// Por: Staff

mié 10 noviembre, 2021

Fotos: Liz Evans

Estamos ante un ser de luz en cuanto a sonoridades ochenteras directamente enmarcadas con synthpop, electro-pop y retrowave. La bonaerense LAU (Laura Fares) lleva un buen puñado de años a las sombras, en un en todo momento vital segundo plano, componiendo, tocando como baterista y actuando junto a grandes nombres como Sam Sparro, Robyn, NINA, Big Black Delta o Erasure.

Ahora apuesta plenamente por su carrera en solitario. Fruto de ello fue su primer álbum Believer (2020). Justo un año después publicará nuevo LP del que aún no ha trascendido el título. Sí un par de sencillos “Undecided” y “Give Her Your Love” que justo saldrá ahora en noviembre. También sabemos que sucederá en todo momento vía Aztec Records, discográfica donde es también directora artística. No para, así que hablar con ella es todo un logro.

Puro colmillo

La primera cuestión, a colmillo en tu pasado ¿cómo, cuándo y dónde empezó tu pasión por la música?

Mi pasión por la música comenzó en mi adolescencia, cuando formé una banda de rock con mis amigas de la secundaria, en mi ciudad natal, Buenos Aires. Yo estaba fascinada por la batería y era muy raro ver mujeres ejerciendo ese rol.

¿En concreto por esos sonidos sintetizados pop que encierran mucho amor por una década como fueron los 80? ¿Le damos las gracias a alguien o algo?

Viví mi infancia en los años 80, así que ese tipo de música me genera mucha nostalgia y me trae lindos recuerdos. Mis primeros cassettes (Tina Turner, Phil Collins, Madonna) me marcaron mucho. No me cansaba de escucharlos. Más adelante descubrí a Queen, Roxette, A-Ha, Tears For Fears, que son bandas que influencian mucho mi música hoy en día.

Compones, cantas y además eres baterista ¿cómo sucedió el aprendizaje en cada una de estas cosas y en cuál de estos campos crees que destacas más? ¿Por qué?

La batería empezó como hobby (yo era autodidacta), pero al mudarme a Londres, decidí hacer de la música mi carrera y vivir de eso. Así que estudié Música Popular en la universidad (donde aprendí no sólo mi instrumento, pero también producción) y comencé a irme de gira con diferentes bandas y artistas internacionales como Sam Sparro, Taio Cruz, Clean Bandit y otros. Aprendí muchísimo durante esos años. También fui productora y DJ por mucho tiempo.

Ahora mismo estoy enfocada en ser cantautora y en escribir las mejores canciones que pueda. Es un proceso muy personal, y no es fácil abrirse y decir lo que uno está atravesando, pero a mí me sirve como una especie de terapia.

Hace apenas un año publicaste Believer (2020), ¿tu primer álbum en solitario, verdad? ¿Qué tal funcionó y defínenos un poco cómo era tu anterior vida de artista participando en numerosos proyectos?

Believer marcó el comienzo de una nueva etapa importantísima en mi vida. Por un lado, significó el comienzo de mi carrera como solista, pero también el creer en mí misma, en mis aptitudes musicales, en mi voz, en mi imagen y en lo que tengo para decir.

Junté el coraje para pasar al frente después de tantos años estando detrás de otros proyectos y otros álbumes. Siento que es una etapa que era necesaria en mi vida y que tuve que vivir por todas mis otras etapas musicales (y usar todas esas experiencias) para llegar hasta acá.

Tu nuevo LP no se hará de rogar. Ya nos estás presentando nuevas canciones de tu próximo disco ¿qué nos dices de ellas? Y del nuevo largo ¿ya tiene título? ¿Qué lo distingue del anterior?

Este segundo álbum es mucho más positivo. Me volví a enamorar, volví a creer en el amor, pero esta vez lidiando con una relación a distancia y la pandemia de por medio. Creo que es una situación que mucha gente atravesó este año, y de eso se trata mi nuevo álbum.

