Para bien o para mal, el tema de los espectáculos en vivo en México ya es parte de la agenda diaria: ya se porque se anuncia un show muy esperado o por alguna polémica, la industria está atravesando por una época caótica y todo indica que tardará un rato en asentarse; situación en la que, por desgracia, los fans parecen ser los más afectados.
La noticia de la semana es el anuncio de los precios oficiales para el concierto de Blackpink en la Ciudad de México el próximo 26 de abril en el Foro Sol; y es que de inmediato llamó la atención el número de secciones en los que fragmentarán al público y, en consecuencia, los precios exorbitantes que cobrarán para acceder a ellas.
Cantidades que van desde los 850 pesos hasta los 29 mil 500 (más cargos por servicios) reavivaron la discusión sobre los abusos de promotoras y boleteras:
Ante la pregunta de qué incluyen los boletos que rozan los 30 mil pesos, la cuenta oficial de OCESA K Pop explicó que los beneficios son accesos especiales, preventas de mercancía y algunos regalos:
¡#BLINKS, este es el mapa y precios para el #BORNPINK World Tour en México! 🖤💖
¿Listxs para ver a @BLACKPINK en el Foro Sol?
Recuerda:
✨Venta BLINK MEMBERSHIP: 07 febrero – 11:00am
✨Venta General: 09 febrero – 2:00pm pic.twitter.com/5VQin4anBR— OCESA K-pop (@ocesa_kpop) February 7, 2023
A partir de esta situación, las fans de Blackpink han señalado este show como inaccesible para la mayoría de los bolsillos mexicanos y mostraron preocupación ante la posibilidad de que sus boletos sean clonados aún pagando los paquetes que llegan a las cinco cifras.
Cabe aclarar que en esta ocasión no habrá preventa a través de un banco, sino que será vía el sistema de fans de la agrupación surcoreana, para darle paso a la venta general solo dos días después.
El incremento en los costos de los boletos es algo que está aquejando a todo el mundo: apenas hace unos días, miles de usuarios en redes sociales expresaron su molestia respecto a los precios de los próximos tours de Madonna y Beyonce: mismos que gravitan en un rango entre los 50 y los mil dólares (entre los mil y los 20 mil pesos mexicanos, aproximadamente).
Esto ha desencadenado una reflexión sobre si vale la pena pagar esas cantidades por asistir a un concierto y, por otro lado, si valdría la pena empezar a tomar acciones civiles (como el boicot) para revertir una situación que cada vez trae más problemas que beneficios para una pasión tan pura como la que se puede tener por la música.