Ciudad de Origen: Tijuana, México
Año de Fundación: 2013
Miembros: Luis Aguilar, L.E. Ros, Armando Aguila, Miguel Ahuage y Andrea Martínez
Hay viajes que pueden ser físicos a otros países o estados, otros que refieren a la resolución de conflictos personales; viajes relacionados a lo que te hace sentir e imaginar alguna droga o a las emociones que un disco te puede generar, mientras estás solo, debajo de las cobijas en una noche fría. Hay viajes de todo y para todos que siempre terminan cambiándonos por completo. Bien lo decía Joseph Campbell “hablar de viajes es hablar de la vida misma”
Luis Aguilar y Andrea Martínez han estado abordo de un viaje llamado Vaya Futuro desde hace poco más de 4 años cuando, dentro del garaje de los padres de Luis, se reunían constantemente para jamear y armar rolitas shoegaze. El resultado fue una colección de 10 canciones de un pop melódico ocultas bajo grandes cantidades de guitarras con reverb, las cuales se terminarían convirtiendo en su primer disco de estudio Ideas a Medias.
“Creo que primero imitas a tus ídolos, es como aprendes. Es muy curioso porque muchas bandas inician sonando muy distinto a como terminan y nosotros queríamos sonar a My Bloody Valentine. Yo en mi mente tenía la idea de ser Kevin Shields o Thurston Moore, pero no se puede ser alguien que no eres. Siempre está bien tomar influencias, pero sí hace falta que las banda encuentren su sonido propio… nosotros estamos más cerca que nunca”-. Es lo que me dice Luis dentro de su restaurante favorito, es de comida japonesa.
“No soy muy fan del anime, me gustan más las películas de Miyasaki y ondas tipo Akira o Paprika… soy muy fan de Evangelion y obvio de Dragon Ball, que todos veíamos de niños”
Desde el lanzamiento de aquel disco Vaya Futuro creció mucho; llegando a tourear por todo el país, y también en el extranjero, con una recepción muy cálida. Al poco tiempo se hicieron de uno de los nombres más relevantes dentro de la música independiente de nuestro país, lo cual los obligó a tomar el viaje de vivir en la CDMX sin importar dejar a sus respectivas carreras a medias, a su familia atrás, o a uno que otro integrante atascado en Tijuana.
“Estudiaba psicología en Baja California. Me salí y no me arrepiento para nada, siempre hay que jugársela. Hubo mucha atención a la banda y decidimos venir debido a la centralización que hay en el país. Es mucho más sencillo estár acá por la gente, los medios y las compañías”-. Dice mientras recuerda que no sería posible la próxima gira de Vaya Futuro, patrocinada por Indio, si no hubiera venido a la CDMX a vivir un tiempo en el Hotel Virreyes del centro de la ciudad y a establecerse ahora dentro de su departamento.
Su segundo disco Perro Verde y Triste fue un hit dentro de la industria. Su sonido, ahora con menos experimentos relacionados a los efectos de guitarra y a métodos de producción como ‘the wall of sound’, se transformó en un pop melódico lindo y complejo en sus escalas que, en sus mejores momentos, recuerda a agrupaciones de post-britpop como Snow Patrol o Travis y que en sus fragmentos más pausados crea momentos atmosféricos dignos de cualquier gran banda de post-rock.
La recepción fue tal para Vaya Futuro, que tengo conocidos estadounidenses que, sin saber nada del under nacional, ovacionan a la agrupación. Seguro por lo mismo se decidió por tourear en algunos estados del país del norte en aquella época.
“El Perro Verde y Triste era yo. Verde por inmaduro, Perro porque mi papá siempre me dijo así por cariño y Triste por la violencia de Tijuana. El disco fue una perspectiva personal sutil respecto a mi depresión y a la ansiedad post-traumática que viví ahí de joven, como a los 16 o 17 años. Al final hice el disco como la resolución de toda esa carga”
El disco salió a la venta en el transcurso por el cual empezaron a mudarse a la Ciudad de México. “Tenía que hacer un disco así, acababa de superar una depresión y fue como para cerrar un ciclo. Ya no estaba triste y por fin supe que hacer con mi vida”.
Y es más que obvio que Luis ha decidido bien. Vaya Futuro desde entonces ha tenido la posibilidad de tocar en los festivales más grandes del país, de firmar con disqueras internacionales y de irse a grabar a Islandia, en lo que él describe como el mejor viaje de su vida.
“Ahí grabamos ‘Congelar’. Se sintió todo como muy alienígena; es como otro planeta todo el panorama islandés, es demasiado ajeno a lo que has visto antes. Recuerdo que la primera noche que dormí en Islandia, estaba viendo al techo. Fui a una ventana y vi cómo se movía el viento a través de los árboles. Era de película”
Su último sencillo ‘Tips para ir de Viaje’, lanzado hace tan sólo un par de días, habla respecto a un viaje… un viaje que será descrito a lo largo de 13 canciones dentro de su próximo disco de estudio. Las melodías son más texturizadas y melódicas que las presentadas en los dos discos pasados, remitiendo más a The Beach Boys y a The Kinks que al shoegaze.
“Es un viaje sonoro y de temática. Habla de una persona que se muda a otro país que trata de explicar que la vida es un viaje. También tiene segmentos muy ‘Odisea Espacial’, habla sobre la violencia y la realidad mexicana”