Desde el indie hasta el mainstream, Latinoamérica ‘festivalea’

// Por: Staff

lun 22 abril, 2013

Gabriela Márquez

Frente a la cada vez más constante aparición de festivales en América Latina sólo nos queda aplaudir. Y cada vez más fuerte.

foto por Juan Felipe Pérez para WARP

foto por Juan Felipe Pérez para WARP

Cierto: los festivales no son ninguna novedad. Para quienes nacieron en los setenta y ochenta, existen referentes imperdibles como Woodstock o Avándaro, que aunque no nos tocaron y quizá ni siquiera nuestros padres asistieron, fueron hitos importantes en la historia de la música. En la década del dos mil apareció en el horizonte Coachella y fue a donde muchos dirigimos nuestros pasos año tras año para escuchar las propuestas nuevas o vibrar junto a íconos bien posicionados dentro de la industria.

Ciertamente, un festival supone mucho más que un concierto. Es una suma de experiencias que van desde la vestimenta hasta el lugar donde se llevará a cabo pasando por las bandas, los puestos de mercancía oficial, discos y demás chucherías vendibles. Sin embargo hasta hace muy pocos años, para los latinoamericanos las únicas opciones reales para “festivalear” eran el Vive Latino en México y festivales eventuales como el Zero, Motorockr y finalmente el Capital –que ha cambiado de nombre varias veces ya- dentro de nuestro país y evidentemente la gran gama de festivales en el vecino país del norte, siendo los más populares Coachella y Lollapalooza. Para nuestros vecinos del sur las opciones estaban en Brasil (Rock in Rio), Colombia (Rock al Parque) y Argentina (Pepsi, Quilmes y Creamfields principalmente) dejando un poco desprotegidos al resto del los países de Centro y Sudamérica así como la provincia en México.

Pero en estos últimos años algo está sucediendo en América Latina. Ha comenzado una erupción de festivales de manufactura doméstica e incluso un tanto artesanal que ha logrado sobrevivir con éxito e ir creciendo edición tras edición. Resulta sumamente grato atestiguar la manera en que eventos como el Festival Verde en Panamá han logrado crecer su cartel año con año o el éxito rotundo que tuvo Estéreo Picnic en Bogotá apenas hace un par de semanas. Demos pues un vistazo a los principales movimientos musicales que se gestan desde la frontera con Estados Unidos hasta el profundo sur del continente.

México
Hellow & NRMAL

Increíble pero cierto. Monterrey, la ciudad que fue escaparate internacional de música durante la década de los noventa no tenía un festival en forma desde finales de los noventa. Pasaron muchos años de sequía con eventos aislados (como el mismo Festival Zero) pero hoy la cultura de los festivales está tomando un nuevo impulso en la ciudad.

La primera edición del Hellowfest fue en 2008, presentando un cartel que incluyó talento del calibre de Zoé, Los Amigos Invisibles, Molotov y Plastilina Mosh. En años subsecuentes fue incluyendo a bandas extranjeras como The Crocodiles, The Black Lips y The Sounds con una asistencia que si bien ha variado con los años, en promedio ha logrado convocar a cerca de siete mil personas en cada edición. Y aunque actualmente su futuro es incierto pues no se celebró el año pasado, su hermano Noise ha llegado para (quizá) ocupar su lugar.

www.hellowhellow.com

LOGO_HELLOW_A la par del Hellow nació Nrmal, otro festival más pequeño que año con año ha ido ganando adeptos primero en la Sultana y ahora de ciudades cercanas, e incluso D.F., que viajan para ver a bandas indie en acción. En 2013 Nrmal presentó a Ariel Pink’s Haunted Graffiti, Banda de Turistas, Brujería, Daniel Maloso, 60 Tigres y Las Robertas, entre muchos nombres más. En esta última edición Nrmal tuvo una asistencia oficial de 6,000 personas, cifra nada despreciable, que disfrutaron mucha música y actividades culturales al aire libre.

www.festivalnrmal.net

nrmalPanamá
Festival Verde de Cultura Musical

Uno de los mayores atributos del Verde es el lograr volverse popular en tierras eminentemente salseras o en su defecto reguetoneras. Nina Tissera, la creadora del festival ha logrado volverlo cada año más grande y con un cartel más internacional. Habiendo tenido entre sus principales invitados el año pasado a Omar Rodriguez-Lopez, Babasónicos y Hello Seahorse!, este 2013 tuvo incursiones musicales desde Chile con Astro, Colombia con Monsieur Periné y de México Café Tacvba. El Verde va posicionándose como un festival de nivel en el medio del continente brindándole aire a un público que padece la ausencia de una escena nacional sólida.

