A través de un comunicado de prensa, el gobierno canadiense afirmó que a partir del 9 de agosto reabrirá sus fronteras a los viajeros internacionales con objetivos no esenciales en sus tierras. Los estadounidenses vacunados podrán ingresar a Canadá a partir de ese mismo día, mientras que los viajeros internacionales podrán entrar a partir de septiembre.
Sin embargo, en ambos pasos será estrictamente necesario proporcionar un comprobante de vacunación y una prueba negativa de COVID-19 previo a su llegada. Finalmente un cambio dentro de las fronteras canadienses, las cuales se mantuvieron cerradas a no ciudadanos y residentes desde que comenzó la pandemia, en marzo del 2020.
“Los canadienses han trabajado duro y se han sacrificado unos por otros, y gracias a ese trabajo, podemos dar estos próximos pasos de manera segura”, dijo la ministra de Salud, Patty Hajdu, en un comunicado de prensa.