yo agarré todo lo de México. Esto es algo raro jajajaja.
Igual se siente un poco raro porque el enfoque de las letras cambio, ya no es un rap duro, son cumbias. Son románticas, se nota que metiste tu sentimentalismo ahí.
Simón, por eso hablé de puras morritas. Aparte de todo lo que ha pasado, tengo muchas amigas que me han contado y siempre he crecido con mujeres. Me desahogué muy chido con muchos desamores que traía, muchas tristezas e historias que conozco. Ahí, como que me desahogué.
Muchas personas me han mandado mensajes, dándome las gracias por hacer música porque les he ayudado a salir adelanto. A lo mejor yo muchas veces no me doy cuenta, porque estoy acá, saliendo adelante a mí manera, pero mi música ha ayudado a mucha gente y se siente muy chido.
Hemos estado hablando mucho del impacto de las historias de las mujeres en tu música. ¿Te considerarías una persona feminista?
Yo respeto todos los colores, todos los géneros, todos los números. Yo respeto todo carnal, la neta me enseñaron a respetar, mis jefes, me enseñaron a respetar en la calle. Por eso a mí no me da pena decir lo que yo soy. Para que me respete la gente, así como yo respeto a todos. Yo ni me meto en nada carnal, ando en lo mío, en la música. Uno opina nomás, desde la calle, como uno ve las cosas. Mínimo, yo voy a estar aquí para cuidar a todas las morritas y todo mi barrio está firme para cuidarlas.
Yo me considero una persona que no se mete en problemas y que no se mete en donde no se interesa. Hago lo mío y doy mi punto de vista por lo que he escuchado.
Tienes un equipo de productores mexicanos muy chingones en tu disco, Camilo Lara, Toy Selectah. Me gustaría saber qué fue lo que te aportaron.
Yo les enseñé los previos, las había grabado con acordeón, una characa, les metimos unos tambores, guitarras y bajo. Yo se los mandé todo en crudo.
El que me dijo que se lo llevara a Camilo fue el Rocco, él me ayudó a tocar el acordeón y me dijo que tenía que escucharlo. Le mandé un mensaje, lo saludé y le dije que andaba con el Rocco haciendo un álbum de cumbias. Le dije que cuando tuviera chance, iba a ir a México para enseñárselo. Me dijo que sí estaba interesado en escucharlo. Así que fui para allá y a Camilo se le notaba que le causó algo.
Si ya estaba raro, él sabía que lo podía hacer todavía más extraño y ellos fueron quienes hicieron que se terminara de sentir eso que se siente porque no quedó solo en mi idea o en mi mente. La gente se dio cuenta de lo que tratamos de hacer y ellos metieron muchos efectos, instrumentos, tienen muchos fierros para que se escuche real.
Luego, como ellos son amigos, le escribí a Toy. Camilo quería darle a todo, dijo que no había pedo. Pero, le dije, mira carnal, el Toy también está firme para hacer algunas canciones y le propuse que él hiciera la mitad y la otra mitad el Toy Selectah. Como eran nueve canciones, les di cuatro y cuatro y me sobró una. Estuve viendo quién la iba a hacer y le mandé un mensaje al Dusti, el carnal aceptó e hizo la canción que nos faltaba.
No estuvo forzado, fue tan natural. Lo único que hice fue mostrárselos, llegué a decirles -mira lo que hice- y como yo sabía que ellos sabían mucho de cumbia. Yo soy muy fan de Celso Piña y por eso quise que Toy estuviera ahí porque trae el flow de Monterrey. Camilo es de aquí, de México, quería unir la cumbia de todo el país y a ellos les gustó. Entendieron lo que yo quise cantar.
No fue por interés, no quería a esto o a este. Fue, pues natural, la neta, la cumbia quizo que nos juntáramos todos los que nos terminamos juntando. Vamos a seguir haciendo música, rap y cumbias. De todo.
¿En qué crees que se va a transformar Santa Fe Klan?
Se va a transformar como en varios grupos, a lo mejor. En mis shows, hasta he soñado y pensado en algún día subirme y enseñarle a la raza cómo empezó todo.
De morrillo me gustaba grafitear, pero dejé de hacerlo porque pinto bien gacho. Me voy a enseñar, me voy a enseñar a tatuar. Cuando ande en el barrio, quiero ir a tatuar a la banda. Quiero bailar break-dance. Voy a traer a mí DJ, el Deca, tirando scratches. No sé, quiero hacerlo real, que se vea lo que yo crecí y cómo se va transformando todo.
Después, de ahí, abrir un tequila después de hacer rap, de hacer todo ese show. Que me pasen mi guitarra y cantarles un corrido a la banda como para que se relajen y vayan por una chela, vayan al baño, lo que sea. Para que cambie el mood. Luego, cantarles unas cumbias, sacar mis acordeones, cantarles unas norteñas y que termine la gente bailando.
Así me imagino algún día. A lo mejor, algún día llevo diferentes cosas a diferentes ciudades. Quiero explorar, tengo amigos de varios géneros e invitaré en esos conciertos a esos artistas para cantar canciones de todo. Va a estar chido, va a estar divertido, la banda se lo pasará chido.