Estoy encerrado en una cabina de grabación, todo parece desaparecer mientras pego mi oído al audífono del celular y escucho al vocalista y líder de Cage The Elephant, Matt Shultz, hablando sobre la luz que se puede encontrar dentro de sentimientos como la tristeza y el abandono.
Entre suspiros, el cantante agradece que lo haya escuchado y se alivia cuando le menciono que he disfrutado mucho de sus canciones. –Muchas gracias, significa mucho… en serio-, se despide. La carga emocional a mí alrededor se va con él, pero también el magnetismo de alguien que habla con sinceridad e inteligencia respecto a varios de los temas más incómodos, pero fundamentalmente humanos, del mundo.
Cage The Elephant no es una agrupación que sobresalga por el talento técnico que tienen sus integrantes sobre sus instrumentos. No es un proyecto que apantalle con técnicas de producción innovadoras, ni con la originalidad de su sonoridad. La conexión que la convirtió en la banda de rock más seguida de la actualidad deviene de la honestidad de sus letras y del talento que tienen para narrar historias tristes que terminan por vertir esperanza en quienes las escuchan.
Del hombre a punto de morir que declara que incluso en los días nublados mantuvo su mirada fija sobre el Sol de ‘Shake Me Down’ a la carta de apoyo de ‘Cigarette Daydreams’, en la cual el protagonista le dice a su interés romántico que no puede encontrar paz mental buscando respuestas en su pasado, Matt Shultz siempre se ha distinguido por ser un hombre con una pluma que no teme dejar marcas de su fragilidad, el miedo a la muerte y el paso del tiempo.
Sus sentimientos no han cambiado desde que su reconocimiento llegó a lo más alto de la industria gracias a su álbum pasado, Tell Me I’m Pretty (2015), por el cual ganó el Grammy al Mejor Álbum de Rock y llegó a ser headliner en festivales como Coachella. Por el contrario, sólo se han intensificado. Al igual que sus canciones.
Tras sufrir de un divorcio doloroso, el vocalista se encerró en su cuarto durante varios meses, encontrando un escape a su depresión en un programa de entrevistas con asesinos seriales. Fascinado ante lo mucho que encontró por amar en aquellas personas que en papel no pueden ser amadas, decidió trasformar su tristeza en luz para componer Social Cues (2019), un álbum conceptual en el cual toma el papel de varios personajes para hablar sobre la pérdida del amor y la aceptación propia.
He leído que creaste un personaje para hacer de este álbum un disco conceptual. Me gustaría saber si pudieras describir a este personaje, ¿cómo lo describirías?
Yo diría que es una serie de personajes. Creo que es importante crear un enfoque principal, crear un vehículo para contar una historia y aferrarse a él para no perderte en la pretensión de sonar poético por la poesía en sí misma. Creo que la vida en sí misma puede ser muy poética y creo que si tratas de encontrar tu vehículo en un personaje para explorar muchas cosas, todo saldrá naturalmente.
Siento que cuando compuse este álbum, había muchas notas de sentimientos de culpa, redención, pena y sanación. Es interesante porque es triste, pero también se disfruta ¿cierto? Así que había una tristeza brillante que estaba presente mientras intentaba encontrar mis personajes para hablar de este tema.
Lo que me llena es la honestidad y la encontré en los criminales. Me sentí muy identificado con ellos, veía documentales con entrevistas con gente que había cometido crímenes terribles y encontré que me podía identificar mucho respecto a lo que decían. Sobre todo, cuando sentía que mi consciencia estaba siendo arrastrada por la culpa
Se tuvieron que tomar decisiones, y yo sentí que era interesante no solo que pudiera relacionarme con alguien que ha cometido un asesinato, pero también que encontrara características de ellos que me gustaban mucho. Aun en personas que son en papel imposibles de amar, hay cosas en común y creo que es muy interesante que la gente esté constantemente curándose a lo largo de sus vidas para presentarse como seres que pueden ser amados, o lo que sea.
La realidad es que adentro nos sentimos como monstruos y sentimos esta culpa pesada que nos arrastra en las ficciones que son nuestras vidas. Ocultamos algo y alguien lo descubrirá en algún momento. Creí que sería interesante visitar ese lugar dentro de la narrativa.
¿Crees que muestras empatía con estos asesinos en tus canciones?
Creo que no sólo muestro empatía por los asesinos o criminales, si no también por sus sentimientos de culpa en general. Absolutamente, hay mucho de ello en las canciones.
¿Conoces el escrito de la sombra de Carl Jung, en el cual explica que un chico sólo se convierte en hombre una vez que toma el coraje para enfrentarse a su lado más obscuro, su sombra?
Suena a que es algo correcto. La fuerza sólo puede encontrarse en las grandes debilidades.
¿Crees que has crecido como persona y como músico al lidiar con este lado y sentimientos en el álbum?
Sí, por supuesto. Además, creo que el haber sentido todos estos elementos me ha hecho mucho bien. En verdad amo la frase de la tristeza brillante. Creo que todos cargamos con eso. Creo que llamar a algo sólo ‘obscuro’ es no reconocer su disfrute y que llamar algo solo ‘feliz’ es no reconocer toda la humildad que deviene del duelo profundo. Ambas son importantes, tienen que estar juntas y tienen que vivir como hermanos. Además, todas las notas en el medio también son importantes.
Leí una entrevista con tu hermano, el guitarrista Brad Shultz, en la cual dice que querían que este álbum fuera un disco de terror, como si fuera una experiencia cinemática. Creo que esto podrían traducirlo a conciertos performáticos. ¿Tienen algo en mente para esto?
Creo que todos estos personajes tienen personalidades muy distintas. Las sombras o las formas de su personalidad han empezado a ser muy familiares en mí, así que me puedo imaginar que algunos de ellos pueden salir al escenario en este punto de mi vida.
Puedes llamarme loco, pero en este punto sólo estoy dejando que las cosas pasen, así que sí, diría que definitivamente van a ser parte del performance.
Es complicado tener que darle voz a personas que son muy distintas entre ellas y tú tuviste que lidiar con todos estos personajes al mismo tiempo.
Humm, sí. Creo que algunos de ellos son fáciles de manejar y algunos otros pueden causar mucha destrucción. Todos ellos existen en el mismo espacio, tienen diferentes niveles de aceptación y un distinto humor sobre el sí mismo. Así que creo que presentan reacciones muy distintas a ciertas circunstancias.
Tienen distintos patrones de conducta por lo que pueden a la vez interpretar a otros personajes en sí mismos que tienen características distintas. Es algo bastante cool.
Desde tu punto de vista. ¿Cuál crees que sea la canción más obscura de este álbum y por qué?
No diría que son obscuras porque realmente no las percibo como algo obscuro, algo a temer. Las percibo como algo en extremo brillante, con una luz muy poderosa. Creo que las cosas que son honestas se pueden sentir pesadas porque generalmente son asuntos a los cuales no queremos confrontar. Esa pesadez es fácilmente malinterpretada como obscuridad.
Una de las canciones que fue muy real para mí fue ‘Goodbye’, la cual fue muy honesta y cruda. También ‘Love’s The Only Way’. Esas dos definitivamente fueron muy sinceras.