¿Es posible enamorarse por Zoom, sin haber conocido a la persona cara a cara? Mi nuevo single ‘Undecided’ habla de una indecisión, esa ansiedad por conocer a la otra persona y verificar si ese amor es real o si es sólo una fantasía.

El segundo single ‘Give Her Your Love’ trata de atreverse a enamorarse otra vez, aunque duela, aunque no salga bien. Intentarlo, disfrutarlo mientras dure, y no arrepentirse.

¿Cómo suele ser el proceso cuando escribes y luego grabas en el estudio?

Muchas veces escribo canciones en mi guitarra acústica, pero últimamente estoy trabajando con productores que me encantan, como Brian Skeel (U.S.A.) o Ends 84 (Francia). Ellos arman unas bases increíbles y me inspiran a escribir temas muy rápidamente.

Me dejan guiar la dirección musical, los arreglos, la producción vocal, agregar teclados o percusión, y todos los detalles que se me van ocurriendo. Son muy pacientes y no se molestan con mi perfeccionismo, y eso para mí es muy importante.

 Eres bonaerense, ahora vemos que vives en España (Barcelona). Sin embargo más de media vida la pasaste en Londres ¿cómo te afectó y ayudó vivir tantos años allí tanto a nivel artístico como personal?

Me encantó vivir en Londres más de dos décadas, armé toda mi carrera musical allí, creé un sello discográfico con mi amigo Ariel Amejeiras (Aztec Records), y cumplí muchos sueños.

Me inspiró muchísimo y siempre tuve admiración por las grandes bandas británicas de los 80s y 90s. Todavía me siento muy cercana a esa ciudad. Pero al mismo tiempo sentía que necesitaba un cambio, anhelaba estar cerca del Mediterráneo, el calor, las palmeras y las montañas. Por eso, decidí mudarme a Barcelona hace un año. Siempre sigo a mi corazón cuando tomo decisiones importantes y estoy muy contenta con esta nueva etapa.

¿Te arrepientes de alguna cosa del pasado? ¿En qué piedra no volverías a tropezar?

A veces me arrepiento de no haberme enfocado en mi carrera solista mucho antes y tal vez di demasiado de mí para otros proyectos. Al mismo tiempo siento que tuve que vivir y aprender de todo eso para llegar a quien soy hoy.

Has trabajado, teloneado, actuado o colaborado directamente con artistas como Erasure, Robyn, Sam Sparro, NINA… ¿con cuál de ellos recuerdas haber vivido la mejor experiencia y, con qué artistas de la escena musical te gustaría hacer algo? ¿el qué?

Toqué con artistas increíbles y también fui telonera para muchos grandes de la música. Tocar con Sam Sparro en Glastonbury (cuando Amy Winehouse encabezó el festival), o en Top of the Pops (cuando Adele y Coldplay también tocaron), son memorias que nunca voy a olvidar.

Me encantaría hacer un dueto con Robyn algún día, por ejemplo. Es una mujer con mucha energía y una artista a la que admiro muchísimo, además, tiene su propio sello discográfico. Su música me inspiró mucho en la búsqueda de mi sonido.

Hemos visto que justo acabas de anunciar fecha de directo en Argentina. Debes estar muy feliz de volver a pisar un escenario ¿desde cuándo no lo hacías? ¿Un solo show… pero te quedarás un tiempo por tu tierra natal?

Me quedaré en Buenos Aires hasta fin de año para pasar tiempo con mi familia y amigos que no veía hace tiempo, debido a la pandemia.

Lo del show surgió de manera espontánea. ¡Todavía no lo puedo creer! Estoy muy contenta y un poco nerviosa al mismo tiempo. El 14 de noviembre tocaré mi primer show en vivo en Buenos Aires (Palermo), presentando temas de mi primer y segundo álbum.

Va a estar lleno de amigos, familiares y fans; va a ser una noche muy especial para mí. Hace dos años que no piso un escenario, desde mi último show como baterista. Esta vez vuelvo al escenario como LAU, a cantar mis propias canciones. En el lugar donde todo comenzó.