Not Your Kind Of People

Calificación

8.6

Garbage

// Por: Diovanny Garfias

jue 7 junio, 2012

Artista: Garbage

Cuando Garbage lanzó su cuarto álbum de estudio, Bleed Like Me, en 2005, parecía que la agrupación seguiría con la evolución lógica de su sonido durante muchos años más. Error: tras promocionar la placa alrededor del mundo y lanzar el recopilatorio Absolute Garbage (2007), la cuarteta decidió ponerle una pausa indefinida a su trayectoria, volviéndose incierto su futuro: Shirley Manson se dedicó de lleno a su álbum solista —del cual sólo escuchamos algunos demos y cuyo estatus actual es “muerto y enterrado”— y aprovechó para pisar el terreno de la actuación en la serie Terminator: The Sarah Connor Chronicles; Butch Vig continuó sumando éxitos como productor; mientras Duke Erikson y Steve Marker tuvieron ocasionales encuentros con la música desde su trincheras. En 2010 se escucharon rumores acerca del posible regreso de Garbage, y poco tiempo después —para beneplácito de sus fans—, se confirmó su retorno al estudio de grabación… Básicamente esa es la historia detrás del Not Your Kind Of People, su quinto álbum de estudio, del cual hay mucho que decir.

De entrada, nos encontramos con un Garbage entrando de lleno a la era de la independencia, del Internet y de las redes sociales, tratando de entender el giro que dio la industria discográfica en los últimos cinco años y sobrellevando la situación de una manera muy digna, pues interactúan con sus seguidores, comparten su música y dejan atrás los diferentes sellos transnacionales que durante años fueron una pesadilla para su estructura. Respecto a la música, algo que salta casi de manera inmediata a los oídos es la experimentación implícita a lo largo de la placa —sobre todo en la producción—, sin que esto signifique un cambio radical en su sonido, ya que podemos decir que tras este largo descanso su esencia sigue intacta. De hecho, parece que se trata de un repaso a través de sus diferentes eras sonoras: en ‘Man On A Wire’ encontramos el espíritu rock de su disco homónimo de 1995; ‘Control’ bien podría ser un lado B de Version 2.0 (1998); ‘Felt’ encajaría sin dificultad en el Beautiful Garbage (2001); mientras que ‘The Battle In Me’ bien podría ser una extensión del Bleed Like Me. Del lado personal se siente, una vez más, la química que invadía a la banda y que desapareció tras interminables giras; es decir, una vez más los tenemos a su máxima capacidad.

El pasado de Garbage, así, lejos de ser una falla, podría terminar siendo un acierto, ya que miles de escuchas alrededor del mundo podrían conocerlos a través de este trabajo y se encontrarán con una banda que tiene una impresionante gama sonora en la espalda. La prueba de fuego vendrá con el siguiente material, en el que comprobaremos, de una vez por todas, qué tan vigente —y necesaria— es su música y su presencia en la escena tal y como es hoy.