Lugar de Origen de El Último Vecino: Barcelona, España
Año de Fundación: 2010
Miembros: Gerard Alegre Dòria
“Creo que dejarse reinar por la nostalgia no está bien porque no puedes vivir del pasado. Curiosamente, hace unas pocas semanas, me escribió un chico, un fan del grupo, que había estado leyendo sobre la nostalgia y en el Siglo. XVII se creía que era una enfermedad. Luego, a mediados del Siglo. XX hubo una parte de los psicólogos y psiquiatras que aseguraron que la nostalgia era un sentimiento muy importante a la hora de ser feliz; decían que la gente nostálgica era más feliz que la gente que no era nostálgica“.
Ese es un recuerdo de Gerard Alegre Dòria, cantautor español que ha ganado un seguimiento a pulso en todo el mundo hispano gracias a sus divertidas y sencillas composiciones de pop electrónico. Una colección de sonidos ochenteros con líneas directas, emotivas y repletas de toques irónicos.
“Creo que sí soy nostálgico porque, si no, estaría haciendo punk súper presente. En su lugar, estoy haciendo un pop súper melancólico”, me declaró en exclusiva desde el otro lado de la pantalla, sentado en el centro de su departamento, acompañado de su novia y en resguardo dentro del peor momento de la cuarentena que se haya vivido en Barcelona.
Su pluma es una que logra profundizar en los detalles de la vida que, aunque cercanos, normalmente no tomamos en cuenta y los adopta, otorgándoles una gran personalidad. Sus instrumentales son pegajosos, repletos de ganchos tiernos que atrapan con sus colores vibrantes. “A nivel de bajos, de sintetizadores o cajas. Son los elementos más simbólicos o característicos del beat del pop”, afirmó. Sin embargo, ahora mismo está en un proceso consciente de adaptación y evolución para con sus nuevos intereses.
“Cada vez intento actualizarme un poco más, pero sí que es verdad que estoy enamorado de ciertos sonidos que, no soy consciente de dónde los he escuchado, pero que me suenan de maravilla y da la casualidad que son de la época de finales de los ochenta”, declaró, al mismo tiempo que afirmó que su interés deriva de una nostalgia por su infancia. “Yo creo que no son grupos, las influencias son los sonidos que definieron a una época en la cual no escuchaba música por interés propio, pero sí que estaban alrededor de mí. Cuando cogía el coche de mis padres, estaba; en la radio, en casa, estaba”.
“Hace unos años, cuando me hacían entrevistas, decía que empecé a enamorarme de la música por The Smiths, Joy Division o New Order, pero realmente antes de fijarme en todo esto, a los 13 o 14 años, salía a bares musicales por Barcelona y sonaba Eurodance”, declaró, emocionado. “No le puse una barrera, pero por años me fijé únicamente en el synth-pop y ahora estoy contento de abrir la puerta a esa parte de mí. Me siento cómodo porque sé que no hay ninguna puerta cerrada dentro de mí”.
“Un reencuentro con algo que amas mucho, siempre es muy bonito. Te entran ganas de hacer cosas nuevas y todo esto”, agregó sobre su sencillo titulado, de forma brillante, ‘Nostalgia’.
Tras el estreno de aquella canción, el 13 de enero nos volvió a sorprender con ‘Que Caro’, una canción que se deshizo de todo lo arquetípico de El Último Vecino para integrar elementos con influencia en el pop-rock de principios de los años dos mil, citando a Spice Girls, Britney Spears y Avril Lavigne.
“Yo a Avril Lavigne nunca la había escuchado, solo los singles en la radio. Pero, ahora que vivo con mi novia que es un poco más joven y la recuerda mucho más, escucho lo que pone y le digo –cariño, ¿qué es eso que estamos escuchando? Me gusta mucho- y ella dice –es Avril Lavigne, ¿cómo no la conoces? – Así que así la he estado escuchando”, declaró, mientras recordaba que no le prestó mucha atención a esta intérpretes durante sus años cumbres de popularidad.
Él afirmó que el acercarse a estas canciones “me ha llegado de forma muy emotiva, me gusta mucho y tengo ganas de regresar a ser DJ y pinchar sus canciones, tengo muchas ganas de hacer cosas parecidas. Quiero hacer una boy-band, algo así me encantaría”. Sin embargo, perdió la emoción en su respuesta cuando recordó que “me ha pillado en un momento en el cual todos estamos en cuarentena y no podemos salir. Todos los flashbacks que me han dado estas canciones son de fiesta y me han dado muchas ganas de que toda esta situación termine de una vez por todas y podamos salir a bailar con amigos de inmediato”.
La cuarentena “está siendo una puta mierda, no tengo otras palabras. Es muy fuerte, a mí justamente me está dando la bajona estos días. Soy una persona paciente; negativa, pero siempre trato de ver el lado bueno de las cosas”. Es por ello que él aprovechó para componer y producir, “pero ha llegado un punto en el que lo único que tengo ganas es de salir de fiesta y volver en ambulancia”.
Aunque me advirtió que esta podría ser una respuesta atrevida y que la gente no podría estar de acuerdo con él, señaló que “pienso que todo esto es la Madre Tierra diciendo –cuidado, cuidado conmigo- y tengo la esperanza de que el ser humano, cuando salga de esto, sea un poco más responsable, más limpio y que asuma los derechos del propio ser humano, los animales y la naturaleza en general”, afirmó. “Pero hay una parte de mí que no confía tanto en esto”, terminó por señalar.