Hoy se llevó a cabo el Apple Event en el Auditorio Steve Jobs en Palo Alto, California, la conferencia más importante del año para la compañía de la manzana. Durante el evento se revelaron tres nuevos diseños del iPhone X y un Apple Watch completamente nuevo.
Los precios para el iPhone XR comienzan en los $749 dólares, los del iPhone XS en $999 dólares y el iPhone XS Max en $1,099 dólares. Los tres modelos saldrán a la venta el próximo viernes 21 de septiembre.
Tal como sucedió con los pasados iPhone, Apple ha anunciado dos nuevos diseños que vienen a modificar en pequeños aspectos técnicos y de diseño a su última línea de teléfonos, sólo que ahora han apartado el sufijo ‘Plus’ y lo han sustituido por ‘Max’. Volvemos a ver un modelo de tamaño más contenido, 5,8 pulgadas; y otro algo más robusto, 6,5 pulgadas. De la misma manera que lo vimos con el iPhone 8 y el iPhone 8 Plus, pero ahora con la dupla del iPhone XS y el iPhone XS Plus.
El iPhone XS mantiene el tamaño que ya vimos en el iPhone X. La resolución de este modelo más contenido es de 2436 por 1125, lo que supone una densidad de 438 ppi y tiene una resolución de 2688 x 1242 píxeles.
El motor de estos nuevos terminales será el A12 Bionic, construido por primera vez con arquitectura de 7 nanometros. Este procesador hace 5,000 billones de operaciones por segundo gracias a los 6,900 millones de transistores que incorpora. Apple promete con esto un mayor rendimiento y eficiencia energética.
Aunado a ello, se han anunciado mejoras en las cámaras con un solo sensor en su Pixel 2XL. También se integrarán dos sensores, angular y de telefoto, ambos de 12 megapixeles. El primero cuenta con una apertura focal de f/1.6 y pixeles de 1,4 micras de tamaño. El secundario, que ofrece zoom óptico de dos aumentos, cuenta también con estabilización de imagen y f/2.4 de apertura.
Se trata de una variante de los Xs enfocada a la gama media y los mercados emergentes, y con más colorido que los nuevos buques insignia, con cinco variaciones en su gama de tintes: negro, blanco, rojo, amarillo, azul y verde.
Su pantalla es de 6,1 pulgadas y utiliza una tecnología LCD. Es la misma tecnología que Apple integraba hasta ahora en el resto de sus teléfonos salvo por el iPhone X que utiliza una pantalla OLED. Aunado a ello sus bordes son de aluminio y no de acero, un material menos resistente.
Sin embargo, la mayor diferencia radica en su cámara, pues sólo tiene una cámara en lugar de dos.