#QueridoWARP: Las experiencias de KESMAR sobre Always Chasing Rainbows y su equipo de antaño

// Por: Oscar Adame

lun 15 mayo, 2023

El artista australiano KESMAR se ha consolidado como una nueva y excitante voz en la música pop moderna con 2 EPs y varios sencillos. Ahora es momento de presentar su primer LP titulado Always Chasing Rainbows (2023), grabado en su totalidad en su estudio casero de forma análoga pues se ha obsesionado con el equipo de audio vintage y las técnicas de décadas anteriores.

La mente detrás de este proyecto es Nathan Hawes, quien hace todo bajo la filosofía DIY, grabando todas sus canciones en cinta y siendo él mismo su productor. “En una época en que la música puede sonar tan perfecta, yo quería que todo sonara tan imperfecto como pudiese”, menciona.

Por esto y más es que ha decidido mandarnos una carta narrando lo sucedido, con un enfoque especial en su equipo de grabación de antaño. Una exclusiva de WARP que escribió con el corazón en la mano.

QueridoWARP:

Hola, me llamo Nathan y hago música como Kesmar, produzco, escribo y me encargo de la ingeniería de toda mi música. Soy de una pequeña ciudad costera a una hora y media de Sídney, Australia. 

Mi acercamiento a hacer música ha sido un proceso en constante evolución, crecí en una era digital, bueno, en realidad primero tocando música folk, aprendiendo a elaborar una canción solo con mi voz y una guitarra acústica y luego compré una laptop y la aplicación de garage band. Después de aprender lo básico, pronto me di cuenta de que quería impulsar mi creatividad, quería aprender a producir y tocar una canción de principio a fin.

Producir música en la laptop fue la primera opción obvia, pero después de muchos años de cortar sonidos y manipularlos digitalmente, me aburrí y busqué un sonido con un enfoque mucho más orgánico. Me compré una grabadora Tascam (TSR8) 1/2 de 8 pistas que ni siquiera funcionaba jaja, después de muchos meses de prueba y error la arreglé y me lancé a mi nueva aventura. 

Esto alimentó mi amor por los equipos analógicos, siempre había tenido viejos sintetizadores, pero realmente era muy nuevo en las máquinas de cinta. Rápidamente descubrí la dura realidad de grabar en cinta, tienes que comprometerte con el sonido, no hay vuelta atrás, pero me encantó. Casi todo lo que se graba hoy en día se hace con la idea de “arreglarlo después” o “mezclarlo”. Estaba harto de ese enfoque, quería algo real y tangible. 

Pasaron uno o dos años y me hice con un equipo de 16 pistas, un Fender Rhodes, una consola Yamaha M1516, algunos equipos externos, una vieja Ludwig de los 70 y otras piezas aquí y allá. Cuando grabé este disco, Always Chasing Rainbows (2023), empecé con un planteamiento increíblemente sencillo: maquetas de 8 pistas. Si no conseguía que una canción sonara bien con batería, bajo, guitarra, piano y mi voz, no me dedicaba a ello. 

Creo que hacer un disco en solitario ayuda a poner en práctica estrategias, de lo contrario es muy fácil quedar atrapado en un bucle de simplemente divagar para siempre, veo la máquina de cinta como una segunda persona en el estudio que me hace escribir toda la canción y me hace tocar mis instrumentos de adelante hacia atrás. 

Espero que este disco pueda darte alegrías, aprendí mucho haciéndolo, ¡estoy muy emocionado por compartir más!