En un mundo cada vez más electrónico, en donde la propia música pop da muestras de relegar a cualquier instrumento (o voz) orgánico como algo del pasado; los artistas que mantienen su visión en lo natural empiezan a ser no solo excepcionales, sino también necesarios.
Es sencillo mostrarse encariñado en las nuevas melodías con vocales robotizadas, adornadas por una cantidad incontable de beats agresivos, que se presentan en todos los géneros musicales que se producen en la actualidad; pero, cuando trates de encontrar la calma y alejarte del ruido de la modernidad, álbumes como Tomb (2019) de Angelo De Augustine se convierten en un método sin comparación para entrar en contacto con tu yo natural.
Un artista que apuesta no solo por la intimidad de sus historias, letras sinceras sobre decepciones amorosas y su vida familiar; pero, también, por la intimidad de su propia música. Solo él, grabado en un espacio cerrado, acompañado por su guitarra acústica y un piano, haciendo maravillas con ellos.
Es fácil ver por qué el cantautor Sufjan Stevens decidió hacerle un dentro de su propio sello discográfico Asthmatic Kitty Records para lanza tanto Swim Inside The Moon (2017), como Tomb (2019), dos intimistas del folk que van totalmente de la mano con la visión del creador de Come On Feel The Illinoise (2005). De ahí que ambos hayan colaborado en A Begginers Mind (2021), el álbum que convierte a un montón de películas clase-b en la base para un debraye filosófico muy interesante, uno de los materiales más aclamados del año y la introducción a Angelo a un público cada vez mayor.
Es por esta introducción que hemos decidido dar un pequeño empujón a aquella curiosidad que hay por adentrarse a su obra con estas 10 canciones, imprescindibles de su corta, aunque muy interesante, discografía.
Parte de la serie de videos en vivo Santa Clarita Diet, esta fue la primera introducción de muchos a la magia de Angelo De Augustine. Una balada de guitarra y piano que además se convirtió en su primera colaboración con Sufjan Stevens.
El sencillo que le otorgó su nombre al tercer álbum de estudio de Angelo De Augustine es una pieza introspectiva que avanza entre arpegios de guitarra y dulces rasgeos que acompañan a la narración, dolorosa, de un amor perdido.
El último lanzamiento de la época de Tomb, en la cual se enfocó en hacer un retrato melancólico de la vida familiar que tuvo durante su infancia, sus primeros amores y el por qué es importante mirar atrás, cerró con esta bella canción que le da una mirada optimista a su propio futuro.
El sencillo principal de A Beginners Mind (2021) esta canción entrelaza las voces de Sufjan Stevens y Angelo De Augustine a la perfección con este homenaje a una de las historias más extravagantes que hayan llegado a la gran pantalla, la de la secuela ochentera del Mago de Oz.
El sencillo promocional de su primer álbum en Ashtmatic Kitty titulado Swim Inside the Moon (2017) es una dulce grabación lo-fi realizada solo con un par de guitarras y la voz de Angelo, describiendo una serie de imágenes pacíficas.