El reinado de Elon Musk en Twitter llega a su tercera semana, la cual arrancó con el impulsivo CEO despidiendo a empleados que públicamente y en privado lo han criticado, además de enviar básicamente un ultimátum al personal de la compañía para que se cuadren con su visión 2.0 de la red social.
El nuevo episodio del drama arrancó el pasado domingo cuando Musk pio una “disculpa” por lo lento que ha estado Twitter en algunos países, solo para ser corregido por el ahora ex empleado Eri Frohnhoefer, lo que desató un intercambio de píos que concluyó con Musk simplemente escribiendo “está despedido” en un tuit que después borró.
I have spent ~6yrs working on Twitter for Android and can say this is wrong. https://t.co/sh30ZxpD0N
— Eric Frohnhoefer (@EricFrohnhoefer) November 13, 2022
Ben Leib otro ingeniero que igualmente cuestionó la información que Musk compartió en su disculpa, también fue despedido. Y luego está Sasha Solomon, quien fuera hasta ese momento “tech lead” en Twitter y quien básicamente culpó a Musk de provocar la situación por la que se disculpaba, al recalcar que fue él quien despidió a casi todo el personal de infraestructura. Solomon al otro día anunció que fue despedida y restringió su cuenta.
https://twitter.com/bgleib/status/1591875679377031169
Acto seguido, Musk pidió a sus allegados recolectar cuento mensaje encontrarán en el chat interno de Slack que fuera crítico de su manejo de Twitter, de acuerdo a Platformer. La madrugada del 15 de noviembre varios empleados recibieron correos mencionándoles que fueron despedidos, debido a que su comportamiento reciente violó la política de la compañía.
El respiró para quienes se salvaron de esta nueva purga no duró mucho. La madrugada de este miércoles 16 de noviembre Musk mandó un correo a aquellos que siguen empleados, pidiéndoles esencialmente que confirmen en un formulario, de acuerdo al Washington Post que están comprometidos a la nueva cultura de extrema dedicación para construir un Twitter 2.0 – visión que el CEO describe como más enfocada a la ingeniería, en la que aquellos escribiendo estupendo código conformarán la mayoría del equipo y tendrán una mayor influencia.
Musk dio hasta la tarde de este jueves 17 de noviembre para que la gente confirme que quiere seguir en la compañía bajo estas condiciones, y todos aquellos que para la fecha límite no contesten, serán despedidos con compensación de tres meses de sueldo.
Recordemos que hace dos semanas Musk despidió a la mitad de los empleados globales de Twitter (algunos de los cuales caóticamente tuvieron que recontratar) y que lanzó una nueva versión de la subscripción Twitter Blue que predeciblemente desembocó en tal desastre que tuvo que retirarla, aunque ahora amenaza con volverla a implementar el próximo 29 de noviembre.