Danny Lux, el lado alternativo de los corridos tumbados #BandsYouNeedToKnow

// Por: Andrés Cassini

mié 13 octubre, 2021

En esta sección nos sumergimos a la mente detrás de nuestros proyectos emergentes favoritos. Sean nacionales o internacionales, los músicos nos cuentan sus razones para hacer arte. 

Lugar de origen: Estados Unidos
Año de fundación: 2020

Las nuevas caras del corrido comienzan a dislumbrarse en el horizonte, pero un horizonte cercano. Y es que el cibermundo que dio origen a este reciente subgénero ha permitido, más que el traspaso de fronteras, el alcance y conexión inmediata con miles de mentes jóvenes. ¿Por qué esta conexión tan pulcra y duradera? Bueno, este tipo de canciones tienen una hechura por y para el corazón joven, ya sea enamorado o no.

Bajo este concepto internauta del “sadboy” surge Danny Lux, un joven originario de Estados Unidos, y que se ha criado bajo los cánones de allá, pero con principios mexicanos al ser hijo de mexicanos. Gracias al poder de alcance que genera ya TikTok, Danny se dio a conocer, y de la noche a la mañana, la gente ya aclamaba por su talento.

TikTok

“Principalmente abrí mi cuenta de TikTok para hacer contenido humorístico, ha nadie le había contado que sabía tocar la guitarra, ninguna persona fuera de mi familia conocía ese dato. Ya con un par de videos subidos me di cuenta que no tenían buen recibimiento”.

Danny sabía que su talento no podía ser desperdiciado, y comenzó a grabarse tocando la guitarra, primero covers de artistas del género, con los que se fue ganando la admiración de un público que esperaba algo de su autoría: “Agarré mi guitarra y grabé un video, y te juro que ni lo vi. Solo lo posteé y seguí mi vida. Tenía miedo de que a la gente no le gustara, y además me generaba ansiedad. Sorpresivamente al día siguiente tenía 12,000 vistas y bastantes comentarios positivos”.

Esto ayudó a Danny a generar una confianza propia, un cariño por sí mismo y su trabajo, pues comenta que “para entonces me sentía desmotivado; me iba mal en la escuela y buscaba refugio en el futbol, pero llegó un punto en que ya ni siquiera iba a las prácticas. Después de este momentáneo éxito en TikTok no quise desaprovechar los ojos que ya tenía sobre mí y me dispuse a subir un video cada dos días, tocando coves de corridos que sonaban en ese momento”.

Un camino qué seguir

Gracias a este recibimiento, y al ya no tener ningún cover para tocar, Danny se motivó y comenzó a componer sus primeras canciones propias: “Quería algo que fuese únicamente mío, algo que pudiera contar y decir ‘mira, esto es lo que he logrado yo mismo’. Todo salió bien, de acuerdo al espontáneo plan que me surgió en un par de días y así fui haciendo canciones de mi autoría con mi sello y estilo personal”.

Al preguntarle a Danny cómo definía su estilo personal, el cantautor me respondió con una sencillez, pero algo de confusión: “Trató de hacer un sonido particular, sí, dirigido hacia el sad sierreño, pero también adentrándome en las baladas. Aún no encuentro la manera de describir a la perfección este sonido, ni espero encontrarlo pronto, porque esto me motiva a seguir experimentando y hacer las cosas sin necesidad de una etiqueta de cómo debo verme o sonar”.

Durante toda la plática, Danny se mostró confiado, seguro de sí, pero con algunas dudas, y es ciertamente comprensible; es un proyecto joven que apenas comienza su carrera artística y profesional no está listo para la presión mediática o los compromisos que esto supone. Sin embargo, esto mismo es lo que define el proyecto de Danny Lux y lo convierte en muy adepto para jóvenes, pues no solo habla sobre lo que sienten y piensan sus escuchas, sino que a su vez es uno de ellos, mostrando una cercanía y sinceridad de su música.

Deseos y ambiciones

Danny ha tenido la música presente desde niño, y no porque su familia le inculcase cierta corriente o afición en sí, sino que nació de manera arcáica y natural: “Mi papá trabaja en los camiones de basura, y siempre nos traía cosas a la casa, se encontraba sartenes, juguetes y mil cosas más. Un día, tenía yo como seis años, me trajo una guitarra que se encontró en la recolección, y desde entonces me interesó”.

Recientemente lanzó su álbum debut, Las Dos Caras del Amor (2021), un disco puramente imaginativo donde Danny crea todo un mundo dentro de su cabeza para contar una historia que se desenvuelve a través de ocho tracks: “Cuando grabé el disco ni siquiera estaba dolido o triste, ¿sabes? Afortunadamente todo estaba bien, pero mi imaginación siempre ha sido mi fuerte. Para estas canciones hice un par de historias en mi mente: La principal era la de una pareja, y todas las letras están cantadas en la perspectiva del hombre”.

“Ya empiezo también a rodearme de gente del gremio”, comentó Danny, quien cree que en este subgénero en particular -el corrido tumbado- existe y es sumamente importante la hermandad entre mismos simpatizantes: “Hace poco trabajé con Eslabón Armado, ves que tenemos casi la misma idea o el mismo concepto lírico, pero me gustaría generar más lazos entre otros del género como Natanael o Junior H, sé que pronto llegará, pero creo firmemente que en este mundo del corrido somos una familia, y tenemos que apoyarnos entre todos”.

El joven espera que este disco y futuros trabajos ya en gestación lo lleven a hacerse más conocido dentro de su rubro, el por qué resulta puramente cultural: “Se me haría muy bonito que en países en los que casi no suena música latina empiece a escucharse, ¿sabes? No solamente representar la cultura latina por representarlo, decir ‘somos latinos y así suena’ y ya está, sino abordar toda la cultura y llevarla a otro plano más allá de lo musical”.