En 2013, la marca británica Topshop utilizó sin permiso una fotografía de Rihanna durante la grabación del video ‘We Found Love’ para ilustrar una blusa, hecho por el que la intérprete barbadense demandó a la compañía por 3.3 millones de libras (5 millones de dólares).
En julio de 2013 una corte falló a favor de Rihanna, pero Topshop apeló el veredicto y continuó la batalla legal por más de un año, hasta que el día de hoy el Tribunal de Apelación desestimó el recurso de Topshop y prohibió la venta de la camiseta.
Definitivamente grandes noticias para Rihanna, ya que el lanzamiento de estas prendas podría dar la idea de que formaba parte de Topshop, hecho que perjudicaría su actual contrato como directora creativa de Puma.
Texto: @J_Ismael_ Canales