De repente, como si 40 años de archivo fotográfico, videográfico, sonoro e impreso hubieran desaparecido, Roger Water ha sido señalado por hacer apología de nazismo en una reciente discusión de redes sociales. Sí, por difícil que parezca, es lo que está pasando.
Todo empezó cuando una usuaria de Twitter publicó un fragmento de la gira más reciente del ex miembro de Pink Floyd en el que utiliza indumentaria que hace referencia al uniforme de la SS mientras tocaba la canción ”Run Like Hell”. El video es acompañado de un mensaje que lo acusa de enaltecer al nazismo.
La última "gracia" de Roger Waters: en su concierto de ayer en Berlín se vistió de nazi. Así es, se puso el uniforme de las SS.
Su estándar moral es más que dudoso, pues apoya tmbn la invasión rusa a Ucrania y defiende la "democracia" de Venezuela entre otras dictaduras.
En… pic.twitter.com/LRLzB80ivJ
— Gil Artzyeli (@Gil_Artzyeli) May 24, 2023
La publicación cobró fuerza de inmediato en medio de las polémicas que califican a Roger Waters como antisemita y simpatizante del régimen de Vladimir Putin en Rusia, mismas que tienen una serie de declaraciones de parte del inglés que sí justificarían dichos calificativos; sin embargo, en el caso específico del traje que guiña a la SS, se nota un claro desconocimiento de las inquietudes artística del músico y de su historia dentro de la música, ya que dicho performance pertenece a un número del show de The Wall, una obra sonora cuyo principal móvil es la protesta y la sátira contra el fascismo, las dictaduras y por supuesto, el nazismo.
Un show que de hecho ha sucedido desde principios de los 80 y que tiene un sin fin de montajes de diferentes épocas a cargo del mismo Roger Waters, por lo que fans y no tan fans de Pink Floyd alegan que en todo caso, de ser fundamentadas las acusaciones, llegan casi 45 años tarde.
Por su parte, se dio a conocer que la policía de Berlín ha iniciado una investigación para determinar si dicha presentación realmente hace apología del nazismo, dado que en Alemania están prohibidos todos los símbolos y objetos que tengan relación con dicha ideología de guerra.
Mientras tanto, el mismo Roger Waters ha respondido aludiendo que todo es parte de una campaña de desprestigio y censura dadas sus posturas (las relacionadas con el antisemitismo y el apoyo a Putin), por lo que su autodefensa tampoco le ha ayudado mucho.
A la espera de que se determine algo, parece que las fechas del tour This Is Not A Drill seguirán adelante.