Un día como hoy en 1960, tuvo lugar el asesinato de Patria, Minerva y María Teresa Mirabal, figuras de activismo político en la República Dominancia frente al dictador Rafael Trujillo. De las hermanas, la única sobreviviente fue Dedé, quien murió en 2014.
Una historia que se mantendría cercana a la consciencia social y que bajo el manto simbólico de iniciativas de activismo, busca enmarcar el día como recordatorio, como exigencia. El Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
En este nombramiento, la palabra clave eliminación. Instituciones como la Asamblea General de las Naciones Unidas, ven por hacer de esto un marco de acciones concretas “La necesidad urgente de la aplicación universal a las mujeres de los derechos y principios con respecto a la igualdad, seguridad, libertad, integridad y dignidad de todos los seres humanos” […] “la violencia contra la mujer es un obstáculo para el logro de la igualdad, el desarrollo y la paz” […]” la violencia contra la mujer es una manifestación de relaciones de poder históricamente desiguales entre hombres y mujeres”.
Una declaración oportuna para su momento, pero que hoy versa en jurisprudencia y cultura, para una acción realmente necesitada para atender las causas y consecuencias de día a día. No el imaginario, mucho menos la “retórica” justificada de opinión.
Cómo suele pasar con estas fechas conmemorativas, aquí aparece un tema para el 2019. El Mundo de Naranja: La igualdad de generación se opone a la violación.
“A través de palabras, acciones e inacciones; leyes discriminatorias o indulgencia hacia los perpetradores; A través de los medios que consumimos, de los chistes de los que nos reímos y de las actitudes que no cuestionamos, nos convertimos en parte de una cultura que permite que continúe la violación”.
There is no excuse for sexual violence.
There are no blurred lines when it comes to consent.
The definition is clear: https://t.co/GCfJ7IIMoV #orangetheworld #GenerationEquality pic.twitter.com/oBdpei2eeH
— UN Women (@UN_Women) November 25, 2019
Cómo parte de las exigencias, la consciencia y el activismo de 16 días frente a la violencia.
Lejos de estar terminando con una festividad, el tema es uno que encuentra ciertas oportunidades en la mediatización, institucionalización y demás formas de comunicación. No obstante la más importante sigue fundamentalmente en su comprensión y simpatizantes. Dos cosas que solo se llevan a cabo mediante acciones propiamente sociales, como lo es la legislatura.
Cómo particulares, las estrategias son claras. Definir y diferenciar para entender a que se refiere la violencia, entender la realidad que vive el género femenino, hablar de lo que vemos, denunciar la violencia, dejar de referenciar a las víctimas y apoyar a los supervivientes.
Violence against women and girls is violence against the whole humankind, and should have no place in Europe or elsewhere in the world.
We reaffirm today our commitment to prevent, reject and condemn all acts of violence against women and girls.#SayNoStopVAW #OrangeTheWorld pic.twitter.com/5hSoOztcXe
— European Commission (@EU_Commission) November 25, 2019