Por: @M0N0T0NO
Wild Nothing forma parte de una oleada de bandas que vieron la luz alrededor del 2010, la mayoría arropadas bajo la disquera Captured Tracks, sello en donde lo acompañan bandas como Beach Fossils, DIIV, Mac DeMarco y Minks, entre otros revivalistas del C86 de NME. Estas bandas surgieron con un distintivo sonido que conjugaba elementos del indie, el dream-pop y el shoegaze para crear melodías suaves y pegajosas sobre pasajes ambientales.
Desde entonces, este proyecto del multiinstrumentalista Jack Tatum ha lanzado dos LPs y algunos EPs que han sido recibidos con críticas favorables. Ahora, Tatum regresa con su tercer esfuerzo de larga duración The Life of Pause, un disco que se aleja de sus raíces indie-rock para entrarle de lleno a un dream-pop con toques ochenteros que le otorga un aura de nostalgia a su sonido.
A lo largo de su trayectoria, Tatum no ha sido inmune al cambio. Es considerable la evolución que ha tenido el sonido de Wild Nothing para volverse cada vez más intrincado. Si las canciones que conforman Gemini y Nocturne tenían una estructura pop bastante simple, The Life of Pause trata de llevar estas composiciones a un nivel de mayor complejidad. Este cambió es especialmente notorio en su último EP, Empty State, donde ya había coqueteado con sonidos del New Wave –Tatum ha citado una marcada influencia de David Byrne en esa época- y del synth-pop.
The Life of Pause le da continuidad a esta línea y experimenta con nuevas maneras de hacer un pop bien pensado. No obstante, este álbum no representa un desarrollo sustancial dentro del catálogo de Wild Nothing. De alguna manera, Tatum ha logrado hacer que un disco lleno de texturas, en veces reminiscentes al sonido de Washed Out, pueda sonar bastante plano. La falta de profundidad es resultado del acercamiento formulaico en la composición, lo cual provoca que el disco se vuelva rápidamente predecible. Esto sin mencionar el carácter impersonal de las letras.
Aún así, The Life of Pause cuenta con varios cortes que plasman perfectamente lo que Tatum es capaz de hacer. Cortes como ‘Reichpop’, ‘Life of Pause’ y ‘TV Queen’ son finas composiciones de dream-pop que consiguen hacerte sentir como si estuvieras flotando en una nube. Otros cortes interesantes son Alien y Adore, donde Tatum experimenta con el psych y nos recuerda a lo que ha hecho Tame Impala últimamente.
A pesar de esto, The Life of Pause se antoja como un bache en la carrera de Tatum, más por sus excesos que por sus carencias. Sin duda, The Life of Pause es un disco disfrutable que nos da Wild Nothing para rato, pero también es muestra de que, a veces, menos es más.