//Foto: Napoleon Habeica
Desde que Kinky llegó a la música se dio a la tarea de crear buenas canciones. Basta con echar un vistazo a su repertorio para encontrar excelentes temas que ni por un momento creímos pudieran ser de ellos, pero que nos han acompañado desde siempre en la vida.
Kinky se creó en Monterrey, Nuevo León, un lugar que al final de los 90 exportaba música de todo tipo y que vio nacer a las bandas que hoy en día rigen las listas de popularidad. El avance en sus producciones y el crecimiento de su público fueron pieza clave para que actualmente esté consagrada como una de las bandas más influyentes de México, en el rock pop o electrónico.
Por tal motivo y con la promesa de un nuevo material discográfico conversamos con los cinco integrantes de esta grandiosa banda, que si bien aún no termina de trabajar nos ha regalado grandes destellos de lo que se viene. «Todavía trabajamos en el álbum completo que terminaremos en febrero, por esas fechas lo lanzaremos pero antes ya tenemos algunos temas preparados. También en febrero arrancamos la gira», comenta Gil Cerezo ante mi interrogante de un nuevo disco.
Conversando acerca del tiempo que han pasado juntos y los éxitos que han marcado su carrera, el líder y vocalista nos dice: «Creo que es el mayor logro, la longevidad de la banda, no es fácil sobrevivir. Ha sido un crecimiento en conjunto, seguimos los cinco integrantes desde el día uno y todo ha sido un desarrollo, tanto en lo musical como en lo familiar, espiritual, anémico, de todo. Esta familia que somos.»
Uno de los premios que otorga el hacer música radica en formar parte de la vida del público, marcarlos en momentos especiales y acompañarlos en situaciones difíciles, algo que en repetidas ocasiones les ha pasado: «Es muy gratificante leer mensajes, porque además de decirnos que les gustan nuestras canciones nos comparten situaciones difíciles, algo en lo que nuestra música les ayudó. Es padre ver que formas parte del soundtrack de las personas, es muy bonito», comenta César Pliego, bajista de la banda.
Asimismo, Kinky ha servido de consuelo e inspiración para bandas que hoy en día luchan por su lugar en la escena, mismas que han tomado como base el ejemplo de composición y trabajo de los regiomontanos: «Siempre que marcas a alguien de alguna manera u otra es positivo, significa que tu trabajo tuvo la sensibilidad para entrar. Obviamente la música es el factor número uno y, más que influenciar musicalmente a alguien, se trata de llegar al tope de esa sensibilidad que se puede compartir», afirma Ulises Lozano.
Después de tantos años de hacer vibrar los corazones mexicanos, la creatividad musical continúa latente, los hits siguen surgiendo y día con día parecen estar más vivos. Cuando platicamos acerca del mejor regalo que la música les ha dado, César comenta: «La oportunidad de viajar y trabajar en lo tuyo a la vez es lo que me da más satisfacción».
De igual manera y con tantos viajes, Kinky ha tenido la oportunidad de presentarse a lo largo y ancho del territorio en distintos festivales, así como de colaborar con diferentes artistas.
«Una de las colaboraciones a las que le tenemos especial cariño es ‘Negro Día’, con Mala Rodríguez, una canción que sucedió a larga distancia, con una historia medio revuelta. Esto terminó en un track que fue nominado a los Grammy. Todo fue muy especial», asegura Ulises.
En cuanto a la escena mexicana, la banda señala que actualmente hay una gran diversidad musical y que ahora es más fácil darse a conocer, gracias a la tecnología. Gil declara: «Hay gente haciendo de todo, desde electrónica, mucho rock, hip hop, reggaeton, todo está creciendo de manera exponencial, así también los festivales y los conciertos en casas, la cantidad de música que se edita, disqueras independientes, tiendas de vinilos, todo es un movimiento que hemos visto crecer. Después se caen los tiranos de la industria y crece todo este submundo a un nivel superior de cuando empezamos, esos días en que todo se manejaba con base en las disqueras internacionales o CD’s físicos. Hubo un giro de 365 grados, un poquito más de la vuelta entera.»
El grupo se ha caracterizado por incorporar distintos estilos en sus canciones, llenándolas con ritmos tropicales, funk, rock, pop y de electrónica, algo que han sabido hacer desde el comienzo. «Es un taller donde estamos los cinco y de cierta manera empezamos a tirar ideas de cosas que escuchamos. Algo positivo es que cada uno escucha cosas distintas, tenemos grupos en común pero es padre escuchar cosas nuevas que otro de mis compañeros conoce. Siempre estamos abiertos a escuchar las propuestas y ver cómo se podrían fusionar con los géneros y los gustos que tenemos.»
Por último, conversamos acerca de su reciente trabajo con MTV Unplugged, una presentación que pocas bandas mexicanas (11, para ser exactas) han concretado y que tuvieron el placer de realizar. «Más allá de ser un disco en el que te puedas explayar con todas las de la ley, te debes apegar a un sonido acústico. Nuestra espina dorsal siempre ha sido la electrónica, por lo que fue reconfortante regresar a esas raíces», concluye Gil.