http://www.fvcmpanama.com/

LogofestivalverdeColombia
Estéreo Picnic

A finales de la década de los noventa y gran parte del dos mil combinar las palabras “Festival” y “Colombia” irremediablemente nos remitía a Rock al Parque, un mítico festival en Bogotá por donde todas las bandas latinoamericanas han pasado desde su inicio en 1995. Pero en 2010 apareció en el horizonte bogotano una nueva propuesta con una orientación distinta: Estéreo Picnic. Tras tres años un tanto turbulentos en donde el futuro del Festival estaba muy en entredicho, en 2013 se consolidó como uno de los grandes eventos musicales en Colombia. Esta última edición incluyó a New Order, The Killers, Foals, Vetusta Morla y Two Door Cinema Club, entre muchos más, logrando convocar a más de treinta mil personas en dos días. El futuro luce muy prometedor para Estéreo Picnic pues ha logrado ganarse a pulso un digno lugar.

www.festivalestereopicnic.com

logoPicnicChile
Festival Primavera Fauna

Un festival joven, hecho por jóvenes (nadie del equipo que dirige el festival tiene más de 31 años) que busca posicionarse como uno de los principales en Chile, con una identidad propia. Roberto Parra, uno de sus creadores es muy claro a pregunta expresa del objetivo del Festival: “Que sea global, pero hecho en Chile. Que sea independiente, que rescate lo mejor que hay actualmente en el mundo de la música y mezcle referentes con emergentes”. Con apenas dos años de existencia (desde 2011), Primavera Fauna tiene pasos firmes y en una dirección correcta. Simplemente en 2012 su cartel incluyó a Pulp, Dinosaur Jr., Clap Your Hands Say Yeah, Francisca Valenzuela, Little Boots y Bomba Estéreo entre más bandas latinas, norteamericanas y djs de diversas partes del mundo. Nada mal para un segundo año en el país de agrupaciones tan legendarias como Los Prisioneros o Los Tres.

www.primaverafauna.cl

LogoFaunaUruguay
Fest by Contrapedal

El primer festival “boutique” de Uruguay (y posiblemente del continente) tuvo lugar apenas del 12 al 14 de abril pasados. Contrapedal se percibe como más íntimo y con una clara orientación cultural, que integra distintas disciplinas alrededor de la música, como el diseño, el arte y la tecnología de Iberoamérica. Pero de nuevo no tiene nada, más bien un largo trayecto recorrido. Empezó hace siete años como un evento en un club con cinco bandas tocando y fue creciendo hasta volverse primero de un día, luego dos, hasta que en 2011 se hizo de tres días, con paneles, espacios artísticos, dos escenarios y un baratón, además de estar auspiciado por el gobierno de la ciudad y ser gratis. Gabriel Turielle su director, comenta que el Fest surge “de una necesidad de generar espacios que no eran abiertos en nuestro país porque es un mercado pequeño. Volverse un punto de confluencia y circulación artística”. Parte de la intención de Turielle y del festival en sí es “generar un corredor que una Santiago, Buenos Aires, Asunción, Montevideo, Porto Alegre y Sao Paulo y poder reunir a artistas que están en la región”. Con la presencia este año de talento tan diverso como Vetusta Morla desde España, Enjambre de México,  Cienfué de Panamá, Gepe de Chile y los locales Max Capote y Franny Glass, entre otros, Contrapedal va fortaleciendo su nombre año tras año.

www.festcontrapedal.com

LogoContrapedalLos festivales emergentes en América Latina parecen haber llegado para quedarse. Sin duda la globalización ha jugado un papel crucial en su aparición y permanencia. El hecho de que los jóvenes puedan escuchar mediante un click a bandas de todo el mundo facilita las cosas y el que viajen fuera de sus países a festivales en Estados Unidos o Europa principalmente también. Regresan a casa buscando replicar la experiencia de modo local pero con calidad y un cartel respetable. Por otra parte para las bandas extranjeras resulta rentable hacer un circuito por México, Centro y Sudamérica que les permita moverse de festival en festival, como fue el caso de The Killers que giró por festivales en Brasil, Argentina, Chile y Colombia para rematar en México. Es una situación ganar-ganar en donde se beneficia el empresario y también los fans con eventos apoyados por marcas transnacionales, escenarios a punto, seguridad adecuada y un auténtico ambiente de festival, empezando por el cartel. Y finalmente un factor de suma importancia es, sin duda, la derrama económica que estos eventos traen consigo. Este tipo de eventos se han convertido en una fuente de ingresos no sólo para los empresarios, sino para una serie de satélites girando alrededor. Proveedores, empleados temporales, bandas; si las cosas se hacen bien y funcionan, representan un buen negocio para todos.

Y aunque entre Contrapedal en Uruguay y Estéreo Picnic en Colombia se podría pensar que hay más diferencias que semejanzas, lo que los une es esta clara intención por crear eventos que vuelvan más sólida la escena musical de cada país, apoyar a bandas emergentes y consolidadas, cada uno con una identidad muy definida y peculiar, pero un aire latinoamericano siempre presente. Esfuerzos en apariencia aislados que al final se reúnen para escribir páginas en la historia de la música en América Latina.