Creo que hablo por todos los seguidores de MF DOOM de mi generación cuando digo que nuestro primer acercamiento fue a través de la máscara. Aquella portada icónica, la de Madvillainy (2004) que se repite en cada lista de los mejores álbumes de la historia que puedas leer en la Internet es tan atrayente como el hecho de que siempre se le nombre en aquellas listas.
La mirada, sombría, escondida detrás de las sombras de la máscara. El contraste visual de la imagen, entre los brillos del reflejo de las luces en la pieza de aluminio retomada de la película El Gladiador (2000) y la piel obscurecida de Daniel Dumile, casi invisible. El icono, la máscara, por encima de todo; colocada en un recuadro, en un primer plano que recuerda, sí, a las tiras cómicas que leíamos de niños.
Contrario al resto de los MC’s que reinaron en el mercado a finales de la década de los 90, MF DOOM no estaba interesado en interpretar un papel gangsteril tradicional. Alejado de las drogas, la lucha contra la ley y la violencia -realista- de los raperos del East o del West Coast, Dumile tuvo una mejor idea: Burlarse de la narrativa que rodeó al género por años y llevarla al límite. ¿Qué puede ser más antagónico que un super-villano?
Inspirado en el gran Victor von Doom de los Cuatro Fantásticos, el artista decidió interpretar a un personaje mucho más interesante. En lugar de tirarle al rapero del momento, se decidió a describir mundos de una profundidad incomparable dentro de la música popular. Situaciones extravagantes que siempre tuvieron en su centro a este super-villano, el cogedor de abuelas, aquel que gusta de los Cheetos, Doritos y Fritos que puede describir su amor por los ‘Hoe Cakes’ en cuatrocientas palabras distintas.
Sus descripciones son más que versos de canciones de rap. Su fraseo era más cercano al de una poeta y su talento narrativo no tiene comparación en el mundo del hip-hop. La forma en cómo utilizó sampleos de frases dichas en caricaturas para profundizar en sus historias otorgó varios de los momentos más creativos en la historia de la música popular. “Cuando rapeo, normalmente me refiero a DOOM en tercera persona. Otros MC’s están obsesionados con el machismo; yo estoy obsesionado con Star Trek y Logan’s Run“, declaró para The New Yorker.
La máscara “nació de una necesidad”. Se dice que la empezó a usar porque se acordaba de su hermano fallecido, aquel con quien inició su carrera musical en el grupo KMD, cada vez que se veía la cara. También es conocido el hecho de que era una persona tímida que probablemente la usó para enfrentarse a algún miedo relacionado a su acto en vivo. Sin embargo, el objeto ha tomado un significado mucho mayor y MF DOOM la utilizó para desarrollar un planteamiento artístico muy interesante con respecto al papel de la -persona pública- dentro de la música.
Famoso por cobrar conciertos para miles de personas como propios en los cuales enviaba a impostores con su máscara, DOOM declaró a Red Bull Music Academy que “no importa cómo se ve el artista, yo no quiero vender el producto como si fuera un ser humano, todo es sobre la música. No me importa la fama, eso es una consecuencia, me importa el mensaje de lo que se dice”, planteó dentro de la entrevista. “Sigue siendo entretenido, lo que hago, es fotografiable, tiene teatro, pero el mensaje está ahí: el villano representa a cualquiera, cualquiera que use la máscara se transforma en él, hombre, mujer, de cualquier raza, con la máscara puedes decir lo que quieras”, agregó.
Es por ello que puede o no presentarse dentro de sus propios conciertos. “La gente no debería de pagar para ver a un artista, eso no tiene sentido. La gente debería de ir a un evento solo por el arte”, afirmó previo a agregar que “yo soy el director, el escritor y el hombre que plantea todo lo que sucede en un evento. ¿Entonces qué importa quién esté ahí parado utilizando la máscara? Tal vez la próxima vez debería de mandarles a un hombre blanco. Quienquiera que interpreta al personaje, es el personaje… la próxima les mandaré a The Blue Man Group”.
Aunque Daniele Dumile falleció el pasado 30 de octubre, su creación, el villano MF DOOM, seguirá vivo. Sí, perdimos a un talento único como intérprete, narrador y productor musical. Una persona que creó rimas que han influenciado tanto al mundo del hip-hop que hoy no se podría entender a la música popular sin él. Pero, su música nunca tuvo que ver sobre la -persona-, nunca trató sobre él, ni lo reflejó. Su música tiene que ver con su propio mundo y con su personaje enmascarado. Todos sus seguidores seguiremos usando la máscara en su honor y quien sabe… en una de esas hasta continúan los conciertos.