Playa de Placeres
Cuando uno caminaba hasta hace muy poco por las calles de Playa del Carmen, sin importar si era en el clímax del springbreak o en el punto más álgido del BPM, o en cualquier tarde de verano, se respiraba en el aire una sensación maravillosa de libertad y comunidad alrededor del disfrute.
El disfrute del maravilloso Mar Caribe que enmarca TODO en una atmosfera de paz y delicia, el placer de la gente que, paseando a sus perros, dando el rol en bicicletas o caminando en traje de baño por la Quinta Avenida con una cerveza bien fría en la mano para turistear, se apropiaban del espacio de una manera tan natural que fascinaba y muchas otras sensaciones, que hacían de este viaje a la ciudad más grande y cosmopolita de la Riviera Maya una travesía más que especial.
Pero eso era apenas el comienzo… al caer la noche Playa se transformaba en un universo irreal de fiesta, diversión, convivencia y música, donde todos salían a las calles transformados en seres ansiosos de nuevas experiencias que llenaban los bares, restaurantes y clubes de locura total.
Conforme la noche moría y la madrugada se hacía más y más poderosa, toda Playa del Carmen era incendiada por el baile, la fiesta y los sonidos más intensos que devoraban las conciencias y los cuerpos… inevitablemente.
Mar de Locura
Y si uno se adentraba en el mar de gente que inundaba la Quinta Avenida, el lugar de todos los encuentros y las fantasías en Playa, al dar vuelta en la Calle 10 podíamos toparnos con La Santanera, un lugar increíble, desconcertante y sorprendente, que de inmediato atrapaba la atención de todos los que pasaban frente a su fachada por lo único e interesante de su propuesta. “Un ambiente ecléctico-lofi-retro-tropical-mexicano” describirían los que conocieron el lugar.
Si bien el club no tenía la parafernalia visual de aparatosos letreros luminosos que otros antros usaban como gancho para atrapar clientes como el Cocobongo o Mandala, tampoco la necesitaba, pues no había persona en la ciudad que no conociera la mítica Santanera. Era un lugar que de boca en boca (o más bien de boca a oído), tenía toda la publicidad que requería.
Lo que si poseía y presumía era un concepto único: un primer nivel con un restaurante bar de estupenda calidad y dos niveles superiores con una ambientación, mobiliario, diseño y estilo completamente diferentes.
En cada uno de los pisos se podía disfrutar de DJ´s nacionales o internacionales y música en vivo en los más diversos ámbitos sonoros, degustar platillos con sabores diversos o deleitarse con los drinks más originales y ricos de todo Playa.
Muchas noches alucinantes se vivieron al interior de éste club fundado en diciembre del año 2003, que vio pasar por sus escenarios a artistas de gran calibre en los más diversos estilos musicales y conceptuales.
Huracán de Ausencia
Luego de los eventos acaecidos en las últimas semanas en esa ciudad y en toda la Riviera, comenzando con el impactante derroche de violencia y muertos acontecido en el también legendario Blue Parrot, la realidad acaba por demostrar su rostro más duro y el miedo y la inseguridad han logrado aniquilar, casi en su totalidad, la esencia de éste lugar inolvidable que hasta hace muy poco era una de las joyas en la corona de la vida nocturna en Playa del Carmen.
Consecuencia de ello, hoy La Santanera cierra sus puertas y aquellos que llevaron el timón de este lugar de culto en Playa nos comparten un comunicado de despedida al que no se puede agregar mucho más.
COMUNICADO
La Santanera se Despide de Playa del Carmen
En los 13 años que han pasado desde que abrió La Santanera en Playa del Carmen, tuvimos la enorme fortuna de ver y vivir los mejores momentos y las mas increíbles experiencias que pudimos haber imaginado. Nos toco ser parte de un momento único e irrepetible que se dio en Playa y de crear vínculos con tantas personas que pasaron por nuestro lugar, a las cuales las llegamos a considerar parte de nuestra familia.
Al final de estos últimos años, también hemos vivido muy de cerca como poco a poco se ha ido desvaneciendo la esencia que nos une a esta familia así como el deterioro en el ambiente de lo que consideramos nuestra casa y de la ciudad que tanto nos ha dado. Nos dio muchísimo dolor ver lo que paso a nuestro amigos de BPM y nos parte el corazón tener que aceptar que esta es la realidad con la que nos tenemos que enfrentar día a día. Bajo esta situación, hemos tomado la decisión de cerrar de manera definitiva La Santanera.
Ha sido una decisión muy difícil y dolorosa por todo el amor que le tenemos a nuestro proyecto y por todo el equipo que vive y depende de nuestra operación.
Sabemos que existe la posibilidad en la que se pueda regresar a la armonía y en la que todos los que amamos y vivimos de este pueblo podamos convivir en un ambiente de paz. Esperamos que todas las partes involucradas en esta situación tan conflictiva puedan lograr una visión de largo plazo y entender que estamos todos en el mismo barco. Y si el barco se hunde, nos hundimos todos.
Cerramos después de 13 años con mil veces mas buenos recuerdos y bellas experiencias y terminamos un ciclo con el cual esperamos se abran otros mas. Abrimos por ultima vez este fin de semana, en donde esperamos poder ver a todos los que fueron parte de nuestra historia y darle a la santa una gran despedida.
¡Hierba Mala Nunca Muere!
Voces de Adiós
Así se termina una era, una era de encanto, de fiesta, de convivencia, de amigos, de amores, de encuentros y placeres, de cuerpos danzando al compás de un beat que los unía a todos a través del poderoso cordón de la música y la alegría… en su máxima expresión.
Además de los pocos afortunados que estarán éste próximo fin en la última noche de la Santanera, muchos de los que ahí se presentaron e hicieron suya la noche en Playa han expresado su dolor por ésta irreparable pérdida para la cultura, la vida y la identidad de Playa del Carmen y al final… de todo lo que nos hace ser México.
Lunas del Futuro
Hoy en la Calle 10 de Playa del Carmen quedará simplemente un inmueble, un edificio de tres pisos que, sin embargo, con su sola presencia nos traerá recuerdos y memorias de las risas compartidas, de las fiestas disfrutadas, de las horas y horas de baile hasta el amanecer, de los abrazos y los besos dados, de los tremendos tracks y DJ sets que sonaron en el aire de La Santanera y que desde ahí esparcían su energía positiva y su buena vibra a toda la Riviera Maya.
Para que la Santanera regresara el mundo tendría que cambiar y Playa en particular, pero todo México en general, tendría que evolucionar hacia una calidad de vida, paz y amor y una realidad de grata convivencia sin violencia, ni corrupción… que tristemente se ve muy pero muy lejana.
Así, en las lunas del futuro cuando caminemos por Playa del Carmen, recordaremos esos luminosos días cuando, abrazados y enfiestados decidíamos caerle a La Santanera, para terminar la noche entre amigos y ver el amanecer… bailando sobre el mar.
In memoriam: La Santanera.
ACTUALIZACIÓN:
Dentro del comunicado de prensa que compartió La Santanera el martes, 31 de enero, se dijo que este fin de semana (2, 3 y 4 de febrero) sería la despedida pero hace unos momentos se acaba de cancelar: