Después de tres años de su fundación y dos lanzamientos con artistas de talla internacional, en CommonSense Records hemos apartado la parafernalia de la industria musical para centrarnos en lo que más importante y que muchos han olvidado: El sonido y su intención.
Nuestro nuevo release puede escucharse en Bandcamp, Beatport, Spotify y Apple Music. El mismo contiene tracks de artistas tan diferentes que tuvieron una convergencia en una compilación que no solo explica las situaciones divergentes de un año complicado – por no ahondar más-, si no la necesidad de expresarse en tiempos tan sofocantes como los que vivimos. El techno no ha muerto, la cultura techno no ha muerto, la estética techno no ha muerto; su evolución, por otro lado, es inminente.
Los talentos que se encuentran dentro de esta publicación tomaron la estética oscura, cruda y sincera del género para expresarse, teniendo inspiraciones distintas para llegar a un resultado coherente entre todas sus partes, en este caso no solo hablamos de la música, si no de los involucrados que ayudaron a pulir esta sinergia.
Hablamos de la artista pictórica Denisse Noriega y el DJ y productor Peter Van Hoesen quienes haciendo uso de su cosmovisión, lograron generar un ensamble de todos los elementos expuestos en la publicación.
Denisse, por medio de la expresión capturada desde el pincel y las herramientas digitales, nos da una pieza que resembla a un espejismo por el lenguaje de segundo grado. La pieza de la misma pieza y su abstracción, una sincera vista de la torcida realidad y del resultado de ésta, el arte.
Peter, por otro lado, logró capturar la esencia de cada track, destacando sus elementos más oscuros pero cautivadores. Haciendo uso de su privilegiado oído y de su basta experiencia en lo que a sonido se refiere, crea una experiencia única para el escucha, dando como resultado un viaje a través de sentimientos, experiencias y catarsis.
La experiencia comienza con Menade, un track de corte contemplativo hecho por Sim0nimo y Alejandro Franco en su nuevo proyecto CSSS -CommonSenseSoundSystem-, secuencias robóticas con un ritmo extenuante que configura un ritual único, el ritual de la búsqueda por el toque divino. De ahí el nombre, Las Ménades eran mujeres o ninfas poseídas por Dionisio en los rituales griegos en honor a esta deidad.
Lorely Mur toma la batuta dándonos, un ejemplo claro de que el techno debe de ser divergente, de que el artista debe de contemplar y contemplarse desde distintos ángulos. Dejando su característico estilo duro y melódico, nos entrega una pieza de seriedad atemorizante, con un kick duro y frío acompañado de un bajo estruendoso y disonante. Las percusiones de la productora y dj proveniente de Chihuahua son este elemento que te hace dar razón a lo que estás escuchando, lo duro y oscuro que esta fusión de elementos dan como resultado.
Asylum X nos regala un track que contiene elementos característicos de muchas fases y temporalidades del Techno. Desde los años 80 con sus claps y hi-hats, pasando por el sonido del kick que recuerda a estos tracks emblemáticos de los noventas. Mientras esos sonidos de los secuenciadores repitiendose una y otra vez como un tren nos llevan de la mano en este lugar de eco y reverberación absoluta.
Por otro lado, Sim0nimo entrega un track de elementos contados pero con un ejercicio de exploración e imaginación clara, sacarles el mayor jugo posible. Innervision tiene una intención obvia que se encuentra en el sonido, contemplarse desde el subconsciente. Es un track para la divergencia de las ideas, los sentires, los placeres, que el caos reine de forma ordenada. Es una paradoja expresada, sin busqueda de origenes o finales, pero con la carencia de ingenuidad al no invisibilizar la existencia de estos.
Volster nos lleva a un estado explícito, bailar es lo único que importa. Con The Mirror no hay tiempo para pensar en nada más, el ritmo se apodera de los sentidos, no hay una interpretación, sentimiento o exploración ajena al baile, no hay escapatoria, estás a merced del sonido, de sus percusiones, de sus texturas y del ingenio de su autor.
El productor Billy Spike Iland nos da uno de los tracks más fuertes de la compilación, sus sonidos que dejan ver una secuencia que tiene todo aceitado de forma extraordinaria asemejan a lo que pensaría yo que debe de ser un viaje por el espacio. En DX08 todo pasa pero de forma controlada, no hay un solo sonido fuera de su lugar o intención. Un bajo que estremece por su crudeza y un ritmo que expresa la locura de la existencia misma, estamos condenados a vivir y también a danzar.
Alejandro Franco nos entrega un track que tiene una fuerza descomunal pero que no es expresada de la forma más obvia, hace uso del ingenio para poder desarrollar sus elementos de una forma completamente exsacerbada pero classy, como acostumbra. DSR hace que sus elementos disonantes logren introducirse en esta estructura meca-orgánica para llevarnos de la mano a lo desconocido.
Por otro lado, Ultrastation nos entrega Alert System, una oda al acid. Un pattern de percusiones que asemejan a un niño jugando en la obscuridad, inocente, pero sin temor. Desprende una energía brutal que, aunque por momentos parece mesurada, en realidad está haciéndonos caer en su trampa. El uso sensacional del 303 me recuerda porque es una de las herramientas más usadas en la industria, por su increíble maniobrabilidad para expresar ritmos.
Trash And lesboy nos lleva a una cadencia de estupor cada que el kick resuena. Bad Reputation saca lo más distintivo del género acid, el ritmo sucio que todos recordamos dentro de un club oscuro. La fuerza impregnada en este track rememora lo imponente de la noche y sus rituales.
Para finalizar, Asteria es ese track que toma las razones correctas para expresar en el Acid Techno el sentimiento de catarsis que cualquier pista de baile serio usa como soundtrack. SÜSS, reimagina el acid desde sus orígenes para poder entregarnos una pieza seria que no busca caer en el mismo baúl que todos los tracks de acid.
En CommonSense Records esperamos que encuentren la satisfacción de saber que el techno no solo sigue vivo, si no que ya evolucionó. Somos parte de él, pero ahora solo podemos observar maravillados su nueva fase.