Recientemente el periódico El Universal informó que se le vio a Alejandro González Iñárritu filmando lo que será su próxima película en la Ciudad de México, particularmente en el Castillo de Chapultepec y algunas calles del Centro Histórico.
Pese a que los datos acerca del film aún permanecen ocultos, se dice que el director incluyó un lote ecléctico de referencias que incluye vestuarios de la década de los años 90, recortes de cartón que figuras políticas como el expresidente Carlos Salinas de Gortari y José López Portillo. Así como un set repleto de piezas características de los diversos personajes de Chespirito, como la puerta de La Bruja del 71 y el barril de El Chavo del Ocho.
El reporte también incluye que se le vio a Iñárritu acompañado del director de fotografía Bradford Young, conocido por proyectos como Selma (2014), Solo: A Star Wars Story (2018) y Arrival (2016), el cual le valió a Young una nominación a los Premios de la Academia.
Este podría ser su primer largometraje luego de cinco años de The Revenant (2015), última producción a cargo del mexicano que fue acreedora de tres premios Oscar por Mejor Director, Mejor Fotografía y Mejor Actor, cuya estatuilla se la llevó Leonardo DiCaprio. El cineasta, cabe añadir, se convirtió en el tercer director de la historia, y el primero desde 1950, en ganar premios de la Academia consecutivos con Birdman (La virtud inesperada de la ignorancia) en 2014 y The Revenant en 2015.
Desde entonces, Iñárritu solo ha dirigido el cortometraje de realidad virtual Carne y Arena (2015), en conjunto con Emmanuel Lubezki. Se trataba de una experiencia donde los productores recrearon el tránsito que hacen los migrantes de países bajos para llegar a Estados Unidos. Fue presentada en el Centro Cultural Universitario de Tlatelolco de la UNAM y fungió como una de las muestras más costosas de la institución; dicha exposición le ha valido obtener un Oscar Honorífico.
Si este misterioso proyecto llega a buen término, no solo sería el esperado regreso de Iñárritu a la realización de películas, sino también su primera película ambientada en México desde Babel en 2006, protagonizada por Brad Pitt y Cate Blanchett.